El pasado domingo, un trágico accidente en el cráter de Ngorongoro, Tanzania, se cobró la vida de dos mujeres españolas. Sus nombres: Elena Rentería e Inés Lomas. Madre e hija. El accidente también dejó gravemente heridos a Íñigo Lomas y a su hijo Ignacio, quienes están hospitalizados en Nairobi.
Elena Rentería y su hija Inés Lomas estaban disfrutando de unas vacaciones familiares en Tanzania cuando tuvo lugar la tragedia. La familia, que viajaba en un todoterreno conducido por guías locales, sufrió un accidente que terminó con el vehículo cayendo en el cráter de Ngorongoro. Las carreteras en la zona son famosas por su dificultad y su peligrosidad, a pesar de que los vehículos están equipados para estas condiciones y los guías son experimentados. En esta ocasión, nada pudo salvar a las dos mujeres.
¿Qué es el cráter de Ngorongoro, en Tanzania?
El cráter de Ngorongoro es una caldera volcánica de gran importancia tanto turística como científica. Situada en el norte de Tanzania, esta área protegida es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y alberga una de las mayores concentraciones de fauna salvaje del mundo. Además, es un sitio clave para la investigación sobre la evolución humana, con puntos de interés como la Garganta de Olduvai y el lago Magadi.
Elena Rentería era una trabajadora de los juzgados de Bilbao, mientras que su hija Inés, de tan solo 17 años, había terminado recientemente el Bachillerato y era una alumna destacada en el Colegio Francés de Zamudio. Inés también era una jugadora talentosa de hockey. Pertenecía al Club de Hockey Stick Getxo. Su hermano Ignacio, gravemente herido, es estudiante de segundo de la ESO y juega al fútbol. El padre, Íñigo Lomas, es abogado y dirige el área de Agua de Acciona.
El cráter de Ngorongoro es famoso por sus impresionantes vistas y su diversidad biológica, pero también es una zona de difícil acceso. Las carreteras son estrechas y sinuosas, y las condiciones pueden ser traicioneras, incluso para vehículos bien preparados y conductores experimentados. A pesar de estos desafíos, los safaris guiados son una actividad popular y atraen a turistas de todo el mundo, como era el caso de esta familia de Getxo.
La comunidad de Getxo, consternada por lo sucedido
La tragedia ha conmocionado profundamente a la comunidad de Getxo, especialmente en la barriada de Las Arenas, donde residía la familia. La alcaldesa de Getxo, Amaia Aguirre, ha expresado su consternación y ha ofrecido su apoyo a la familia en este difícil momento. El Ministerio de Asuntos Exteriores español también ha estado en contacto con la familia, proporcionando asistencia a los heridos y facilitando los trámites necesarios.
Un testigo del accidente relató que el vehículo cayó aproximadamente 600 metros hasta la base del cráter. Los guías locales fueron los primeros en intentar rescatar a la familia, proporcionando los primeros auxilios hasta que llegó una ambulancia. Sin embargo, las condiciones del terreno complicaron las tareas de rescate y evacuación.