Alberto Núñez Feijóo no quiere desvelar sus cartas. Los populares llegan este miércoles al Congreso de los Diputados sin haber adelantado el sentido de su voto en el que será el primer examen parlamentario del Gobierno, en una materia particularmente sensible.
El líder del PP ya anunció que avalarán uno de los tres reales decretos ley de Moncloa, el que afecta a la compatibilidad del cobro de la pensión con un salario. Pero hay otra norma que afecta a esta cuestión, que permitiría mantener la actualización de las pensiones en base al incremento del IPC (2,8%), y que el Ejecutivo ha encuadrado en el denominado decreto ómnibus.
El texto, que decaerá si no logran los votos necesarios, contiene también la prórroga de las subvenciones al transporte público, ayudas a las víctimas de la Dana y otras medidas de corte social. Se sabe qué votarán los conservadores ante el primer decreto, pero han evitado que trascienda lo que harán con el decreto ómnibus.
“Nos reservamos el sentido del voto hasta que se producen los debates en la Cámara”, afirmó el portavoz del partido, Miguel Tellado, en rueda de prensa en el Congreso. La incógnita está por despejar a pesar del debate interno, con barones territoriales que claramente rechazan votar que “no”, pese a haber detectado una nueva “trampa” de Pedro Sánchez.
“No hubo negociación”
El Ejecutivo se encomienda a Feijóo para salvar el decreto ómnibus, aunque fuentes de la dirección del PP aseguran a Artículo14 que tal deseo no se ha visto reflejado en una negociación de última hora: “Queremos dejar claro que no hubo ningún tipo de negociación ni antes de su aprobación en el Consejo de Ministros, ni después de su aprobación en el Congreso”, enfatizaron las fuentes consultadas, dando a entender que dicho esfuerzo se habrá centrado “en convencer a sus socios de investidura en general y a los que residen en Waterloo en particular”.
El hecho de que el Ejecutivo haya incluido esta cuestión en un decreto ómnibus que mezcla medidas sociales, revalorización de las pensiones y ayudas por la Dana, genera malestar, pero también dudas entre las filas conservadoras. Barones con mando en plaza consultados por este periódico insisten: no es viable votar que “no” a un aumento de las pensiones”.
Advertencias de puertas adentro
“No nos vamos a poner en contra a todos los pensionistas”, traduce un presidente autonómico, consciente de que la medida afecta a doce millones de personas, entre las que el Partido Popular tiene un nicho importante de votantes. “Hay que apoyar sin reservas, salvo que no se quiera ganar las elecciones”, concluye rotundo otro presidente, en conversación informal con este periódico.
Un tercer barón apunta a “la abstención” si Feijóo entiende que no debe salvar a Sánchez este miércoles en el Congreso. “Es una trampa pero hay votaciones que te persiguen, y esta puede ser una de ellas”, razona. “Le daríamos el discurso de que no queremos que suban las pensiones”, sentencia otro dirigente regional, que augura que Feijóo acabará permitiendo que se apruebe el decreto.
No es en todo caso una posición monolítica. Otro sector del PP considera que “en ningún caso hay que apoyar a Sánchez” más a tenor “de sus últimos ataques al estado de Derecho y la separación de poderes”, en palabras de un diputado. “Esto va muy rápido pero empezamos la semana lanzando una aviso de alerta antidemocrática por lo que ha hecho con Telefónica”, rememora. Además, el fin de semana, el propio Feijóo alertó ante los líderes del PP europeo de “la deriva antidemocrática” del jefe del Gobierno.
En opinión de un presidente autonómico, Génova ha errado al retrasar el anuncio del sentido del voto del PP. “En estas cuestiones, cuanto antes se diga mejor, se evitan líos y debates innecesarios”, precisa. “Lo que se vote, bien estará”, se lava las manos un último líder territorial.