Malala Yousafzai ha vuelto a su país nativo, a Pakistán, para hacer lo que más le gusta, promocionar la educación de las niñas musulmanas. La cincuentena de países de mayoría musulmana del mundo participaron en la conferencia que tuvo lugar este fin de semana salvo uno, Afganistán. Precisamente, la única nación en la cual se prohíbe a las niñas asistir al instituto.
Los talibanes, que tomaron el poder en 2021, ya ni se molestan en maquillar el “apartheid de género” o defenderse. El Gobierno paquistaní confirmó que había invitado a las autoridades afganas, pero no se dignaron a acudir.
I am excited to join Muslim leaders from around the world for a critical conference on girls’ education. On Sunday, I will speak about protecting rights for all girls to go to school, and why leaders must hold the Taliban accountable for their crimes against Afghan women & girls. https://t.co/g2ymU4lTOw
— Malala Yousafzai (@Malala) January 9, 2025
Superviviente del talibán
Yousafzai, que fue atacada por los talibanes paquistaníes en 2012 cuando apenas tenía 15 años y sobrevivió a los disparos, tuvo palabras contra ellos durante su intervención para debatir la educación femenina en el mundo musulmán frente a los delegados de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) en Islamabad.
“Me entusiasma unirme a líderes musulmanes de todo el mundo en una conferencia fundamental sobre la educación de las niñas”, escribió Yousafzai en sus redes sociales antes de partir a Pakistán y avanzó que su discurso estaría centrado en la “protección del derecho de todas las niñas a ir a la escuela y sobre por qué los líderes deben exigir responsabilidades a los talibanes por sus crímenes contra las mujeres y las niñas afganas”.
“No los legitimen”
“Reconozcan al régimen talibán como perpetrador del apartheid de género. No los legitimen”, aseveró cuando se dirigió a todos los representantes presentes en el foro. Aunque ningún ha país ha reconocido oficialmente la legitimidad del régimen talibán, son muchos los que de facto mantienen relaciones con ellos.
“En Afganistán, una generación entera de niñas está siendo despojada de su futuro”, indicó la premio Nobel de la Paz 2014. “Los talibanes han arrebatado el derecho a aprender a todas las niñas afganas (…) quieren eliminar a las mujeres y niñas de todos los aspectos de la vida pública y borrarlas de la sociedad”.
Castigo a las mujeres y niñas
“Sencillamente, los talibanes de Afganistán no ven a las mujeres como seres humanos”, insistió Yousafzai, que hoy tiene 27 años. “No hay nada islámico” en las políticas de los talibanes, recalcó la galardonada con el Premio Nobel de la Paz.
Los fundamentalistas afganos “castigan a las mujeres y niñas que se atreven a infringir sus oscuras leyes golpeándolas, deteniéndolas y haciéndoles daño“, describió Yousafzai, quien añadió que los talibanes “encubren “sus crímenes con justificaciones culturales y religiosas”, pero en realidad “van en contra de todo lo que defiende nuestra fe”.
El único país del mundo
Así, Yousafzai concluyó con un dato que confirma el “apartheid de género“: “Afganistán es el único país del mundo en el que se prohíbe totalmente la educación de las niñas más allá del sexto curso”.
El padre de Yousafzai, Ziauddin Yousafzai, quien reside en Birmingham, Reino Unido, criticó la hipocresía criticó la hipocresía de los países musulmanes en una entrevista con Radio Free Europe (RFE/RL). El progenitor de la premio Nobel de la Paz describió el “silencio, la complicidad o la disculpa” de las naciones musulmanas ante el recorte de los derechos de las mujeres afganas por parte de los talibanes.
“La comunidad internacional, especialmente los países musulmanes, deberían llamar al [gobierno de Kabul] régimen de apartheid”. El freno a los derechos de las niñas y las mujeres es un “crimen contra la humanidad”, manifestó Yousafzai padre.