La vicepresidenta de la Junta de Castilla y León, Isabel Blanco, ha acusado al Gobierno de “mercadear” con los niños migrantes y ve necesario un control de fronteras, activar la agencia europea Frontex, implementar medidas en origen e incrementar la financiación, algo que, según ha añadido, “no hace el Estado”.
Blanco ha criticado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “ceda permanentemente ante sus socios independentistas las competencias de inmigración para seguir en la Moncloa”.
En el marco de las IV Jornadas de Igualdad que se han desarrollado en el Casino de Salamanca, la vicepresidenta de la Administración autonómica ha recordado que Castilla y León es una “Comunidad de acogida, pero ésta ha de debatirse dentro de los órganos correspondientes, como ha sido hasta el momento”.
Blanco ha recordado que el año pasado fueron 21 los menores que llegaron a Castilla y León en el marco del acuerdo de acogimiento en la Conferencia Sectorial y el año anterior fueron 23. “Entendemos que ese es el órgano en que se tienen que realizar, nunca por imposición y siempre entre todas las comunidades autónomas. El problema es que el estado no realiza las competencias que tienen designadas, no realiza una verdadera política migratoria”, ha lamentado, al tiempo que ha defendido la necesidad de contar con una “política migratoria legal y ordenada”.
De hecho, ha destacado, tras conocerse el lunes los datos del Ministerio del ramo, que son 226.000 los inmigrantes que hay en esta comunidad y “que han venido a aportar”.
La vicepresidenta ha incidido, además, que es obligación de la Junta tratar de que las personas migrantes se integren, apostar por la inclusión y atenderlas “con dignidad”. Preguntada por el acuerdo presupuestario entre PP y Vox en la Comunidad Valenciana por el que se niegan a acoger a más menores, la vicepresidenta ha reafirmado que Castilla y León es una “tierra de acogida” y “va a seguir haciendo lo mismo que ha hecho hasta ahora en materia migratoria, con Vox y sin Vox en el Gobierno”.