El papel de Santos Cerdán en la trama de comisiones ilegales que involucra a José Luis Ábalos, Koldo García y Víctor de Aldama continúa bajo investigación de la UCO de la Guardia Civil, tal y como informó Artículo14. De Aldama señaló a Cerdán ante el juez como parte de las mordidas que la trama percibía por asignar contratos públicos, aseguró que la está dividida en varios “cupos” y añadió que la zona de Navarra y País Vasco era “territorio y sector reservado para Cerdán”. Siguiendo esta estela, la UCO investiga, según ElConfidencial, el rastro concreto de una comisión ilegal de una constructora por desdoblar el túnel de Belate (norte de Navarra), cuyo contrato se elevó por encima de los 76 millones de euros.
Lo cierto es que el expediente con los trámites de la adjudicación deja a la vista las profundas discrepancias que generó este concurso público, el cual se cerró con varios votos particulares. Dos de ellos, el vocal secretario de la Mesa de Contratación, Lorenzo Serena, y un vocal interventor en la mesa de contratación, Jesús Muñoz Apesteguía, se desmarcaron con especial énfasis del informe de valoración del Sobre nº 2 (“Propuesta criterios cualitativos”):
“Dicho informe no expone las razones que justifican las puntuaciones, ni expresa las ventajas de unas ofertas frente a otras, sino que, por el contrario, se reduce a una mera descripción de las ofertas presentadas por los licitadores, en general sin lógica argumentativa y ausencia de criterio valorativo, lo que implica que dichas ofertas no sean comparadas de forma homogénea”
“Una insuficiente motivación puede generar arbitrariedad e indefensión para los licitadores, ya que se podrían estar
conculcando los principios básicos de la contratación de igualdad de trato y no discriminación”
Procedimiento contaminado
Este mismo voto particular de Jesús Muñoz Apesteguía cuestiona también el procedimiento seguido para valorar las ofertas, puesto que “el presidente de la Mesa de contratación pública, que tuvo a su disposición el resto de valoraciones, procedió a continuación a efectuar su propia valoración y a redactar el informe de valoración técnica”. Recuerda en el voto particular que “ningún miembro de la Mesa de contratación debe puntuar tras haber tenido conocimiento de otras puntuaciones anteriores que puedan contaminar la suya propia“.
La solvencia técnica
En todos estos argumentos coincidieron el mencionado vocal interventor y el vocal secretario de la Mesa de Contratación. Pero hubo más disconformidades por parte de otros vocales, en este caso respecto a la acreditación de la solvencia técnica de a UTE adjudicataria formada por Acciona, Excavaciones Fermin Osés y Servinabar.
El pliego para la contratación pública establecía que los concursantes debían acreditar “una relación de obras ejecutadas en el curso de los últimos cinco años, avalada por certificado de buena ejecución de, al menos, una obra similar (túnel), con importe de ejecución igual o superior a 65.000.000 euros“. Pero la UTE ganadora no acreditó la construcción de un túnel de semejante envergadura:
“No puedo compartir que se venga a alterar el importe de la obra ejecutada manifestado por el licitador en su certificado. Si el licitador ha determinado que la obra del túnel ha ascendido a 51.820.708,04 €, no parece que la Mesa pueda tener por acreditado, y certificado, un importe diferente sin una evaluación que constituya suficiente motivación, dado que se tasa de manera inconcreta (“en unos 77 millones de euros”) sin especificar tampoco como se ha llegado a ésta”
Al concurso se presentaron siete candidaturas y la adjudicación correspondió a la mencionada UTE de Acciona, Excavaciones Fermin Osés y Servinabar. La obra, uno de los proyectos más importantes de los últimos años del gobierno navarro, fue adjudicada pese a las discrepancias de estos vocales y lo que la UCO investiga es si Santos Cerdán se valió de su fuerza en el PSOE para imponer una adjudicación concreta a cargos socialistas con competencias en obra pública en Navarra.