Opinión

¿Los estereotipos sobre hombres y mujeres son buenos o malos?

Actualizado: h
FacebookXLinkedInWhatsApp

Los estereotipos son paquetes compactos de información sobre ciertos grupos que operan para facilitar la toma de decisiones. Y son tan antiguos como las sociedades humanas. Incluso funcionan en el mundo animal (un perro tiene los suyos sobre hombres, mujeres y niños).

Steven Pinker dijo: “Algunos estereotipos son falsos (especialmente cuando los grupos son mutuamente antagónicos, por ejemplo, en una guerra), pero muchos, probablemente la mayoría, reflejan las estadísticas. Y afortunadamente, la gente  los ignora de forma general cuando trata con otros individuos”.

Ya en el año 2021 un informe del Centro para el Estudio del Partidismo y la Ideología (CSPI) afirmaba que la precisión de los estereotipos en función de los datos mostraba que era uno de los hallazgos más sólidos y reproducibles en psicología. Según el CSPI, los textos de psicología política que con frecuencia afirman que los estereotipos son falsos no suelen apoyarse en los hechos. Y cuando se citan, o no se profundizan o se eluden.

Y asegura que existen correlaciones muy fuertes entre lo que la gente cree que es verdad acerca de las discrepancias estadísticas entre grupos y lo que es realmente cierto. Las relaciones se replican de manera consistente y son mucho más fuertes que la mayoría de los efectos encontrados en los estudios de psicología social.

Ahora, un nuevo estudio del “Journal of Experimental Social Psychology” de Alice H. Eagly y Judith A. Hall hace hincapié en la cuestión de los estereotipos, pero esta vez centrándose en los de los hombres y los de las mujeres. Un tema polémico. La precisión de los estereotipos de género nunca se había abordado en profundidad, y ya nos imaginamos por qué. Esta revisión presenta la primera evaluación bien detallada sobre esta precisión. Repasemos algunos estereotipos muy conocidos.

En el imaginario tradicional, las niñas son más frágiles que los niños, que no lloran. A las niñas les interesa la moda, las artes y jugar a mamás. A los niños les gustan los videojuegos y los deportes. Las niñas son más perfeccionistas y mejores en las tareas del hogar, y los niños desordenados y poco dados a esas tareas. Las niñas son buenas en lenguaje y los niños en matemáticas. Etcétera. No sólo la nuestra: cada sociedad, grupo étnico y cultura tiene expectativas sobre los roles de género.

Y las conclusiones del estudio son que esos estereotipos tienen un grado sorprendentemente alto de realidad. Aunque los estereotipos pueden ser inexactos y, de hecho, estar totalmente desvinculados de la realidad social externa (por ejemplo, los estereotipos de grupos definidos por signos astrológicos), la observación directa e indirecta masiva de mujeres y hombres en la vida cotidiana evidencia la precisión de muchos de los estereotipos que hemos mencionado antes.

Rolf Degen, un ensayista científico y autor de libros sobre psicología, neurociencia y evolución, ha escrito a menudo sobre los estereotipos. Y piensa que, aunque hay gente que sostiene que son perjudiciales (incluso si son ciertos), cree que cuando las personas tienen una información directa e individual sobre alguien, no se dejan llevar por ellos.

Esos “paquetes de información” están pensados para actuar de urgencia, son un recurso de la evolución. En la interacción personal sin alarmas, se actúa distinto. Lo mismo que nos ha dicho Steven Pinker al principio de este artículo. Y es bueno resaltar que, como podemos ver en estos estudios, los estereotipos sobre otros grupos sociales no alcanzan niveles de precisión tan altos como los que se tienen sobre hombres y mujeres. Y en estos, el temor de que el conocimiento de su veracidad conduzca a la discriminación está fuera de lugar. Para avanzar socialmente no se puede prescindir de la razón crítica, la ciencia y el humanismo. En una palabra: de la verdad.

 

TAGS DE ESTA NOTICIA