Las votantes

Las latinas que adoran a Trump (a pesar de los insultos)

El candidato republicano mejora sus expectativas entre las votantes de origen hispano pese a sus ataques al aborto y sus mensajes xenófobos

La candidata a congresista Mayra Flores hace campaña junto a Donald Trump @MayraFloresForCongress

“El mejor de todos es el presidente Trump, asegura contundente Myrna Leticia Herrarte. Ella es una más de las latinas estadounidenses que han abrazado con entusiasmo la causa del expresidente y candidato republicano a la Casa Blanca. Su lema se extiende por las redes sociales a medida que se acerca el día de las elecciones y no deja dudas sobre sus simpatías: “Soy una chica Trump. Lidia con eso”.

Mientras que la mayoría de análisis muestran que el voto femenino fue uno de los motivos de la derrota de Trump en su duelo con el presidente Joe Biden en 2020 y que en 2024 se decantará mayoritariamente por Kamala Harris, las latinas son uno de los pocos colectivos de mujeres en los que este expresidente condenado por abusos sexuales gana terreno.

Trump

Una simpatizante del expresidente Donald Trump cerca de su residencia en Mar-a-Lago con una camiseta del candidato republicano “a prueba de balas”

Lo ha puesto de manifiesto una reciente encuesta de la cadena NBC y otros medios estadounidenses. Si en 2020 solo un 20% de las latinas votaron por Trump, se prevé que en 2024 lo haga un 34%. Unido al empate técnico que entre los latinos hombres arrojan las encuestas, el dato supone un motivo para el optimismo para la campaña de Trump, que hace progresos entre un sector de la población que hasta ahora había sido de los más fieles a los demócratas.

La inseguridad

Son varias las razones por las que cada vez más latinas se inclinan por Trump. Desde San Diego, California, María Díaz Rocha da una de las principales: “Las mafias que se cuelan a través de nuestras fronteras abiertas acaban en nuestras comunidades de latinos y, mientras papá y mamá trabajan, reclutan a nuestros jóvenes”. Sus palabras reflejan que la inseguridad es una de las principales preocupaciones a la hora de votar de las latinas, lo que las diferencia de otros colectivos como las afroamericanas o las blancas con estudios superiores, más preocupadas por los retrocesos en el acceso al aborto que se han producido en el país desde que Trump fue presidente.

En San Diego, a apenas una hora en auto de la frontera con el peligroso estado mexicano de Baja California, las cosas se ven muy distintas a cómo se ven en los distritos acomodados de feudos demócratas como Nueva York o Nueva Jersey. “Los criminales no llegan a Martha’s Vineyard ni a Hollywood”.

36 millones de latinos

Pese a todo, Harris conserva en la encuesta de la NBC una notable ventaja sobre Trump entre las latinas. Un 60% dice que votará por la vicepresidenta, pero eso queda por debajo del 71% que votó por Biden en 2020. Y la pérdida de tracción entre la comunidad latina es una tendencia especialmente preocupante para los demócratas a corto y medio plazo, ya que los latinos son el sector de la población del país que más ha crecido en los últimos años. Si en 2016 se estimaban en 27 millones los votos latinos, en 2024 han llegado a 36 millones, lo que supone un nada desdeñable 15/% del electorado.

Sondeos

La importancia del voto hispano en Estados Unidos

Entre esos millones de votantes están muchas mujeres que viven el aumento del coste de la vida como su principal problema y quieren un presidente que lo solucione. Aunque la inflación se ha moderado en los últimos meses, se ha convertido en una rémora para la popularidad de Harris, como lo fue para Biden cuando era el candidato. Y en esto las latinas no se diferencian de otros colectivos estadounidenses. Una mayoría de ellas ve a Trump más capacitado para gestionar la economía que su rival.

Trump no ha dudado en cortejar al voto latino con gestos y guiños. En un reciente mitin en Las Vegas se hizo acompañar por el famoso reguetonero de origen puertorriqueño Nicky Jam. Aunque Trump demostró que no sabía mucho de él al presentarlo como una mujer antes de que subiera al escenario, el músico no dudó en proclamar: “Necesitamos a Donald Trump”. Unas semanas antes apareció en Pensilvania con otro puertorriqueño, el rapero Anuel AA.

No es casualidad. El porcentaje de los votantes latinos es aún mayor en algunos de los estados-péndulo que decidirán a la postre el nombre del futuro presidente de Estados Unidos. En Nevada son el 29% y en Arizona llegan hasta el 31% del electorado. Y pese a que ellos mismos tienen sus raíces en países de Hispanoamérica, ven con agrado las promesas de firmeza y control de la migración de Trump, aunque se acompañen de mensajes xenófobos y mentiras.

El ataque a Puerto Rico

Es más, este mismo domingo, en un acto electoral de Trump en el Madison Square Garden, Nueva York, el comediante Tony Hinchcliffe, partidario del republicano, calificó a Puerto Rico como “una isla flotante de basura”.

Los líderes de todos los partidos políticos de Puerto Rico y artistas de renombre como JLO o Ricky Martin han repudiado estas declaraciones, que traen el recuerdo de la visita de Trump a la isla tras el devastador huracán María de 2017, cuando en un acto tiró a los asistentes rollos de papel toalla. Queda por ver si los comentarios racistas en Nueva York tendrán impacto en las urnas.

Y es que a una semana de la jornada electoral del 5 de noviembre y con los sondeos tan igualados, resulta descabellado hacer pronósticos. La única tendencia clara en las encuestas es la de que entre las latinas también habrá una alta participación, pero algunas de ellas no tienen dudas de que Trump barrerá a Harris. Como Maria Davis, que cree que la candidatura de Trump es “la fuerza más poderosa del universo” y que ahora “es su momento”. Serán las urnas las que determinen si su avance entre las latinas le alcanzan para la segunda presidencia con la que sueña Trump y que sus detractores temen.