Tras demostrarse el fraude electoral en las elecciones de Venezuela, que lo han puesto en el centro de muchísimas críticas internacionales, Nicolás Maduro ha criticado duramente a la Unión Europea y a su jefe diplomático, Josep Borrell, calificándolos como una “vergüenza”. La reacción se debe a su rechazo a validar los resultados electorales del 28 de julio. Y es que la UE, junto con siete de sus países miembros, ha solicitado la publicación íntegra de las actas de los comicios, destacando la falta de pruebas que respalden la victoria de Maduro.
Como muchos otros países, la UE ha señalado que los datos recogidos por la oposición indican que Edmundo González Urrutia, el candidato rival de la Plataforma Unitaria Democrática, parece haber ganado las elecciones presidenciales por una mayoría importante. Josep Borrell, alto representante de la UE, ya pidió a Maduro publicar los resultados del recuento; por su parte, Edmundo González agradeció el llamado del bloque a respetar los derechos fundamentales de los venezolanos y a verificar de manera independiente los resultados electorales.
#Venezuela: Sin pruebas que los respalden, los resultados publicados por el CNE no pueden ser reconocidos.
La UE pide la publicación y verificación de las actas oficiales de votación.
Respetar la voluntad del pueblo venezolano es la única manera de restaurar la democracia.
— Josep Borrell Fontelles (@JosepBorrellF) August 5, 2024
Los veintisiete también han lamentado el retraso en la publicación del recuento de votos por parte de la Comisión Nacional Electoral (CNE), lo que ha aumentado las dudas sobre la credibilidad del proceso electoral. De hecho, informes difundidos por parte de varias organizaciones señalan que el proceso no cumplió con las normas internacionales de integridad electoral.
Unas elecciones ilegítimas
Por ejemplo, el Centro Carter, fundación estadounidense con amplia experiencia en observación electoral, ha destacado que los comicios no cumplieron con los “estándares internacionales” y presentaron numerosas anomalías. Este organismo también ha informado sobre un intento de ‘hackeo’ a los sistemas de la CNE durante las elecciones, lo que ha sido rechazado por los observadores al no encontrar indicios de tal ataque.
Pero Maduro sigue afirmando que su gobierno está derrotando un “golpe de Estado ciberfascista criminal” y ha propuesto regular las redes sociales para evitar la división entre los venezolanos. Sus aliados, como Delcy Rodríguez y Diosdado Cabello, también cuestionan la credibilidad de las actas presentadas por la oposición, alegando que muchas están incompletas o contienen datos ilegibles.
Sin embargo, la oposición ha publicado en la web resultadosconVzla.com los resultados de 24,532 actas, el 81,3% del total, obtenidos por delegados y testigos de mesa opositores. Y los resultados otorgan una ventaja de casi cuatro millones de votos a Edmundo González, mientras que la web de la CNE permanece caída desde que se proclamó la victoria de Maduro.
Llamados internacionales
Siete países de la Unión Europea, incluyendo Francia, Alemania, Italia, España, los Países Bajos, Polonia y Portugal, también exigieron a las autoridades venezolanas la publicación íntegra de las actas de los comicios presidenciales para garantizar la transparencia y la integridad del proceso electoral. Estos países presentaron un comunicado conjunto que expresaba su gran preocupación por la situación política en Venezuela y condenaba cualquier arresto o amenaza contra los ciudadanos, en particular los líderes políticos. Al igual que Borrell, los líderes europeos han destacado la necesidad de una verificación independiente de los resultados electorales para asegurar el respeto a la voluntad del pueblo venezolano.
El comunicado, firmado por el presidente francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz, la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el presidente del gobierno español Pedro Sánchez, Países Bajos, Portugal y Polonia, destaca la importancia de publicar todas las actas electorales para evitar dudas sobre la credibilidad del proceso.
Pero Maduro ha desestimado las críticas y ha reafirmado su victoria en las elecciones. Ha anunciado un aumento del apoyo a la Guardia Nacional Bolivariana para fortalecer su capacidad operativa y su bienestar social, destacando la importancia de mantener la cohesión y la moral dentro de las fuerzas armadas venezolanas.
Y el Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yvan Gil, rechazó la declaración de la UE, afirmando que Venezuela no es una colonia y que las agresiones de la UE serán derrotadas por la dignidad del pueblo y sus instituciones. Ha instado a Borrell a respetar la soberanía de Venezuela y ha recordado la histórica batalla de Junín como símbolo de la independencia venezolana.