Todo empieza a enturbiarse. Según madura la historia, se conocen más detalles de la dicotomía entre “persona y personaje” que el propio Íñigo Errejón reconocía en su carta. Lo relevante a nivel político es cuánta gente de su partido era consciente de los presuntos delitos que pudo llegar a cometer el dirigente de izquierdas en los últimos años. En concreto, preocupa si, más allá de saberlo, pudiera haber implicados. Por el momento, Loreto Arenillas, la ex jefa de gabinete de comunicación de Errejón en su etapa de Podemos, dejó todos sus cargos este viernes por “tapar” al menos una de las agresiones sexistas. La supuesta encubridora de Errejón mantuvo una “relación íntima” con el político durante años, según varias fuentes de Sumar. Por eso se habría afanado en impedir su caída pese al historial del dirigente de izquierdas.
En paralelo, cada vez más voces de Sumar sugieren que Yolanda Díaz fue informada de actuaciones inapropiadas de Errejón, pero que evitó apartarle de sus responsabilidades. “Te puede dar muchos problemas”, le aseguraron, según diversas fuentes consultadas por Artículo14. “Lo sabía y se lo advirtieron”, insisten. “Era muy difícil tener certezas de todo lo que está saliendo ahora”, se reivindican desde el entorno de la vicepresidenta. No poco dirigentes consideran que las explicaciones han sido escasas y que ha de dar la cara.
Este sábado, en una comparecencia extraordinaria, Sumar pidió por primera vez disculpas y confirmó que no se aplicaron los controles internos, como avanzó este periódico. “Las noticias conocidas” sobre el exportavoz parlamentario “son devastadoras para Sumar y para el conjunto de la sociedad y evidencian que los mecanismos internos han fallado”, reconoció Ernest Urtasun, que se comprometió a mejorarlos.
El caso del festival de Castellón
Los testimonios de mujeres presuntamente agredidas sexualmente por Errejón que provocaron su dimisión reflotaron un acontecimiento de 2023 en un festival de Castellón de la Plana. En aquel momento, una mujer viralizó un hilo de mensajes en la red social X denunciando el comportamiento del político: “Viví una situación muy incómoda que se podría calificar como agresión sexista”, aseguró. Coincidió con el político al que no conocía previamente en el festival. Se empezó a aproximar a ella poniendo una mano en la cintura y terminó tocándole el culo sin su consentimiento. Ella relató lo “incómoda” que fue la situación y que “de un manotazo” una amiga le tuvo que quitar la mano de encima. Fueron a denunciar a los organizadores del festival lo acontecido, pero Errejón se había marchado con sus amigos.
No terminó ahí. Al día siguiente, prosiguió relatando la víctima, “me llama una chica que se presenta como Loreto, y me dice que es amiga de Errejón, a lo que yo me quedé bastante cortada. Pidió disculpas por lo que me había pasado y se presentó como ‘mediadora’ para ‘solucionar’ la situación y ‘reparar el daño’ […] Hacia el final de la conversación, ella me estaba diciendo que cada uno tenía su manera de solucionar las cosas, que yo podía hacer lo que quisiese, pero que a ella personalmente el ‘escarnio’ público no le parecía la manera más adecuada. Cansada de la conversación, le dije que me pensaría entrar en esa ‘mediación’ y la avisaría cuando tomase una decisión”.
Se refería la chica a Loreto Arenillas, hasta este viernes portavoz de feminismo de Más Madrid y diputada en la Asamblea. Ante esta circunstancia, Más Madrid, formación integrante de Sumar, aclaró en un comunicado que Arenillas inició un proceso de “mediación” a título personal para aclarar lo sucedido entre las denunciantes y Errejón: “Este proceso fue insatisfactorio para ellas y poco después la acusación de agresión se hizo pública en redes sociales, sin que en ningún momento informase al partido de las acusaciones o de este proceso”, aseguraron.
“Días después, tras conocer el partido la acusación a través de un hilo de Twitter, nos pusimos en contacto con Loreto Arenillas y le pedimos que pusiera a disposición de las víctimas los mecanismos de denuncia con los que contamos, sin recibir respuesta por parte de ellas, por lo que dimos por cerrado el caso”. La formación reconoció en un comunicado que “no habían hecho las cosas bien” y que valoraban que las explicaciones que dio en su momento no se correspondían con la realidad que se ha conocido en los últimos días. Por eso, explicó Más Madrid, que le exigieron su dimisión como diputada. Como se negó, la cesaron de sus responsabilidades y cargos dentro del partido.
A los minutos, Arenillas publicó su réplica en X quejándose de que su partido no había respetado la presunción de inocencia y anunciando su dimisión como diputada en la Asamblea: “En junio de 2023, no era jefa de gabinete de Íñigo Errejón, pero puse en conocimiento de la entonces secretaria de organización [Manuela Bergerot] y la responsable de feminismos un acto protagonizado por el diputado Íñigo Errejón, información que no consideraron elevar a los órganos del partido”, aseveró. “Hoy me siento el chivo expiatorio para ocultar errores que, sin lugar a duda, hemos cometido en la organización”, sentenció Arenillas en su comunicado.
El periódico El País, a propósito de esta historia, publicó que en las filas de Más Madrid se habló del hilo de X de la mujer denunciante y el mensaje que se transmitió a nivel interno fue que “Loreto lo está parando”. Algo que ratificó Ramón López, miembro de la comisión ejecutiva de Más Madrid Ciudad fuera del partido desde 2023.“Esto es verdad”, afirmó. Hechos que encajan con lo que cuentan voces del entorno a este periódico que aseguran que había “más que amistad” en la relación de Errejón con Arenillas y que por eso ella “lo protegía” pese a todo.