Rusia lanzó anoche contra Ucrania un total de 117 drones, entre los cuales había dispositivos reales y también imitaciones que las fuerzas rusas emplean para desorientar a las defensas adversarias, según el informe de este miércoles de la Fuerza Aérea ucraniana.
Las defensas antiaéreas ucranianas lograron derribar durante la noche 56 drones de ataque rusos, incluidos modelos Shahed y otros tipos, en distintas zonas del norte, sur, este y centro del país, según el comunicado de la Fuerza Aérea.
Otros 48 drones sin carga explosiva —réplicas de los Shahed— se precipitaron sin causar daños. El ataque ocasionó destrozos en las regiones de Sumi (noreste), Dnipropetrovsk, Kirovograd y Cherkasi (centro).
Rusia derriba 9 drones ucranianos
Las defensas aéreas rusas derribaron anoche nueve drones ucranianos en dos regiones del país y sobre el mar Negro, según informó este miércoles el Ministerio de Defensa de Rusia a través de su canal de Telegram.
Según el parte militar, los aparatos no tripulados fueron neutralizados sobre los territorios de las regiones de Bélgorod (5) y Kursk (2), ambas limítrofes con Ucrania. Los otros dos drones fueron eliminados sobre las aguas del mar Negro.
El incumplimiento de la supuesta tregua acordada
Esta nueva ofensiva con drones se produce después de que Rusia y Ucrania se comprometieran con Estados Unidos a avanzar en un acuerdo de alto el fuego para una lista de infraestructuras energéticas en territorio ruso y ucraniano además de poner fin a los ataques en el mar Negro. Pero lo cierto, es que tan solo unas horas más tarde de este anuncio, el alcalde del puerto de Mikolaiv, en el sur de Ucrania, informó que se produjeron cortes de electricidad en la madrugada de este miércoles, tras ser derribados siete drones en la región durante la noche.
Dicha lista contempla centrales eléctricas e hidroeléctricas, subestaciones, transformadores y cualquier instalación vinculada a la generación o transmisión de electricidad, según el comunicado. Además, ambas partes se comprometen a no atacar gasoductos, estaciones de compresión de gas, oleoductos, depósitos de crudo y refinerías.
Rusos y ucranianos también acordaron evitar ataques a plantas nucleares, un tema por el cual se han acusado mutuamente desde el inicio del conflicto, especialmente en relación con la planta de Zaporiyia, la más grande de Europa.
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El Kremlin aclaró que la suspensión de los ataques a infraestructuras energéticas será temporal y tendrá, en principio, una duración de 30 días. Moscú y Kiev también consensuaron con EEUU la búsqueda de una tregua en el mar Negro, aunque Rusia condicionó el acuerdo al levantamiento de las sanciones occidentales sobre su sector agrícola.
Zelenski acusa a Rusia de no buscar “una paz real”
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, condenó este miércoles un nuevo ataque ruso con decenas de drones kamikaze en el que resultaron dañadas infraestructuras civiles e industriales en las regiones ucranianas de Krivi Rig y Sumi, y declaró que la continuación de este tipo de bombardeos demuestra que Rusia no busca “una paz real”.
“Lanzar estos ataques a gran escala después de las negociaciones sobre el alto el fuego es una señal clara a todo el mundo de que Moscú no va a buscar una paz real”, escribió Zelenski en sus redes sociales, en referencia al lanzamiento por parte de Rusia de 117 drones contra territorio durante la pasada noche.
El presidente de Ucrania insistió en pedir “presión clara y acciones contundentes” en forma de sanciones de la comunidad internacional contra el Kremlin “para detener los ataques” rusos.