Guerra comercial

El Gobierno sondea un viaje de los Reyes a EE UU para suavizar la relación

Moncloa compartió a mediados de marzo con un grupo de empresarios la conveniencia de reactivar la visita que se suspendió por la pandemia y así recomponer relaciones con la administración Trump

Los Reyes, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, frente a la Casa Blanca
Kiloycuarto

En las relaciones con Estados Unidos los Reyes son un activo y el Ejecutivo lo sabe. Pese a que los lazos entre Donald Trump y el presidente Pedro Sánchez no son los más afines, ni España es un país prioritario para Trump a nivel político -en su primera ronda de contactos España quedó fuera de nueve países europeos y Marruecos-, sí lo es a nivel geoestratégico.

Fuentes empresariales cercanas al Ejecutivo de Sánchez informan de que, a mediados de marzo, cuando aún Trump no había interpuesto al mundo sus aranceles, miembros del Gobierno próximos a Presidencia pulsaron la conveniencia de suavizar los lazos con EEUU. La necesidad de aumentar en Defensa era trending topic, y Sánchez mantenía sucesivas reuniones con los miembros de una Comisión Europea cada vez más exigente.

Según informan, los miembros del Ejecutivo de Sánchez pusieron sobre la mesa, con preocupación, el hecho de que el presidente estadounidense hubiese incluido a España dentro de los BRICS -grupo de potencias emergentes entre las que se encuentra China-, confundiera a los españoles con los latinoamericanos, o exigiera a los países europeos llegar al 5% del gasto en Defensa cuando España se mantiene en un 1,28%. Y, también se miró con cierta intranquilidad, el hecho de que Marruecos sea un aliado preferente para EE UU, a la vez que en Cádiz EE UU tiene la base naval de Rota, punto decisivo para operaciones militares en Europa, Norte de África y Oriente Próximo.

Los Reyes, durante su reunión con Trump en el despacho oval
El matrimonio Trump, junto a los Reyes en el despacho oval en 2018
Efe

En esta línea, expusieron la conveniencia de que se retomase el viaje de Estado que se canceló por el Covid en 2020. Esta invitación se cursó en 2018, durante la visita al Despacho Oval que los Reyes realizaron dentro de su viaje por Estados Unidos. “Nuestra relación ha sido sobresaliente a lo largo de los años y, creo, especialmente ahora. Unas relaciones comerciales y militares excelentes”, aseveró Trump, aunque en estos momentos pueda resultar paradójico. “Todo lo que se puede tener, así que nos encanta España y es realmente un tremendo honor tenerlos aquí”. En aquel momento dichas frases aportaron alivio a España, ya que las políticas proteccionistas de Trump respecto a la aceituna negra española por las acusaciones de dumping tuvo un impacto devastador en la política española. Arancel que, por cierto, se mantiene.

Acercamiento de Sánchez a China 

La velocidad a la que se mueve el tablero internacional desde que Trump fuera investido en enero provoca que todo pueda cambiar en cuestión de semanas. Las empresas y los gobiernos de los países europeos planifican la estrategia frente a los aranceles del 20% establecidos por el magnate, y fijan posiciones. En el caso de España, el presidente se encuentra de viaje en China, lo que daría motivos a Trump para incluirnos en el grupo de los BRICS. El gigante asiático es la “obsesión” de Trump, lo que se evidencia en gestos como que haya permitido a los países europeos un plazo de 90 días, mientras que a China se los mantiene en un 125%.

El secretario de Estado del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, ha asegurado que el acercamiento de España a China sería un “error clarísimo”, mientras el presidente se erige como el representante europeo en las relaciones con el país asiático, desde el que afirma que “las guerras comerciales no benefician a nadie”. Las buenas relaciones bilaterales con China no se han propiciado recientemente, si no que se trabajan desde hace tiempo, fomentadas por el ex presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, a través de la institución Gate Center, que fundó junto a un empresario chino investigado por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).

Además, desde principios de año, el Gobierno español y el chino han trabajado en la planificación de un viaje de Estado de los Reyes a China, que tendrá lugar a finales de año. Esto respaldaría las recientes declaraciones del ex presidente Zapatero, en entrevistas por la promoción de su libro, en las que instó a Europa a posicionarse  en el multilateralismo entre China y EE UU.

En esta línea, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y el secretario de Estado de EE UU, Marco Rubio, mantuvieron recientemente una conversación telefónica sobre las relaciones bilaterales de ambos países que Albares tildó de excelente.

Pedro Sánchez, a su llegada a China
Efe

El viaje de Estado suspendido por el Covid habría supuesto que Trump se reuniera con los Reyes en dos ocasiones, mientras que nunca lo ha hecho con Pedro Sánchez. Y en los pocos contactos públicos en los que han coincidido la conversación ha sido escasa, tal y como se reflejó en la cumbre del G-20 en 2019, cuando el presidente estadounidense le indicó a Sánchez que se sentara.

La relación pública entre el Felipe VI y Trump se ha mantenido en algunas ocasiones posteriores al encuentro de 2018 en la Casa Blanca. Felipe VI envió una carta al aún no elegido presidente durante un acto en Pensilvania en 2024, el pasado 14 de julio, debido al intento de magnicidio contra el presidente mientras pronunciaba un discurso durante su campaña. El Monarca se presentó “conmocionado”,  transmitió su “más enérgica condena” ante cualquier acto de violencia y le trasladó su más “alta consideración y estima”, al igual que durante su investidura el pasado 20 de enero. “Estoy seguro de que, durante vuestro nuevo mandato, las relaciones entre España y Estados Unidos continuarán fortaleciéndose con el objetivo de promover el bienestar y la prosperidad mutua de nuestros pueblos”, le trasladó el Rey.

El matrimonio Trump, junto a la Reina de Inglaterra / Efe
Efe

A Trump le gusta la realeza

Independientemente de que una visita de Estado represente el viaje de más alto nivel entre dos naciones, a Donald Trump le gusta la realeza -en 2019, fue el primer líder extranjero en recibido por  Naruhito tras su ascenso al trono-. No en vano, el primer ministro británico,  Keir Starmer, el mismo 1 de marzo en su visita a la Casa Blanca -apenas diez días después de que el magnate tomara posesión de su cargo-,  le trasladó la invitación, cursada por Carlos III, para una próxima visita de Estado. «Es una invitación para una segunda visita de Estado. Esto es muy especial. Nunca ha ocurrido antes. No tiene precedentes. Y creo que simboliza la fortaleza de nuestra relación», declaró el líder laborista al entregar la carta al mandatario. Trump aceptó la invitación, convirtiéndose en el único presidente en realizar dos viajes de Estado a Reino Unido. “Espero estar allí y honrar al país”, agradeció.