En enero de 2024, el mundo asistió al histórico momento en que Margarita de Dinamarca, tras más de cinco décadas de reinado, anunció su abdicación. Su reinado, marcado por la modernización y la cercanía con el pueblo danés, dejó una huella imborrable en la historia y el corazón de Dinamarca. Sin embargo, lejos de apagarse tras su retiro, la actual vida de la reina emérita le permite dedicarse en cuerpo y alma a sus dos grandes pasiones: la escritura y la pintura.
¿Por qué abdicó la reina Margarita de Dinamarca?
La decisión de abdicar de un rey siempre plantea preguntas. En el caso de Margarita II de Dinamarca, su abdicación no fue una excepción y dejó a muchos daneses y observadores internacionales buscando respuestas. Aunque siempre se mantuvo firme y digna, y afirmó que solo la muerte podría separarle de su labor real, la realidad es que detrás de su decisión se esconden motivos tanto personales como institucionales.
Antes de su abdicación, Margarita II había sido la indiscutible cara de la monarquía danesa durante casi medio siglo. Bajo su reinado, Dinamarca sufrió profundos cambios sociales, económicos y tecnológicos, manteniéndose siempre como un país estable y próspero en el escenario europeo. Sin embargo, tras décadas de servicio, la reina comenzó a enfrentarse a desafíos personales, especialmente derivados de sus problemas de salud.
Aunque oficialmente nunca se detallaron todas las razones de la abdicación de Margarita de Dinamarca, en su discurso de Nochevieja el pasado 31 de diciembre de 2023 —donde anunció la noticia— dejó entrever una combinación de motivos personales (salud) e institucionales (asegurar una transición suave y ordenada del trono). Margarita II siempre demostró una profunda comprensión de la responsabilidad que conlleva la corona, pero el tiempo pasa para todos.
La abdicación de Margarita II se realizó con la dignidad y la gracia que la caracterizaron durante su reinado. Su hijo, Federico X, asumió el trono e inició una nueva era para Dinamarca. La transición fue recibida con respeto y aprecio por parte del pueblo danés, que siempre valoró la dedicación y el servicio de Margarita a la nación. No obstante, la ahora reina emérita, liberada de las responsabilidades oficiales, va a poder dedicarse de lleno a sus intereses personales y sus pasiones, todas ellas relacionadas con el mundo del arte.
Las grandes pasiones de Margarita de Dinamarca
Tras su abdicación, la reina emérita Margarita II no ha desaparecido completamente del foco público, pero seguramente ha canalizado su energía y su tiempo para dedicarlo a sus dos grandes pasiones: la escritura y la pintura.
La escritura ha sido una constante en la vida de Margarita de Dinamarca, una pasión que seguramente se ha intensificado tras su abdicación. Empleando el pseudónimo de Ingahild Grathmer, la reina emérita ha escrito una serie de relatos de ficción como Todos los hombres son mortales (1981), El valle (1988), El bosque (1989) y Los prados (1989).
Igualmente significativa es la contribución de Margarita II al mundo de la pintura. A lo largo de los años, ha realizado numerosas exposiciones y han incluido sus obras en ediciones ilustradas de obras tan importantes como la trilogía de El Señor de los Anillos, de J.R.R. Tolkien.