Opinión

El final de tu era

Pedro Sánchez en el Congreso - Política
Actualizado: h
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Taylor Swift, superestrella norteamericana de la música, ponía fin a su gira española mientras, en el Congreso de los Diputados, unas pocas horas antes se perpetraba la infamia.

Toca advertir a los lectores que la coincidencia de estos “acontecimientos históricos” ha sido absolutamente accidental y no responde a un maquiavélico plan orquestado por Pedro Sánchez para distraer al votante. Ni siquiera él, que todo lo maneja, es capaz de conseguirlo. La justificación es más simple: cuando la artista anunció en junio del año pasado que recalaría en Madrid este 2024, nadie en el Partido Socialista se hubiera atrevido a afirmar que el 30 de mayo estarían aprobando la amnistía.

Y decimos: NADIE; porque antes del 23 de julio de 2023 todo el Partido Socialista recorría España anunciando a bombo y platillo que la amnistía no entraba en sus planes, que era algo absolutamente inconstitucional.

Sin embargo, mucho ha cambiado desde ese aciago día y solo han hecho falta 7 votos para que los socialistas traicionaran su palabra, sus promesas y a España.

La Ley de Amnistía ha salido adelante en plena campaña de las europeas. Y esto sí que no es casualidad. Al igual que tampoco lo es el circo internacional al que nuestro amante epistolar está arrastrando a España en estas últimas semanas.

Si ya vimos que Pedro solo reflexiona por interés… que nadie se deje engañar en esta ocasión: lo de Milei y Palestina solo responde a intereses electorales de Pedro Sánchez Pérez-Castejón.

La reputación de España le importa a nuestro Presidente entre poco y nada porque su meta está en movilizar a su electorado y ganarles la partida a sus socios.

Aquí estamos hablando de intentar resistir la victoria popular del próximo 9 de junio y Pedro está jugando con todo.

Por eso recurre al fango, a la ultraderecha, a la motosierra y, sobre todo, a los bulos.

Quiere tapar los escándalos de corrupción que afectan a su gobierno y a su esposa. Quiere ocultar que su supuesta mayoría de progreso, ya saben aquella que le permitió permanecer en la Moncloa tras haber perdido las elecciones generales, está fuera de su control. Y quiere disimular que no tiene los diputados necesarios para desarrollar un programa de gobierno más allá de la Ley de Amnistía que acaban de aprobar.

Pierden votaciones continuamente; se han visto obligados a retirar proyectos de ley por falta de apoyos en la Cámara; y ni siquiera fueron capaces de traer unos presupuestos.

Sánchez pende de un hilo. El hilo europeo. Y se está agarrando a él como puede.

El último intento, precisamente, lo hemos visto en su intento de atraer al votante joven recurriendo a una de las estrellas del momento, no solo en España sino en todos los países a los que lleva el The Eras Tour. Le oíamos este jueves decir que “la economía española va como la carrera de Taylor Swift: imparable”. Tan falso como el cohete y tan endeble como la moto.

Imparable es el descrédito internacional al que nos está llevando. Imparable es su deriva totalitaria y sus ansias de poder y de controlar todas las instituciones.

Pero el próximo 9 de junio tenemos la oportunidad de preparar nuestra carta; la oportunidad de que cada ciudadano español le escriba por respuesta: Sánchez, tu final ha llegado, tu era ha terminado.