La líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, no ha dudado en lanzar dardos al presidente Emmanuel Macron y culparle directamente de la incertidumbre en Francia tras el triunfo de la moción de censura que ha terminado con el Gobierno de Michel Barnier.
Es “el gran responsable de la situación actual, porque en realidad, tanto la disolución como la censura son la consecuencia de siete años de macronismo“, ha respondido en una entrevista con la cadena TF1 tras la votación en la Asamblea Nacional francesa. Para la líder de los ultras, lo que ha ocurrido este miércoles ilustra la “considerable ruptura que ha surgido entre los franceses y el presidente de la República”. Y, como si ya estuviera en campaña, aprovechó los micrófonos y el horario de máxima audiencia para culpar a Macron de “la deconstrucción de sectores enteros” y de la “desindustrialización” de Francia.
De la mano de la izquierda
Le Pen y los suyos (RN) apoyaron una moción de censura presentada por la extrema izquierda (La Francia Insumisa). Una pinza que ha logrado con 331 votos (la mayoría necesaria era 289) tumbar al Gobierno de Barnier.
En la entrevista, la ultraderechista justificó su decisión, pues admite que lo hizo para “proteger a los franceses”. En su opinión, el presupuesto 2025 presentado por Barnier, era “tóxico para los franceses y la única solución digna para quienes habían recibido un mandato era protegerlos”. “No había otra solución” que la censura, insistió. Le Pen pidió que se nombre ya al nuevo “premier” para así rehacer el presupuesto. “Le dejaremos trabajar”, prometió, al tiempo que rechazó quedarse con el presupuesto de 2024, una opción que está sobre la mesa si finalmente Macron se decanta por un gobierno de tecnócratas. “Co-construiremos un presupuesto que sea aceptable para todos”.
¿Dimisión de Macron?
Con la boca pequeña, niega que ella haya pedido la dimisión del presidente Macron. “Asumirá sus responsabilidades, hará lo que le dicten su razón y su conciencia”, recalcó. “Llegará un momento en el que, si, no tomamos la voz del respeto a los electores y del respeto a las fuerzas políticas y del respeto a las elecciones, pues, evidentemente, la presión sobre el presidente de la República será cada vez más fuerte“. Para ella, sólo Macron “tendrá la decisión, la última palabra. Si quiere que los franceses vuelvan a votar, antes de 2027, o si quiere seguir en el caballo a toda costa”.
Horas antes, en el Hemiciclo, no hizo caso a los llamamientos para que no provocara un terremoto político en Francia. “La peor política sería no censurar un presupuesto como éste”, dijo durante su alocución en la Asamblea Nacional.
Le nouveau Premier ministre devra discuter avec l'ensemble des forces de l'Assemblée nationale pour travailler à un compromis sur le budget.
Il faut que les élus soient écoutés et entendus. C'est la démocratie. pic.twitter.com/I382AXufTA
— Marine Le Pen (@MLP_officiel) December 4, 2024
“No veo (la censura) como una victoria. Nuestros electores nos dieron un mandato para protegerles. Este presupuesto era una amenaza para ellos, un ataque a sus puestos de trabajo”, afirmó Le Pen.
La líder ultraderechista espera que este jueves por la noche, cuando el presidente Macron se dirija a los franceses, anuncie el nombre de un primer ministro.