Es un placer dar la bienvenida a un medio de comunicación feminista, que promete ser una voz poderosa para reivindicar la igualdad de las mujeres en nuestra sociedad. Hoy, más que nunca, es crucial rendir homenaje a todas las mujeres que, con su valentía y dedicación, han contribuido a conseguir una sociedad más justa. Han trabajado para dar sentido al “Artículo 14” de nuestra Constitución que ha elegido este periódico para su cabecera. Un artículo que consagra “la igualdad de todos los españoles ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Nunca ha habido un momento en nuestra democracia como el actual en el que haya sido necesario poner más en valor este artículo de nuestra Carta Magna. Centrándonos exclusivamente en la igualdad de las mujeres, a pesar de todos los avances, todavía queda mucho camino por recorrer. Todavía existen comportamientos que hay que erradicar. El más grave de ellos es la violencia machista que aún deja cada año decenas de mujeres asesinadas. Es una realidad insoportable contra la que hay que seguir luchando cada día con todos los poderes del Estado y con toda la sociedad.
El Pacto contra la Violencia de género debe ser nuestra guía para acabar con esta lacra.
Nuestro compromiso con la igualdad de las mujeres se manifiesta con un principio fundamental. No habrá igualdad sin libertad. Las mujeres no queremos que nos digan lo que tenemos que hacer ni cómo tenemos que ser. Queremos elegir. Queremos decidir libremente sobre nuestra vida. Y debemos tener el derecho a hacerlo. Pero la realidad nos dice que todavía hoy hay miles de mujeres que renuncian a su carrera laboral y profesional por dedicarse al cuidado de sus hijos y mayores. La verdadera discriminación de la mujer que hoy persiste se produce con la maternidad. Es en el momento en el que la mujer decide ser madre cuando empiezan a producirse algunas de las brechas de desigualdad y por eso hay que seguir implantando medidas eficaces de conciliación para que padres y madres puedan compatibilizar su trabajo con su vida familiar.
Las políticas actuales no abordan eficazmente esta situación, perpetuando la desventaja de las mujeres en el mercado laboral. Y por eso son las mujeres las que más trabajan a tiempo parcial, las que reducen sus jornadas laborales, las que piden mayoritariamente las excedencias por cuidados, y, por tanto, a partir del momento de ser madres, empiezan a sufrir la brecha salarial.
Es fundamental eliminar las barreras que impiden la participación plena de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad y promover políticas que faciliten su acceso al empleo digno que les permita desarrollar su proyecto de vida y también que alcancen posiciones de liderazgo empresarial.
En definitiva, defendamos un feminismo real, el que impregna todas las capas de la sociedad; un feminismo sociológico que lucha por lo de todas, sin distinción, que no considera a las mujeres un colectivo porque somos la mitad de la población y que no las victimiza, sino que reconoce su talento, su capacidad y su derecho a lograr todo aquello que se propongan.
Hoy celebramos el progreso alcanzado, pero también reconocemos los desafíos que aún enfrentamos. Este nuevo periódico se compromete a ser una plataforma para dar voz a todas las personas y a promover la igualdad en todas sus formas.
En resumen, hoy nace una voz que se ofrece a luchar por un futuro donde todas las mujeres puedan ejercer su libertad para decidir sobre sus vidas. Nos enfrentamos a desafíos importantes, pero juntos podemos superarlos y construir una sociedad en la que exista la igualdad real como recoge el Artículo 14.