A falta de dos días para que empiece la campaña electoral en Cataluña, en el PP ha surgido una nueva discusión interna. Los protagonistas: el líder de la estructura autonómica y candidato, Alejandro Fernández, y la directora de campaña, Dolors Montserrat. El motivo: la estrategia que se ha de seguir para pegar un subidón en las urnas y superar a Vox en la comunidad.
Mientras que Fernández aboga por centrarlo todo en el choque con el independentismo -cuyos representantes son sus “claros rivales en estas elecciones”, según indicó el lunes en su perfil de X-, Montserrat, impuesta por Génova y de la máxima confianza de Alberto Núñez Feijóo, prefiere ampliar el prisma para hablar también de vivienda, asuntos sociales o inseguridad.
Este roce se ha conocido el mismo día en el que Feijóo ha estado en Barcelona rodeado por los propios Fernández y Montserrat para celebrar el Día de Sant Jordi. Un evento en el que las palabras del líder popular sobre Carles Puigdemont han causado otro revuelo interno.
Y es que al ser preguntado para dar una valoración acerca de las palabras de José Luis Rodríguez Zapatero en las que señalaba que la entrada en prisión del político separatista sería “una mala noticia”, el presidente del PP ha respondido que “no tenemos ningún interés en que la gente esté en prisión sino en que los políticos no se conviertan en caciques que hacen leyes con nombres y apellidos”.
A raíz de ello, el líder de Vox en Cataluña, Ignacio Garriga, ha criticado la falta de claridad de Feijóo, a la vez que ha señalado como “una excelente noticia” el hecho de que “un prófugo de la justicia esté en la cárcel”.
En este sentido, un sector del PP ha pedido “no dar munición a Vox” y “firmeza” contra el separatismo. “Las declaraciones de Feijóo podían llevar al error”, en palabras de un dirigente del PP de Madrid.
Todo ello se produce a las puertas de unas elecciones importantes para la formación popular, que se disputa la cuarta posición en las urnas con Vox, y después de que barones territoriales PP hayan lamentado el resultado de las elecciones vascas y la estrategia, toda vez el partido de Santiago Abascal ha mantenido el escaño en el Parlamento de Vitoria.
Tensión entre Montserrat y Fernández
Las fuentes consultadas en el seno del PPC reconocen que el choque entre Montserrat y Fernández no es nuevo. La primera, con el aval de Génova, esquivó la candidatura regional, pero Feijóo le pidió que controlara la campaña y la confección de las listas electorales. En la dirección nacional siempre han aplaudido desde tiempos de Mariano Rajoy su conocimiento del terreno.
Fernández, que llegó a verse fuera de la candidatura y lanzó un pulso a Génova, cuenta con aliados como Cayetana Álvarez de Toledo, Isabel Díaz Ayuso o José María Aznar.
Tal y como informó este diario, aunque Montserrat tenga ahora el cometido de controlar la estrategia electoral, su objetivo es repetir como cabeza de lista del PP en las elecciones europeas.