La presidenta de Adif, el hermano de Koldo García y el socio de Víctor de Aldama trabajaban para que no le faltara de nada. Jésica Rodríguez mantuvo una relación con el que fue ministro de Transportes entre otubre de 2018 y noviembre de 2020. José Luis Ábalos siempre ha mantenido que fue una “relación normal con la que mantienen todas las personas”. Pero lo cierto es que fue un romance extramatrimonial. Tenía guardado su contacto como “Jesús Rodríguez 20 minutos”.
Hace unas semanas declaró en el Tribunal Supremo. Muy afectada reconoció que había vivido en un piso pagado por la trama y que había cobrado sueldos públicos a cambio de no hacer nada. Pero ahora podemos hacernos una composición más exacta de todo esto. De hecho, hay fotografías que muestran a la ex pareja de Ábalos visitando el piso que pagó la trama de Plaza España junto a Alberto Escolano, socio y amigo de Víctor de Aldama.
Artículo14 ha tenido acceso al volcado de móvil realizado por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil a Koldo García. De los mensajes, se desprende que Ábalos tenía movilizado a altos cargos del ministerio y cabecillas de la trama para que a su novia no le faltara de nada.
Isabel Pardo de Vera
La presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, se encargó de contratar a Jésica por Ineco. En febrero de 2019 le decía Koldo García: “Que llamen a la chica que inicie los trámites para la contratación en Ineco como auxiliar administrativa de Joseba”. A lo que ella contestó: “Si quieres mándamelo a la ofi en papel”. Le llamaron para una entrevista y eso no le gustó nada. Quiso saltarse la intermediación del asesor de su pareja: “Oye, ¿y si le dices a Jose que llame a quien tenga que llamar?”.
Pero Koldo García no quería molestar a Ábalos con el trámite del que estaba al tanto el exministro, según lo que se deduce de la conversación: “Sí, claro, y me monta la de Dios por inútil”. Acabaron yendo juntos a la entrevista y se cerró el contrato en Ineco.
Es más, la implicación de la presidenta de Adif se mantuvo en el tiempo. Fue ella misma quien, en noviembre de 2020, recordó que a Jésica se le terminaba el contrato: “Tenemos que cerrar Jésica ya toca renovación de contrato. ¿Lo hablo contigo?”, dijo a Koldo García en una conversación. Finalmente, le mandaron actualizar el CV para comenzar a trabajar en la segunda empresa pública: Tragsatec.
Mensajes que desmienten su declaración como testigo en el Tribunal Supremo donde aseguró que no tuvo nada que ver con su contratación. Reconoció que Ábalos y su exasesor le preguntaron por puestos de administrativo: “Yo les dije que había ofertas públicas y oposiciones y que era la única forma de contratar. Me refiero que yo no puedo contratar a una persona que no haya pasado por una oferta”, aseveró ante el juez.
Joseba García
En teoría, Jésica hacía de auxiliar administrativo del hermano de Koldo García. Pero la novia de Ábalos nunca asistió a su puesto de trabajo. Ni si quiera rellenó los partes. Joseba era el encargado de hacerlos, pero no los realizaba correctamente y la empresa se los reclamaba a ella. Eso desató su furia: “Yo no tengo ni puta idea de lo que se hace allí o no se hace o si puedo decir que voy… No me puedo inventar algo que desconozco”. Cuando la empresa le insistía, Koldo García le tranquilizaba: “Tú siempre di lo mismo, sin problema que está Joseba”.
El hermano de Koldo también se dedicaba a redactar justificantes oficiales para que la novia de Ábalos pudiera ausentarse de sus clases y acudir a los viajes que realizaba con el exministro: “Koldo, ¿podemos conseguir algún justificante para el lunes que viene? Y otro el jueves que nos vamos a Mallorca, creo”. Este le daba las instrucciones a su hermano.
Alberto Escolano
Por si fuera poco, Jésica disfrutó de un lujoso piso en el centro de Madrid pagado por Alberto Escolano, socio de Víctor de Aldama. Costaba 2.700 euros al mes y lo eligió ella por la proximidad del inmueble a su universidad. Lo fue a visitar con Escolano, según aparecen en las fotos a las que ha tenido acceso Artículo 14.

Jésica tenía ilusión por entrar en el piso: “Hoy he estado en el centro comercial con las amigas y veía velas y las quería comprar y chuminadas para la casa”, le anunciaba a Koldo. Para ella, el piso de Plaza España sería “su casita de novios”. Pese a que Ábalos siguiera adelante con su matrimonio paralelamente.
Cuando Ábalos abandonó el ministerio, la trama dejó de pagar el apartamento. Eso a Jésica no le gustó, que muy enfadada le recriminó a Koldo que los de la inmobiliaria le querían desalojar: “No tengo ni puta idea de lo que pasa ni lo que deja de pasar. Haced lo que vosotros veáis ya bastante incertidumbre es el no tener un sitio donde plantar el culo”. También le reclamó a Ábalos, aunque ya no estuvieran juntos: “En esta mierda me has metido con el puto piso”, le espetó. El mensaje se lo reenvió a Koldo García con el comentario: “Está zumbada”. Poco después, Ábalos acabó bloqueándole.