En la última década se han adoptado distintas iniciativas para la incorporación de la mujer a los consejos de administración y a la alta dirección de las empresas. En noviembre de 2022 el Parlamento Europeo aprobaba una directiva para obligar a las grandes empresas a contar con al menos un 40% de mujeres en los consejos de administración antes de julio de 2026. Diez años atrás, en 2012, lo adelantó en forma de una recomendación, señalando que se convertiría en una obligación. Pues la hora ya ha llegado. Las empresas que no alcancen estas cuotas serán sancionadas. Hace unas fechas, el Parlamento español ha aprobado la ley de paridad con similar contenido.
El panorama europeo es dispar. Francia es el único estado miembro que supera el 40%, mientras en Chipre se reduce a un ridículo 8,5%. Se demuestra que sólo la obligación ha permitido hasta ahora alcanzar resultados. “Un obstáculo muy común es la cultura corporativa. Es una parte importante del techo de cristal”, aseveró en su momento la eurodiputada Evelyn Regner, una de las grandes impulsoras de la medida. En Francia, el 17% de los gerentes, el 25% de la alta dirección y el 44% de los miembros del consejo, son mujeres. Lo atribuyen a las cuotas impuestas en una ley de 2011.
¿Son las empresas machistas? Pues parece que sí, aunque también existe la impresión de que quieren dejar de serlo. Y algunas lo hacen a toda pastilla.
En España, existían hasta hora dos normativas que recomendaban la paridad en las empresas. Una, la ley de igualdad de 2015 que sugería “una presencia equilibrada” en el plazo de ocho años. La segunda, el Código de Buen Gobierno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) recomendaba ese 40% antes de 2022. El resultado ha sido magro. La nueva ley de paridad es conminatoria. En función del tamaño de la empresa, se empezará aplicar entre el 30 de junio del 2025 y el 30 de junio de 2026. Y habrá seguimiento y sanciones.
¿Cuál es la realidad española de hoy? El informe de la CNMV arrojaba los siguientes datos sobre 2023. Los consejos contaban con 404 mujeres, un 34,5%, y 216 directivas, un 23 %. En el caso del selectivo Ibex 35, se registraban 168 consejeras, un 40 %, y 96 altas directivas, un 24,7%. Sólo ocho grupos están por debajo. Acerinox, Sacyr, Ferrovial, Solaria, Telefónica, Indra, Fluidra y Naturgy no alcanzan por ahora el deseado 40%. En el otro lado, Bankinter, Cellnex, Inditex, Logista y Redeia superan el 50%.
Deloitte es posiblemente la entidad que más consistentemente ha estudiado el fenómeno. Su informe “Mujeres en el consejo de administración: una perspectiva global” lleva ocho ediciones. La edición de 2022 llevaba el expresivo título de “a ritmo de caracol”. En esta última octava edición, los autores estiman que la paridad podrá ser alcanzada en 2038, unas previsiones mucho más optimistas que las fijadas en 2018, que señalaban 2052 como el año en que se alcanzaría esa meta. En el conjunto del mundo, 18.532 mujeres se sentaban en un consejo de administración, lo que significaba que ocupaban el 23,3% de las posiciones y sólo un 8,4% de los mismos estaba presidido por una señora. En el plano ejecutivo, los datos son más evidentes. Las mujeres ocupaban un escaso 6% de las posiciones de CEO y un modesto 17,6% de las direcciones financieras.
Francia, Noruega e Italia superar el 40%. España ostenta un digno 33%, a la altura de Reino Unido o Dinamarca. Estados Unidos presenta un modesto 28% y China un 15% que habla por sí sólo. Al igual que los países de América Latina, donde ninguno supera el 20%.
Korn Ferry, la consultora de headhunting, publica sendos informes que evalúan los cambios producidos en los consejos y en la posición de CEO de las cotizadas españolas. El último ejercicio analizado corresponde a 2022. Se nombraron 62 nuevos consejeros, siendo elegidas 30 mujeres. “En las cotizadas españoles aún queda camino por recorrer para alcanzar esa paridad, pero al mismo tiempo son innegables los avances que se han realizado”, concluye el informe. Los datos evidencian esta realidad. En el 2018 sólo el 25% de los nombramientos recayeron en mujeres, frente al 48% del último ejercicio.
En cuanto a los CEOs la realidad es muy distinta. En 2023 diez sociedades cotizadas cambiaron de máximo ejecutivo. Ninguna mujer mereció esta distinción. Señalan que, desde 2019 sólo dos mujeres, Adriana Domínguez y Patricia Ayuela, han sido nombradas CEO. A ellas, habría que sumar el reciente de Gloria Ortiz al frente de Bankinter. Hoy en día, sólo siete mujeres dirigen empresas cotizadas en la bolsa española, frente a 111 hombres.
Como en todo, los datos evidencian la situación. Las mujeres, fruto de una realidad que desembocó en normativa, han avanzado en su presencia en los consejos. Pero para posiciones ejecutivas como CEO o dirección financiera el techo de cristal, esa barrera invisible pero material, sigue funcionando para el poder femenino.