Alejandra Navas se coló en las casas de los viejos millenials al salir de clase. Porque así se llamaba la mítica serie de Telecinco que describía la vida de instituto de un grupo de adolescentes, un éxito que se mantuvo un lustro en parrilla ya que consiguió conectar con las inquietudes, problemas y situaciones cotidianas de la gente joven de la época. En Alsa Alejandra Navas encarnó a Leo, y de ahí el mundo de la televisión la reclamó para series como Ana y los siete, o la eligió para presentar el mítico Corazón de Anne Ingartiburu para hacer sustituciones de la presentadora vasca.
De pronto, la vida de Navas dio un giro de 180º, y cambió el vestuario de los platós por el del Ejército. Se apuntó a las plazas de reservista de las Fuerzas Armadas. En aquel entonces, esa figura -voluntarios españoles que se alistan al Ejército para participar en las distintas misiones de las FAS- no era muy conocida. Ahora, la situación ha cambiado: este próximo miércoles 19 de noviembre termina el plazo para inscribirse, y desde el ministerio de Defensa se asegura que “en los últimos tres años se ha superado las diez solicitudes por plaza“. En cuestión de sexos: “En 2023, más de un 30 % de las plazas asignadas las cubrieron las mujeres. En los últimos tres años esta proporción ha sido superior al 25%.”
La actriz Alejandra Navas, de actriz a reservista en el Ejército
¿Cómo se da el viraje de 180 grados del mundo de la televisión al Ejército?
En realidad, yo siempre quise ser piloto del Ejército del Aire, como mi padre, pero en ese momento no entraban mujeres y no fue posible. Años después, trabajando ya en televisión, salió la figura del Reservista Voluntario y no lo dudé un minuto, me presenté encantada.
¿La decisión de ser reservista fue unipersonal o alguien se lo recomendó?
En el año 2002 comencé a presentar los eventos y actos institucionales del Ministerio de Defensa, y fue en uno de ellos donde conocí a un reservista que me contó todo sobre ello. En aquel momento había muy pocos, era una figura muy desconocida.
¿Qué plan de mantenimiento y entrenamiento tiene que seguir?
Una vez consigues tu plaza, tienes que hacer una formación militar básica de 15 días en la base específica de cada Ejército, en mi caso fue en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz. Después. pasas otros 15 días de formación en tu destino. Y a partir de ahí, cada vez que te activas haces el trabajo que te vayan asignando.
En cuanto al entrenamiento físico, depende del destino que tengas y sobre todo del reservista. En mi caso, que estoy en la UME, intento estar lo más en forma posible, es una unidad en la que hacer ejercicio es vital y hay que hacerlo todos los días a primera hora. Siempre me ha gustado hacer deporte, así es que estoy encantada.
En un momento dado, ¿cree que podría dar la vida por España?
Sin ninguna duda, así lo he pensado siempre, incluso antes de ser reservista.
¿Cómo está haciendo el seguimiento de la DANA?
Desgraciadamente no tan plenamente como me gustaría, puesto que no estoy activada en estas fechas y no estoy en la vorágine diaria. Pero sigo el día a día de los compañeros como si estuviera ahí. Me ha tocado ayudar de otra manera.
¿Qué le aporta a nivel personal estar dentro del Ejército? ¿Qué significado tiene?
Estoy cumpliendo con creces un sueño. Me encanta hacer mi trabajo en las Fuerzas Armadas, ver que resulto de utilidad y que aunque no esté activada porque no me queden días de activación, me sigan llamando. Mi trabajo en las fuerzas Armadas es exactamente el mismo que hago fuera de ellas, e incluso más….presento actos, organizo eventos, locuto vídeos, hago guiones, escribo noticias, notas de prensa, corrijo textos… enseño técnicas de comunicación a los intervinientes que van a hablar ante las cámaras…
Todo este trabajo en las Fuerzas Armadas me ha hecho crecer como persona y como profesional, sin ninguna duda.
Alejandra Navas, durante un acto militar
¿Echa de menos el mundo de la televisión?
En realidad no, porque nunca lo he dejado. Siempre he seguido trabajando como presentadora de televisión. Es cierto que en su momento tuve que tomar la decisión de que tenía que decir que no a programas de más audiencia que me llamaron para presentar, por incompatibilidad horaria. Pero no es algo que me haya molestado en ningún caso. A mí me gusta el trabajo de presentadora, me da igual ser más o menos conocida… Y desde luego reconozco que soy una persona con mucha suerte, mis elecciones de vida siempre han resultado ser buenas y al final nunca me ha faltado trabajo en la tele.
¿Cree que el Ejército está poco valorado?
Las Fuerzas Armadas son muy desconocidas para el público en general. Hay muy poca cultura de Defensa. No hay casi publicidad, con lo que la gente desconoce todo el bien que hacen. Es por ello que creo que la figura del reservista debe servir de nexo de unión entre la vida militar y la civil. Como reservista me siento con el deber de hablar de todo el bien que hacen las FAS, y dar a conocer este mundo a todo aquel que tenga unos minutos para escucharme.
Cada vez hay más mujeres que se alistan en las FAS, ¿en qué cree que somos un activo?
Creo que al revés de lo que normalmente se piensa, las Fuerzas Armadas es el lugar donde hay más igualdad. Un capitán y una capitán cobran lo mismo, mandan lo mismo y hacen el mismo trabajo. Y así pasa con todos los rangos. Por lo que ser o no un activo depende de la persona, no del sexo.