El objetivo de los Reyes en su regreso a la zona cero tras el paso de la DANA es claro: pulsar la situación de los vecinos y escuchar sus testimonios de primera mano. Después de su dura visita a Paiporta, el recibimiento en las localidades de Chiva, Utiel y Letur (Albacete) ha sido muy diferente. Además de que los ánimos estaban más serenos, la gratitud de la gente tras la actitud de los Reyes hace 15 días, quedándose a hablar con el pueblo pese a recibir botellas, palos y bolas de barro, se notaba.
En Chiva, la primera parada en la mañana de este martes, el encuentro de los Reyes con el matrimonio de Diana y Sergio ha sido un ejemplo. Su casa se encuentra justo en el borde del barranco del Poyo y el agua se adentró en su vivienda arrasando todo lo que encontraba a su paso. Ellos, y su hija pequeña Dafne, de cuatro años, también habrían sido arrastrados por la corriente de no ser porque consiguieron escapar gracias a una escalera que conducía a un piso más elevado.
La Casa de Diana y Sergio.
Los Reyes caminaban junto al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, la alcaldesa de Chiva, Amparo Fort, y el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres. Según ha informado después Diana a algunos periodistas muy próximos a ellos, la alcaldesa y el presidente aconsejaron a los Reyes continuar su paso, bajo el argumento de que aún quedaba mucho trayecto que recorrer, pero Don Felipe y Doña Letizia se detuvieron y entraron a conocer el estado de la vivienda. “Yo estaba en la puerta y ella ha venido directa a mí”, explicó, refiriéndose a la Reina.
El Rey le reconoció tener “una casa muy bonita”, y afirmó: “y lo va a volver a ser”, según contó visiblemente sorprendida de la cercanía del Jefe del Estado y Doña Letizia. Por el contrario, Diana se mostró muy crítica con el hecho de que ni Mazón ni la alcaldesa se acercaran a hablar con ellos. La Reina, explicó, dio un paso más, y apremió al arquitecto municipal que los acompañaba a agilizar los trámites para que puedan reconstruir su casa. Para asegurarse de que sus palabras no quedaran en el aire, aseguró a Diana antes de marcharse: “Dentro de tres meses voy a llamar para preguntar por tu casa”.
“Yo tengo paciencia, pero que se agilicen las cosas”, se ha quejado. “No puede ser que tenga que estar todos los días yendo a presentar documentos”.
La Casa de Diana y Sergio
Tras la visita de los Reyes a Paiporta, este regreso levantó mucha expectación mediática, que provocó las quejas de los vecinos, ya que no podían ver bien a los Reyes al comienzo de la visita ante la afluencia de las cámaras. “Vienen a ver al pueblo, no a los periodistas”, lamentaban algunos en voz alta. Finalmente, la situación se ha reconducido y los Reyes se han abierto paso para hablar con el mayor número posible de afectados. En el trayecto, en más de una ocasión, el Monarca ha sido realista: “Queda aún mucho por hacer”, ha recordado, además de remarcar que la prioridad es hacer seguimiento de la situación.
A diferencia de la última visita en Paiporta, los vecinos se mostraban muy emocionados con la llegada de los Reyes, 15 días después. Pese a que la frustración sea la misma, y que en Chiva fue el lugar de origen de la catástrofe que terminó asolando lo que se conoce como la zona cero de la DANA, se palpaba el agradecimiento por no haber sido abandonados por el Estado. “Me ha dado la mano”, “Estoy tan nerviosa que ni recuerdo lo que me han dicho”, eran algunas de las impresiones que compartían tras hablar con los Reyes.
Además del caluroso acogimiento en la llegada, entre vítores y aplausos, también los hay que se han preocupado por el estómago de los Reyes. Es el caso de Teresina, una vecina que ha cocinado durante estos días y preparando cafés para ayudar a quienes lo han perdido todo. “Les he hecho un bizcocho a los Reyes para que lo prueben”, informaba muy satisfecha, en la puerta del ayuntamiento donde ha comenzado todo.
Tras la visita a Utiel, está previsto que los Reyes se trasladen en el helicóptero Puma a Castilla_La Mancha, para visitar Letur, otra de las zonas afectadas en Albacete.
