La excongresista republicana Liz Cheney no sólo ha respaldado públicamente a la candidata demócrata Kamala Harris, sino que la ha acompañado a tres de los estados más importantes en estas elecciones para hacer campaña junto a ella. Cheney apela al voto conservador y moderado que sería fundamental para que Harris ganara las elecciones.
En el codiciado “muro azul”, la hija del exvicepresidente Dick Cheney (2001-2009) recorrió junto a la hoy vicepresidenta de Estados Unidos barrios de Pensilvania, Michigan y Wisconsin. Es precisamente en estos estados donde Harris no despunta, e incluso su rival, Donald Trump, está mejor posicionado.
La ex congresista republicana Liz Cheney en un acto junto a Kamala Harris en Malvern, Pensilvania
Cabe recordar, que en 2016, estos estados prefirieron al republicano frente a Hillary Clinton, a pesar de ser considerados como “votantes obreros”, de ahí la preocupación en la campaña de Harris.
Últimos sondeos en Estados Unidos
Junto a Harris, subidas al escenario a modo de ‘talk show’, ambas mostraron sintonía a pesar de sus diferencias ideológicas. La excongresista conservadora, que tiene cinco hijos, dejó claro varias veces que está en contra del aborto, pero se mostró inquieta por algunas de las situaciones que denuncia la candidata demócrata. “Me ha preocupado hasta qué punto hay mujeres que, como dijo la vicepresidenta, que en algunos casos han muerto, que no pueden recibir el tratamiento médico que necesitan porque los proveedores están preocupados por la responsabilidad penal”, aseveró Cheney, quien cree que la situación actual “es insostenible”.
Un peligro para la democracia
La excongresista de 58 años aprovechó para pedir a los republicanos que apoyaran a Harris, pues en su opinión Trump es un peligro para la Constitución de Estados Unidos e incapaz de ser presidente. Incluso en estos tres estados, Cheney ha sido aún más dura y ha argumentado mucho más que Harris por qué el magnate no debe volver a la Casa Blanca. La republicana fue una de las pocas dentro del Partido Republicano que se atrevió a criticar a Trump por su papel en el asalto al Capitolio, el peor episodio para la democracia estadounidense. Ser tan vocal le costó su puesto de congresista y la desahuciaron del Partido.
“No siempre vamos a estar de acuerdo, pero sé que la vicepresidenta Harris siempre hará lo que cree que es correcto para este país. Tiene un corazón sincero, y por eso me honra estar aquí y apoyarla en esta carrera”, reconoció Cheney.
Kamala Harris durante un evento de su campaña
Desde un suburbio de Detroit, en Michigan, Cheney hizo un llamamiento a las mujeres conservadoras que temen reacciones violentas si toman una posición pública contra Trump: “Sólo quiero recordar a la gente que, si están preocupados, pueden votar en conciencia y no tener que decir ni una palabra a nadie. Habrá millones de republicanos que hagan eso el 5 de noviembre”.
Join my conversation in Waukesha answering Wisconsinites’ questions about my plans for the American people. Hosted by Congresswoman @Liz_Cheney and moderated by @SykesCharlie—watch now. https://t.co/zBpCtP7TMo
— Kamala Harris (@KamalaHarris) October 22, 2024
En la misma línea, Cheney reprochó a su partido que encubrieran la responsabilidad del magnate conservador por el asalto al Capitolio. “Creo tan firmemente, que en estas elecciones tenemos que elegir a la persona que sea el adulto responsable”, concluyó. Recientemente, Trump ha sugerido que podría no aceptar el resultado de las elecciones en caso de ser derrotado y ha utilizado una retórica subida de tono con los demócratas.
Un paso hacia la moderación
Al acompañarse de Cheney, republicana a ultranza, Harris muestra que no está escorada a la izquierda y que busca la moderación y el bien de su país. En varias ocasiones, la vicepresidenta ha llegado a decir que su Gobierno será bipartidista y que incluirá alguna figura republicana en su Gabinete.
“He pasado mi carrera invitando a la diversidad de opiniones. Creo que es importante tener en la mesa, cuando se toman algunas de las decisiones más importantes, a personas con puntos de vista y experiencias diferentes”, indicó Harris este verano en una entrevista con la CNN. “Y creo que sería beneficioso para el público estadounidense tener un miembro de mi Gabinete que fuera republicano“.