El Partido Popular ha echado sus cuentas y está convencido de que puede cuadriplicar sus resultados electorales en las elecciones al Parlament de Cataluña. En la campaña de las elecciones catalanas de 2021 hubo trackings que llegaron a pronosticar la desaparición del PP, pero finalmente los populares evitaron la hecatombe. Tuvieron que conformarse, eso sí, con un magro resultado (3 diputados). Ahora, el PP aspira a conseguir entre 12 y 15 escaños y, para ello, el candidato popular, Alejandro Fernández, va a apostar por Isabel Díaz Ayuso en la recta final de la campaña, por imprevisible que sea la presidenta madrileña. Ayer en Barcelona denunció que “la Constitución se está reinterpretando al interés de Sánchez” y llamó a concentrar el voto de la derecha en el PP para “revertir de una vez por todas el negocio corrupto que representa el independentismo”.
En paralelo a la presencia del líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo —que se ha dedicado las últimas horas de campaña a denunciar que votar al PSOE es igual que votar a las formaciones independentistas—, la presidenta de la Comunidad de Madrid desembarca en Cataluña con su discurso “sin complejos” en la particular batalla que el PP tiene con Vox. “No puede ocurrir como en el País Vasco”, dicen las fuentes consultadas, en alusión a que se los populares infravaloraron a Vox en las vascas pensando que desaparecerían del Parlamento de Vitoria y al final mantuvieron su escaño.
El caso de Cataluña no es el del País Vasco porque, si bien Vox también va a la baja en la comunidad catalana, no hay ningún sondeo que pronostique el fin de su grupo parlamentario (ahora en 11 diputados y presuntamente destinado a quedarse en 8-9). Pero los populares no se fían y quieren amarrar la cuarta posición que les otorga tanto el CIS como el Centro de Estudios Opinión (CEO) de la Generalitat, sin dejar espacio a sorpresas de Vox.
Y para ello, tal y como explicó Ángela Vera en Artículo14, Ayuso se mantiene como gran activo del PP por muchas polémicas que rodeen a su entorno particular. Según ha podido confirmar este periódico, la dirigente madrileña estará este lunes en Barcelona, y el jueves y viernes volverá a acudir a la llamada de Fernández. Aunque la agenda no está cerrada por completo -dependerá de las necesidades de la estructura regional con los trackings en la mano-, podría acudir a Gerona, Lérida y Tarragona. Esto es, recorrerse todas las provincias catalanas, según informa Pablo Montesinos.
El factor Ayuso, el esfuerzo de Feijóo
Los estrategas del PP, con Dolors Montserrat al frente como jefa de campaña, han valorado riesgos y beneficios de contar con Ayuso y finalmente no ha habido discusión. Todos son conscientes de que la presidenta madrileña habla sin embudos y que un solo día de campaña puede provocar “situaciones no esperadas”, pero la conclusión es que vale más la pena asumir un guion insospechado que renunciar a su magnetismo electoral.
Feijóo también está echando el resto en estos comicios. Para el líder nacional, es prioritario que el PP crezca con contundencia en unos comicios en el que todas las encuestas dan como vencedor a Salvador Illa, el candidato socialista. ”Ya no hay diferencias entre el independentismo y el Partido Socialista en Cataluña”, dijo este domingo, en el mitin central de campaña. Su objetivo, además de quitar votos a Vox, es “desenmascarar” a Illa. “No es voto útil de nada. Hay que conseguir que penetre esta idea”, dicen en la dirección.
En las últimas elecciones catalanas, celebradas en febrero de 2021, el PP se asomó a la extinción con el peor resultado electoral de su historia (110.000 votos y 3 escaños), mientras que Vox superó con holgura a los populares (220.000 votos y 11 escaños). Ahora, Feijóo aspira a dejar atrás esta situación y recuperar posiciones cumpliendo varios objetivos: ser cuarta fuerza (por delante de Vox, Comunes, CUP y Aliança Catalana), volver a tener grupo parlamentario propio y, sobre todo, alzar la bandera de gran referente del constitucionalismo en Cataluña (que niegan al PSC por sus veleidades con el soberanismo).