El 15 de septiembre de 2019 el Real Madrid aprobaba en Asamblea General Extraordinaria de Socios Compromisarios la creación de su equipo femenino de fútbol, por absorción del CD Tacón.
Cinco años después de aquella histórica decisión, que acababa con la chocante ausencia en la Liga femenina del club más laureado del fútbol español, el Real Madrid femenino disputará un clásico ante el FC Barcelona con la distancia más corta en cuanto al nivel de uno y otro equipo. Con ambos invictos, cinco puntos les separan en la clasificación, lidera el Barça y el Real Madrid es segundo con un partido menos, siendo el menos goleado de la Liga F.
Los 4 campeonatos disputados desde que el Real Madrid femenino disputa la competición han estado marcados por un dominio absoluto del FC Barcelona. Los ha ganado todos. Dos de sus jugadoras han sido Balón de Oro, primero fueron los dos consecutivos de Alexia Putellas y después los dos de Aitana Bonmatí. En cuanto a los clásicos, entre Liga, Copa y Supercopa se han jugado 14 partidos que ha ganado el Barça. Muchos por goleada, y solo en 5 de ellos el Real Madrid pudo marcar en la portería azulgrana, aunque nunca tuvo opción de ganar. Y es posible que tampoco la tenga este sábado, porque el Barça sigue siendo mejor. Pero por primera vez , las sensaciones previas en las 9 jornadas, son diferentes. El Barça tendrá, ahora sí, a un Real Madrid que está compitiendo en la Liga.
Además, la Champions justifica también la sensación previa de más cercanía entre el nivel de ambos equipos.
Esta semana, cuando el Real Madrid de Alberto Toril respondió a la goleada del Barça el martes 7-0 al SKN St. Pölten marcándole otros 7 al Twente el miércoles, parecía estar advirtiendo a las azulgrana de que ellas también pueden golear. Además, necesitaron 11 disparos a puerta para marcar 7 tantos. El Barça necesitó dos más. La lectura de las estadísticas de esos dos partidos deja otro detalle. El Real Madrid hizo 7 goles cediendo la posesión del balón (46% por 54%). El Barça hizo gala de su ADN de club, 81% de posesión por 19% para su rival.
El Real Madrid recurrió a un ex futbolista de la casa hace ahora 3 años para dirigir a su equipo femenino. Alberto Toril, que había dirigido al Castilla desde 2011 a 2013 tras una interesante carrera en “la Fábrica” fue renovado en enero en plena crisis de resultados del equipo a mitad de la pasada campaña. Pese a los rumores que le situaban este verano cambiando de banquillo dentro de la institución, el técnico está acompañando al equipo a subir la escalera que le acerque al Barça peldaño a peldaño, asumiendo que las estrepitosas caídas, como la prematura eliminación de la Champions el pasado año o las repetidas goleadas frente a las azulgrana año tras año forman parte del aprendizaje y del camino.
Para ello, el club entendió que debía mejorar su plantilla fichando a 8 jugadoras y presentando especial interés en reforzar la línea defensiva
Por eso, el partido de este sábado en el Di Stéfano se presenta, pese a algunas inoportunas bajas como la de Athenea del Castillo, como una gran oportunidad de apuntalar el crecimiento del equipo.
Invictos
Real Madrid y Fc Barcelona son los dos únicos equipos invictos en la liga, y los únicos dos rentables según las cuentas que han presentado ambos clubes.
Es muy positivo para la Liga F que su nivel se acerque cada vez más, que ellas jueguen un clásico con la rivalidad, competitividad e interés que despierta el mismo enfrentamiento en su versión masculina. Y aunque eso esté aún muy lejos, quizás no tanto como pueda parecer hoy, si el Real Madrid sigue el ritmo de crecimiento que lleva.
El club de Concha Espina puso a la disposición del femenino todos los medios profesionales que se requerían desde el primer momento. Tanto en los contratos laborales como en los viajes, personal e instalaciones. Sólo les ha cerrado una puerta hasta ahora, la del Santiago Bernabéu.
Si Athletic, F C Barcelona o Atlético de Madrid abren las puertas de sus estadios desde hace años para citas puntuales, con extraordinaria respuesta del público, por cierto, el Real Madrid aún no lo ha hecho.
Ha dicho Mapi León esta semana que ellas estarían encantadas de jugar en el Bernabéu. ¿Sería una pesadilla para los blancos asumir dos victorias culés en el césped del Bernabeu en un mes? Quizás sea cuestión de esperar a que el equipo de Alberto Toril demuestre que, por fin, puede ganarle al Barça. Ese ruido sí será bienvenido, cuando llegue, en el Santiago Bernabéu.