Hoy vengo a hablarles de Casa Decor y su última edición que se está celebrando estos días en el impresionante Palacio de La Trinidad en Madrid. Un espacio único que, pocos imaginarían poder encontrar hoy en día en pleno centro del barrio de Salamanca en Madrid, con un gran legado cultural e histórico que se ha mantenido intacto y que ahora además se puede conocer gracias a Casa Decor, que celebra en sus inmediaciones su edición número 59.
Hablar de CasaDecor debería importarnos (y mucho) a todos. Pues al final, no dejamos de hablar de uno de los eventos de diseño e interiorismo más importantes de nuestro país. Mucho se habla estos días del fascinante Salone del Mobile de Milán, el cual sigue superándose, pero no debemos olvidarnos de lo bueno (y muy bueno) que tenemos también aquí.
Desde su inauguración, Casa Decor ha sido testigo de una explosión de ideas y conceptos que reflejan la diversidad y la riqueza del panorama del diseño actual. Y este año, al menos para un servidor, ha sido toda una declaración de intenciones. No es fácil renovarse edición tras edición y mucho menos mantenerse 59 ediciones, pasando por Barcelona y Madrid, sin perder los standards de calidad. Sin duda, el contar con un gran equipo detrás, liderado por Alicia García y Macarena Revelilla, hacen que siga siendo sinónimo de éxito.
Si bien el espacio este año les acompañaba especialmente, en mi opinión sólo superado por la fascinante edición que se celebró en Casa Burés en Barcelona, allá por el año 2005, lo que realmente llama la atención esta edición es el fuerte énfasis puesto en la sostenibilidad y la reutilización de materiales, así como la transformación de espacios a través de la investigación, el desarrollo ó el ‘back to the roots’ (vuelta a los orígenes) como elementos de máximo valor. ¿Alguien sigue dudando aún de que estos aspectos ya no son negociables para un desarrollo sostenible y transversal?
Mención especial para mí tuvieron 4 proyectos, empezando por el maravilloso jardín de entrada, creado por el paisajista Fran Cisneros, en el que una de las cosas más novedosas era la creación de un suelo integrado en su exterior paisajístico, elaborado a base de trozos de vidrio de botellas de cervezas, previamente lijados, consiguiendo así un nuevo material que gracias a la investigación y circularidad del residuo, puede darnos muchas alegrías. Muy cerca de ese mismo lugar, nos encontramos el espacio Neolith, un lugar que me fascinó por su sencillez, capaz de demostrar como los elementos más básicos, en este caso una arquitectura limpia y minimalista, acompañada por paredes de espejo, pueden dar lugar a espacios fascinantes, capaces de
integrarse con la naturaleza y descubrirte espacios secretos en su interior que invitan a la calma y reflexión.
Volver a los orígenes, la España de interior ó las siestas después de comer en una idílica y cada vez más complicada vida slow, se ha convertido, sin duda, en uno de los grandes lujos de nuestros días. Y así lo reflejó el espacio Atmospheras, capaz de recrear en pocos metros un espacio íntimo y sencillo donde los elementos más puros que nos han acompañado generación tras generación, encuentran y se elevan a su máximo esplendor.
Pero quizás la mayor sorpresa de esta edición sea el espacio Roca, ubicado en la capilla del Palacio de La Trinidad. Un espacio que presentaba un gran reto por su ubicación y en donde crear un baño, seamos honestos, no parecía tarea sencilla. Sin embargo, siempre diré que son aquellos proyectos que más reto ó mayor dificultad presentan, los que acaban brillando más. Y sin duda, para mí este lo fue. A pesar del desafío que suponía transformar un espacio tan emblemático en un baño funcional y estético, el equipo detrás de este proyecto logró superar todas las expectativas. Desde una cascada que desciende majestuosamente desde los techos hasta la meticulosa atención a los detalles en los acabados, este espacio demuestra que la creatividad no tiene límites. Siéndoles sinceros, nunca pensé que uno de los espacio de Roca pudiese convertirse en uno de mis favoritos. Pero así ha sido. Mención especial a como todos los espacios han sido capaces de respetar e integrar con mimo y esmero, todos los elementos originales del majestuoso Palacio, como sus trabajados techos, paredes, ó en algunos casos, suelos originales, dotando de mucha más personalidad y transversalidad a los espacios, donde pasado, presente y futuro son capaces de convivir en perfecta armonía.
No les cuento más, pues tienen hasta el 26 de Mayo para poder visitar el lugar y de paso, apoyar uno de los eventos patrios más importantes de interiorismo, así como disfrutar de una grandísima nueva edición y escaparate de la creatividad humana. No olviden nunca que el buen diseño puede cambiar nuestro entorno y mejorar nuestras vidas.