Ursula Von der Leyen ya puede respirar un poco más tranquila, porque ha superado una de las fases de su reelección como presidenta de la Comisión Europea. Aunque aún debe cosechar el apoyo de una mayoría además de 360 eurodiputados -cifra que no tiene asegurada todavía- su candidatura ya ha sido confirmada por los países de la Unión Europea, cuyos líderes se pusieron por fin de acuerdo tras semanas de tiras y aflojas.
Los seis líderes de la Unión Europea que negociaban los principales cargos del bloque ya han acordado queVon der Leyen, junto con António Costa de Portugal y Kaja Kallas de Estonia, ocupen los roles más destacados en la Comisión Europea, el Consejo Europeo y el Servicio Europeo de Acción Exterior, respectivamente, según comentaron cinco funcionarios de la UE al medio Político.
La confirmación de la candidatura de Von der Leyen llega tras semanas de intensas negociaciones entre los líderes europeos, quienes finalmente lograron un consenso crucial para avanzar en la próxima cumbre de la UE del 27 y 28 de junio.
Para asegurar su reelección, Von der Leyen necesita el respaldo de una mayoría cualificada de los líderes del Consejo Europeo y luego la aprobación del Parlamento Europeo, donde debe ganar el apoyo de al menos 360 eurodiputados. Pero a pesar del respaldo inicial del EPP y de algunos líderes clave, las negociaciones se han visto obstaculizadas por la resistencia de varios grupos políticos, incluidos los Socialdemócratas (S&D), los Verdes y la Izquierda, quienes expresaron preocupación por su estrategia de buscar apoyo de la extrema derecha.
Pero tras la reunión informal del 17 de junio, donde no se alcanzó un consenso definitivo, Ursula von der Leyen, respaldada por su victoria en las elecciones europeas a través del Partido Popular Europeo (EPP), esperaba asegurar el apoyo necesario para su reelección. Sin embargo, la cena del lunes posterior a esa reunión no produjo resultados concretos, prolongando la incertidumbre sobre su candidatura hasta la cumbre del 27 y 28 de junio, donde se espera una decisión final.
Un camino de espinas
El proceso hacia la reelección de Von der Leyen se ha visto complicado desde el inicio por las dinámicas internas de la política europea y los equilibrios de poder entre los diferentes grupos políticos representados en la UE. Aunque cuenta con el respaldo de una parte más que sustancial de los líderes del Consejo Europeo pertenecientes al EPP, la estrategia de buscar apoyo de Giorgia Meloni del ECR fue criticada por los Socialdemócratas (S&D), los Verdes y la Izquierda en el Parlamento Europeo, quienes consideran problemático el acercamiento con la extrema derecha.
Luego el conflicto más evidente surgió con la propuesta del EPP de dividir el mandato del presidente del Consejo Europeo en dos períodos de 2,5 años, una sugerencia que no fue bien recibida por los Socialistas y Demócratas, quienes esperaban asegurar el puesto para Costa.
Además de las divisiones internas entre los partidos políticos, el rechazo explícito de Hungría hacia la reelección de Von der Leyen añadió un obstáculo. János Bóka, ministro húngaro de la UE, destacó las dificultades para apoyar a Von der Leyen debido a diferencias previas y a la creciente influencia de los partidos de derecha en el panorama político europeo, otra prueba más de la fractura dentro de los estados miembros sobre el liderazgo de la Comisión Europea.