La primera embajadora de Francia en España, Kareen Rispal, ha querido celebrar el Día de la Mujer con una velada muy especial. En la residencia de Francia en Madrid, en Serrano, la diplomática organizó este lunes a las 20:30 una cena de gala en la que los invitados debían acudir acompañados de una mujer que les inspirase.
También invitaron a hombres, y es que el requisito era que fueran personas comprometidas con los derechos de las mujeres, la igualdad y la lucha contra la violencia de género de todos los sectores de la sociedad, desde la cultura al deporte, pasando por la política, la justicia, los medios de comunicación o la ciencia.
Comprometidos con la igualdad
Así, entre los invitados a la Gala “Mujeres que inspiran, icónicas y emblemáticas” en la residencia de la embajadora francesa se dejaron ver el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, la cantante Luz Casal, las escritoras Rosa Montero y Carmen Posadas, la embajadora de Alemania, Maria Margarete Gosse, la presidenta del Club Malas Madres, Laura Baena, y la científica Angela Nieto, que compartieron con el centenar de asistentes a la cena claves de su trayectoria profesional así como halagaron a sus invitadas personales. Por ejemplo, la directora ejecutiva de Carrefour España, Elodie Perthuisot, acudió junto a la presidenta de Cruz Roja, María del Mar Pageo.
La embajadora de Francia en España, Kareen Rispal, durante la cena de gala con motivo del 8-M
Kareen Rispal, que llegó a Madrid en enero, aseguró que había “que ponerse manos a la obra para promover los derechos de las mujeres”. La embajadora reconoció que mientras ella pasaba su primer 8-M en España, en Francia se celebraba el primer aniversario de la consagración del derecho al aborto en la Constitución gala.
Valores no negociables
“Francia y España están firmemente comprometidas en la lucha por los derechos de la mujer. Trabajemos juntos e inspirémonos mutuamente para hacer avanzar la igualdad. La dignidad y la libertad de las mujeres son valores fundamentales que nunca serán negociables“, aseveró Rispal, para quien fue todo un honor inaugurar esta primera cena de mujeres que inspiran.
La diplomática francesa estuvo sentada al lado del ministro Marlaska, quien acudió junto a la periodista y escritora Nativel Preciado, pues ella encarna los principios y valores feministas con palabras mayúsculas desde que tiene uso de razón. “Es difícil llevarlo con la profundidad que ella lo lleva”, recalcó el titular de Interior.
El ministro del Interior junto a la embajadora de Francia
Sin retrocesos
Marlaska confesó que él aprendió el feminismo en casa, gracias a su madre, que a pesar de ser “muy conservadora”, era muy feminista y consiguió educarle a él y a sus hermanas sin prejuicios. También habló con mucho cariño de Rosa Montero a quién también calificó de “hermana”, y de sus tías de Avilés, que una de ellas, por cierto, conoció a la madre de Luz Casal en la ciudad asturiana. A pesar del progreso, el ministro indicó que no era suficiente: “Tenemos que trabajar en cualquier rincón de la sociedad y asuman los valores de la igualdad”. Y sobre todo, que no haya “ningún retroceso”. Marlaska mencionó que “nos tiene que dolor el porcentaje tanto en España como en Europa de los jóvenes que piensan que se ha llegado demasiado lejos” en materia de igualdad.
Cena de gala en la residencia de la embajadora de Francia en Madrid
Y aunque todas las mujeres invitadas tenían una trayectoria envidiable, y muchas habían roto techos de cristal, quizá el momento más emotivo fue el protagonizado por Ángela Nieto. Miembro de la Academia de las Ciencias, la experta en biología del desarrollo es, entre otras, investigadora del Instituto de Neurociencias (IN), también del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), lidera el grupo de investigación Plasticidad Celular en Desarrollo y Enfermedad en el Instituto de Neurociencias CSIC-UMH Alicante y ha recibido un sinfín de galardones por sus descubrimientos: es premio Nacional de Investigación ‘Santiago Ramón y Cajal’ de Biología y premio L’Oréal-UNESCO for Women in Science 2022.
La científica Ángela Nieto junto a su madre
Con su prolífico currículum, que no deja de aumentar, Nieto decidió ir a la cena de gala acompañada por su madre, de 90 años, de quien aprendió muchísimo de pequeña, y al igual que su padre, siempre la apoyó para que pudiera estudiar y lanzarse a la carrera de Biología. Nieto confesó que de ella sigue aprendiendo muchísimo hoy. Una mujer que cumplía a la perfección con el encabezado de la velada, pues es icónica, emblemática, y sin duda, una gran inspiración.