El presidente del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, ha reafirmado su apoyo al líder del Partido Popular español, Alberto Núñez Feijóo, en su oposición a la candidatura de Teresa Ribera como comisaria europea, después de haberse reunido el miércoles con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Según han afirmado fuentes de Génova a Articulo14, “Weber mantiene el respaldo a Feijóo”, y subrayan que entre ambos líderes europeos existe una “interlocución fluida”. Desde el entorno de Feijóo, se percibe que esta sintonía con Weber fortalece su estrategia para obstaculizar la designación de Ribera, en quien ven una candidata inadecuada para el puesto.
“Vamos a ir hasta el final, no consideramos que Ribera deba ser comisaria. Un día más, seguimos marcando la agenda en Bruselas”, agregaron.
PP contra PSOE
La postura del PP español se basa en la creencia de que el PSOE europeo cometió un error al criticar a Weber, involucrando así a todo el Partido Popular Europeo en el asunto, y no solo al partido español. Esta dinámica ha llevado a un cierre de filas en torno a Feijóo dentro del PPE, lo cual se interpreta desde Génova como un refuerzo para su línea de oposición.
“Cuantos más días pasen sin que Ribera sea comisaria, mayor es su desgaste y el de Sánchez”, apuntan las mismas fuentes, insinuando que el retraso en el proceso de confirmación puede restarle credibilidad a la candidata y debilitar la posición del gobierno español.
Frente a este contexto, Feijóo ha planteado una salida al Gobierno de Pedro Sánchez, sugiriendo que, si se propone un nuevo nombre, el PP español estaría dispuesto a dar su apoyo. Así se lo ha comunicado también a Weber, con quien ha compartido la idea de que Ribera no es la persona idónea para el puesto. En los círculos del PP, tanto en Bruselas como en Madrid, el nombre de Luis Planas, actual ministro de Agricultura y figura con amplia experiencia en la UE, se sigue repitiendo como una alternativa que a lo mejor podría recibir apoyo de las instituciones comunitarias.
Feijóo también ha aprovechado para criticar directamente a Ribera en una comparecencia en el Congreso, donde afirmó que “esa ministra no debería ser premiada con un puesto de relevancia en la UE” y la calificó como “inadecuada” para el cargo. Según Feijóo, la gestión de Ribera durante las riadas en Valencia del 29 de octubre la convierte en una figura controvertida, lo que, en su opinión, debería ser un obstáculo para su confirmación como comisaria. “La Comisión Europea tiene que estar libre de sospecha“, declaró Feijóo, aludiendo a la necesidad de mantener un alto estándar de integridad entre los comisarios europeos.
Von der Leyen con Ribera
Pese a esta oposición, Ursula von der Leyen ha mantenido su respaldo a Ribera, según afirmó el portavoz de la Comisión, Eric Mamer, quien subrayó que “la presidenta ha dado su confianza al conjunto de candidatos al puesto de comisarios y el proceso para su confirmación está en curso”. Ante las evaluaciones críticas en el Parlamento Europeo, Mamer aseguró que “evidentemente nada ha cambiado con respecto a esta posición inicial” y evitó hacer comentarios adicionales sobre las críticas que Ribera recibió en su reciente comparecencia.
Mientras tanto, el PPE ha dejado abierta la posibilidad de no vetar la evaluación a Ribera si acepta dos condiciones: comprometerse a dimitir en caso de resultar imputada por su gestión durante las riadas y dar explicaciones ante el Congreso español. Esta postura del PPE también está condicionada a que socialdemócratas y liberales respalden a los candidatos ultraconservadores Raffaele Fitto y Olivér Várhelyi, aunque ciertos líderes parlamentarios consideran la posibilidad de revisar las competencias asignadas a Várhelyi en aras de alcanzar un consenso.
Sin embargo, el PP español insiste en que la propuesta de someter a Ribera a evaluación no implica una aprobación automática. Desde la delegación popular en Bruselas afirman que “al PP español no le vale” simplemente con las condiciones establecidas para evaluarla. “Lo que decimos es que esas son las condiciones para que los coordinadores puedan reunirse a evaluarla, y el resultado de esa evaluación no tiene por qué ser positivo”, recalcan, añadiendo que, sin el cumplimiento de estos requisitos, Ribera “ni pise aquello”.
A puertas cerradas, los líderes y coordinadores de cada grupo político del Parlamento Europeo han discutido si Ribera cumple con los criterios de competencia, compromiso europeo e independencia personal necesarios para ser comisaria. Para avanzar en el proceso, dos tercios de los miembros deben apoyar su candidatura, un respaldo que, según los observadores, no parece alcanzable en este momento. De no lograr el apoyo suficiente, Ribera podría enfrentarse a una nueva ronda de preguntas o a la posibilidad de ser sustituida en la candidatura.
En caso de rechazo, la decisión final sobre su candidatura recaerá en la Conferencia de Presidentes del Parlamento, que enviará una recomendación confidencial antes de someter a votación el equipo completo de comisarios en la sesión plenaria del 25 al 28 de noviembre.