“A todos los militantes de Reagrupación Nacional que durante esta campaña han sacrificado sus fines de semana, las noches y a veces a sus familias para defender con energía nuestras ideas y convencer a nuestros compatriotas, os estoy infinitamente agradecida. Muchas gracias a todos”, escribía Marine Le Pen 48 horas antes de la cita con las urnas, y lo firmaba de su puño y letra, en la red social de Instagram.
Precisamente, sacrificio, energía y gratitud, han sido algunas de las claves de la victoria del partido de Le Pen en las elecciones europeas en Francia.
El ultraderechista Reagrupación Nacional (RN) esperaba una amplia victoria y así ha sido. La líder de RN es la ganadora de los comicios en Francia. Marine Le Pen, con un 31,5%, según estimaciones, ha logrado que su partido se “desdemonice”, obteniendo un satisfactorio resultado, y ampliando la base de sus votantes. Con una buena retórica y estrategia de comunicación efectiva, ha conseguido posicionar asuntos como la migración, que suelen movilizar a sus seguidores, en el debate popular. Así, RN ha doblado en votos a la lista del partido del presidente Emmanuel Macron.
Marine Le Pen, de 55 años, ya había advertido que iba a pedir elecciones legislativas si obtenía la rotunda victoria que prevén los sondeos. Hasta tenía una rueda de prensa convocada para este lunes por este motivo. Pero Macron se le ha adelantado y en cuanto ha conocido el varapalo electoral lo ha anunciado él.
En primera persona
En la hemeroteca se suele destacar que vive con una amiga de la infancia y que le encantan los gatos. Lo confirmado es que Le Pen se ha divorciado dos veces y ha tenido tres hijos. Ha logrado proteger al máximo su privacidad y su relación con ellos. Sin embargo, es vox pópuli las pésimas relaciones con su mentor y padre. En decenas de titulares y perfiles se la tilda de haber “matado” simbólicamente a su progenitor.
La candidata a la presidencia de Francia y líder de Rassemblement National, Marine Le Pen
Le Pen proviene de linaje político, ha bebido la extrema derecha en casa. Desde que sufrió un atentado a los 8 años en su casa de París, sabe lo que supone estar en la primera línea política. Dicen que aquel episodio ha marcado su personalidad de por vida, siendo dura y poco accesible. Su padre, Jean-Marie Le Pen, fundó el Frente Nacional en 1972. Con él ha roto la relación desde 2015, de cara a la galería, por unas declaraciones antisemitas, que da hasta reparo repetir. Le expulsó y comenzó la modernización del partido. Le Pen, que comenzó a militar siendo una adolescente, fue subiendo puestos en el Frente Nacional. Asesora jurídica, vicepresidenta, eurodiputada, diputada en Francia, y tres veces candidata presidencial.
Le Pen ha dado varios giros a su política europea dependiendo del pulso de la sociedad. El gran triunfo de su estrategia política fue posicionarse junto a la clase trabajadora que se sentía abandonada por las fuerzas de izquierda. Desde ahí fue evolucionando y blanqueando su marca. Ya no pide un referéndum sobre la membresía de Francia en la UE, aunque sí es abiertamente pro-rusa. Aunque ha dejado de elogiarle públicamente (como sí hacía antes), sigue haciendo guiños a Vladimir Putin. Esta semana, sus diputados dieron un plantón al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, cuando se dirigió a la Asamblea Nacional francesa en plena invasión rusa de Ucrania.
La candidata ultranacionalista a la presidencia de Francia, Marine Le Pen, se reúne con el presidente ruso, Vladimir Putin, posan antes de su reunión en el Kremlin en Moscú en 2017.
Es un “terremoto político. Nunca un partido de extrema derecha había logrado semejante puntuación en unas elecciones en Francia”, explica el analista político Luis de Lion.
En su camino se ha encontrado con alguien de su extrema confianza con una carrera meteórica y similar. Su delfín, Jordan Bardella y candidato de Agrupación Nacional a las europeas, comenzó también como adolescente y fue ascendiendo en las filas del partido de Le Pen. El “candidato de TikTok”, con más de un millón de seguidores, ha sabido dar un aire fresco y de modernidad como deseaba Le Pen para ampliar la base de sus votantes. También es ya casi de la familia, pues está saliendo con una sobrina de Le Pen. Bardella está en una relación con Nolwenn Olivier, la hija del segundo matrimonio de Marie-Caroline Le Pen, su hermana mayor, con Philippe Olivier.
“Estamos listos para asumir el poder si los franceses nos dan su confianza”, ha indicado Le Pen esta noche en la sede del partido tras la aplastante victoria.
“Esta votación histórica demuestra que cuando el pueblo vota, el pueblo gana”, agregó la dirigente ultraderechista, llamando a la movilización el 30 de junio. Le Pen, una vez más, entra en campaña.