La Cámara de Diputados italiana aprobará esta tarde de jueves de forma definitiva la enmienda que permitiría la entrada de asociaciones provida y antiabortistas en los llamados centros de consulta, a los que se dirigen las mujeres italianas que quieren interrumpir el embarazo. Aunque ya este martes la mayoría de extrema derecha del Gobierno italiano se había encargado de blindar con sus votos una norma que hoy será votada definitivamente y luego pasará, en pocos días, al Senado. Desde el martes hasta hoy la difusión de la noticia y el enfado de las oposiciones han dado tiempo a que la polémica superase ya las fronteras italianas.
La ministra de Igualdad española, Ana Redondo, se refirió el miércoles cuenta de X donde comentaba la aprobación de esta medida en Italia diciendo que “permitir el acoso organizado contra las mujeres que quieren interrumpir el embarazo es socavar un derecho reconocido por ley. Es la estrategia de la ultraderecha: amedrentar para revertir derechos, para frenar la igualdad entre mujeres y hombres”.
Las palabras Redondo resonaron en Italia y la primera ministra no tardó en responder desde Bruselas, donde se encuentra en el Consejo Europeo extraordinario: “En varias ocasiones he escuchado a ministros extranjeros hablar de cuestiones internas italianas sin conocer los hechos. Normalmente, cuando se ignora un tema, se debe tener la buena costumbre de no dar lecciones”, reveló Efe, según le habrían confirmado fuentes de su equipo.
Tensión Italia-España
De hecho la noticia de este rifirrafe entre ambos países llena hoy la prensa italiana. El diario La Repubblica titula “tensión Italia-España sobre el aborto” y, escribe, que la aprobación italiana de esta norma se ha convertido en las últimas horas en una “cuestión europea”. En la televisión SkyNews 24 la apertura de los informativos lleva también la noticia. En RaiNews titulan sobre la confrontación entre los dos países y, añaden “en Italia enfrentamiento político”. El Corriere della Sera titula “Aborto: confrontación entre Italia y España” y cita las palabras de la ministra Redondo. La Stampa escribe, por su parte, “Madrid ataca” y cita a Meloni diciendo “no aceptamos lecciones”.
Por otro lado, la ministra de Familia, Natalidad e Igualdad italiana, Eugenia Roccella, ha salido también en defensa de la enmienda y ha criticado la intromisión española. “Sugiero a representantes de otros países de basar sus propias opiniones en la lectura de los textos no en la propaganda de la izquierda italiana, que se declara paladina de la Ley 194 pero no conoce el contenido o finge no conocerlo, desde el momento en el que critica una enmienda que no hace otra cosa que reproducir al pie de la letra la ley sobre el aborto en vigor desde hace 46 años”, dice Roccella usando el argumento que estos días han repetido los miembros de Hermanos de Italia diciendo que la nueva norma no hace nada más que reforzar el artículo 2 de la Ley 194.
La polémica se ha trasladado también al aula de Montecitorio, la Cámara de Diputados italiana, que ha visto algunas abstenciones entre la mayoría de derechas a algunas propuestas de la izquierda para modificar la polémica norma. Algo que, dicen desde el Partido Democratico, demuestra que el Gobierno italiano no está tan tranquilo con esta decisión.