Estados Unidos y Ucrania están a punto de firmar un histórico acuerdo por las tierras raras. Un pacto que podría redefinir el equilibrio geopolítico en medio de la guerra en Ucrania. Este acuerdo, que se espera sea anunciado en las próximas horas, no solo establece un marco para la explotación de recursos minerales estratégicos en territorio ucraniano, sino que también podría incluir los términos de un alto el fuego entre Kiev y Moscú.
La administración de Donald Trump ha estado presionando a Volodímir Zelenski para aceptar un cese de hostilidades inmediato. A cambio, Washington restituiría la ayuda militar a Ucrania, que había sido suspendida recientemente tras un tenso encuentro entre ambos líderes. El acuerdo por las tierras raras se convierte así en una pieza clave dentro de una negociación mucho más amplia que involucra tanto intereses económicos como el futuro del conflicto bélico.
El papel de Estados Unidos en el acuerdo por las tierras raras
El acuerdo por las tierras raras otorgaría a Estados Unidos acceso preferente a los ingresos generados por los minerales estratégicos de Ucrania. Hablamos de un recurso esencial para la industria tecnológica y militar. La explotación de estos materiales es fundamental para la fabricación de dispositivos electrónicos, armamento avanzado y baterías. Eso convierte a Ucrania en un actor clave dentro del mercado global de tierras raras.
Según los términos filtrados del acuerdo por las tierras raras, la mitad de la monetización futura de estos recursos se destinaría a un fondo de inversión para la reconstrucción de Ucrania. Sin embargo, este punto ha generado controversia en Kiev. Por lo visto, muchos consideran que podría comprometer la soberanía económica del país en favor de intereses estadounidenses.
El vicepresidente JD Vance, el presidente Trump y el mandatario de Ucrania, Volodímir Zelenski | EFE
A nivel estratégico, el acuerdo por las tierras raras permitiría a Washington reducir su dependencia de China, el mayor productor mundial de estos minerales. Actualmente, el gigante asiático controla la mayor parte del suministro global. Esto le otorga una influencia considerable en las cadenas de producción tecnológica occidentales. Con este pacto, Estados Unidos busca garantizar su autonomía en un sector clave para la seguridad nacional.
Implicaciones del acuerdo por las tierras raras en la guerra en Ucrania
El acuerdo por las tierras raras no solo tiene un impacto económico, también juega un papel fundamental en el conflicto entre Ucrania y Rusia. La insistencia de Trump en vincular el acceso a estos recursos con un alto el fuego ha puesto a Zelenski en una posición delicada. El presidente ucraniano ha enfrentado fuertes presiones para aceptar una tregua que, en la práctica, consolidaría el control ruso sobre las zonas ocupadas desde 2022.
Desde Washington, el mensaje es claro: sin la firma del acuerdo por las tierras raras, Ucrania podría perder el respaldo militar de Estados Unidos. Este dilema ha generado tensiones dentro del gobierno ucraniano, donde algunos asesores ven el pacto como una imposición que limita su capacidad de continuar la guerra en sus propios términos.
I would like to reiterate Ukraine’s commitment to peace.
None of us wants an endless war. Ukraine is ready to come to the negotiating table as soon as possible to bring lasting peace closer. Nobody wants peace more than Ukrainians. My team and I stand ready to work under…
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) March 4, 2025
La presión sobre Zelenski ha sido constante en los últimos días. Trump y su vicepresidente, JD Vance, le han recriminado su insistencia en pedir más ayuda militar, instándolo a expresar gratitud en lugar de nuevas exigencias. Además, funcionarios estadounidenses han presionado a los asesores de Zelenski para que emita una disculpa pública tras la tensa reunión en Washington.
En un intento por aliviar la tensión, el presidente ucraniano publicó ayer un mensaje en X calificando el encuentro como “lamentable”, pero reafirmando su disposición a negociar. Por su parte, Trump ha insistido en que su administración ha hecho más por Kiev que cualquier otro país europeo y que espera una mayor “apreciación” por parte del gobierno ucraniano.
Un acuerdo con repercusiones globales
El acuerdo por las tierras raras redefine la relación entre Estados Unidos y Ucrania, y tiene implicaciones más amplias en la geopolítica global. China, el principal actor en este mercado, observa con preocupación cómo Washington intenta diversificar su suministro y reducir su influencia en este sector estratégico.
Mientras tanto, la postura de Rusia ante el acuerdo por las tierras raras sigue siendo incierta. Aunque la tregua propuesta beneficiaría a Moscú al congelar la línea de frente, el acceso estadounidense a los recursos minerales de Ucrania podría ser visto como una amenaza a sus intereses. Esto podría derivar en una respuesta más agresiva por parte del Kremlin, complicando aún más el panorama diplomático.
Un dibujo de Donald Trump y Vladimir Putin | Shutterstock
El Congreso de Estados Unidos también será un escenario clave en el debate sobre el acuerdo por las tierras raras. Mientras los republicanos han respaldado la estrategia de Trump sin demasiadas objeciones, los demócratas han manifestado su oposición. Sostienen que el pacto podría forzar a Ucrania a aceptar condiciones desfavorables en la guerra. Legisladores de la oposición han anunciado que llevarán al Capitolio a funcionarios despedidos y activistas en un intento de frenar la iniciativa.
A pesar de las críticas, la administración Trump sigue adelante con el acuerdo por las tierras raras, convencida de que garantizar el acceso a estos minerales fortalecerá la posición económica y estratégica de Estados Unidos. La Casa Blanca ha señalado que la autosuficiencia en tierras raras es una prioridad nacional y que esta negociación con Ucrania representa un paso crucial en esa dirección.