Las filtraciones respecto a las conversaciones entre el Rey Juan Carlos y Bárbara Rey han buscado deteriorar la imagen de la Corona, un daño que los partidos de izquierda han potenciado con iniciativas parlamentarias. Podemos ha anunciado que pedirá la desclasificación de los documentos del 23-F tras algunas frases pronunciadas por el padre de Felipe VI respecto al general Armada.
Frente a los ataques, la estrategia de Zarzuela es guardar silencio, como es habitual -en contadas ocasiones la Casa ha publicado un comunicado para desmentir o considerar la publicación de algún medio- y contestar con agenda.
En esta semana, particularmente, la agenda de quien sigue siendo un activo para la Corona. Es significativo que la Reina Sofía asuma un papel protagonista, como también lo es que Doña Letizia apenas tenga dos actos: acompañará al Rey el próximo jueves en la entrega de los premios Nacionales de Cultura y el sábado presidirá junto al Rey los actos con motivo de la celebración de la Fiesta Nacional. De esta manera, el foco informativo caerá más sobre Doña Sofía y sus actos institucionales tendrán más visibilidad.
El gesto silencioso de la Reina hacia su suegra no ha sido el único, aunque con voz. Ha sido el caso de la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien en el acto de la UME presidido por la Reina este lunes le dedicó estas palabras:
“Estamos con usted. Con ese apoyo que siempre ha prestado a las Fuerzas Armadas. Siendo siempre un ejemplo de entrega y de solidaridad. Gracias a usted, y a su trabajo, que en un día como hoy yo quiero agradecer muy especialmente, todas nuestras Fuerzas Armadas nos sentimos orgullosos de usted, de su hijo, el Jefe del Estado, el Rey Don Felipe y también de la Princesa de Asturias, la Princesa Leonor. Ellos siguen y seguirán siempre su ejemplo. Por tanto, a usted, y en este momento, nuestro cariño a usted y nuestro agradecimiento”.
Llamó la atención el gesto que tuvo Doña Sofía al incluir en su vestimenta el broche que Franco le regaló en 1962 su boda con el Rey Juan Carlos. Un broche diseñado por el joyero galo Pierre Sterlé, que presenta en el centro un zafiro de corte cabujón al que rodea una orla de brillantes. La madre de Felipe VI lo ha lucido en distintas ocasiones, como en la boda de Hussein de Jordania y Rajwa el Saif en 2023, a la que asistió en compañía del Rey Emérito. O con motivo del bautizo de Don Felipe. Al lucir este adorno, Doña Sofía lanza un mensaje con el que reafirma su compromiso con la Corona.
Desde el entorno de la Reina Sofía afirman que la madre de Felipe VI ha encajado el golpe público con sin dramas. “Está muy bien, ahora lo que más le ilusiona es centrarse en su agenda propia”, comentan. Durante el Reinado de Don Juan Carlos su prioridad era acompañar y apoyar al entonces Rey, pero tras su abdicación y retiro de la agenda pública la agenda de Doña Sofía ha cobrado una mayor independencia.
El próximo acto que presidirá será este martes: presidirá la entrega de los Premios Mapfre. El viernes, al término de la semana, hará entrega de los premios Reina Sofía de Composición Musical, un certamen organizado para estimular la creación dentro del panorama musical actual, con una dotación económica de 100.000 €. Según la web, “la más importante a nivel europeo”, para el compositor ganador.
La siguiente semana se dedicará a las áreas que más le interesan y en las que encuentra su desarrollo también a nivel personal: el banco de alimentos. El día 17 irá a Segovia y el 22 a Jaén, para conocer la labor de ayuda a los más desfavorecidos en estas regiones. Además de dedicarse por entero a su Fundación, Doña Sofía percibe por parte de los Presupuestos Generales del Estado 125.429 euros anuales para desarrollar su labor institucional, que se centra en la ayuda a los desfavorecidos, el medio ambiente y la investigación sobre temas de salud como el Alzheimer. Para finalizar el mes, asistirá a los premios Princesa de Asturias, como es tradición.