La carrera hacia la Casa Blanca dio un giro este jueves con el desastroso rendimiento del presidente Joe Biden en el debate que lo enfrentó a su rival republicano, el expresidente Donald Trump. Y muchas mujeres, especialmente entre las demócratas, afroamericanas e inmigrantes, contienen la respiración ante lo que podría ser una nueva presidencia de Trump.
Si muchas encuestas planteaban una ligera ventaja para él de cara a las elecciones de noviembre, hay unanimidad en los sondeos en presentarle como el ganador de un cara a cara en el que Biden colapsó en varias ocasiones y se mostró repetidamente incapaz de articular un discurso coherente.
Es más, el 72 % de los votantes registrados en Estados Unidos dice que Biden no debería postularse para la reelección, según una encuesta elaborada por el medio CBS News y la firma YouGov realizada después del debate del jueves. Lo que se traduce en un aumento de 9 puntos en comparación con la misma pregunta en febrero.
El expediente de Trump reúne todos los elementos para suscitar rechazo entre las mujeres, que ya en 2020 fueron uno de los colectivos que más mayoritariamente le dieron la espalda, contribuyendo así decisivamente a la victoria de Biden.
Trump fue el presidente que propició la ola de restricciones al aborto que recorre el país, el hombre que fue condenado por abusar sexualmente de una periodista en almacén de ropa de Nueva York, el que acaba de ser condenado por irregularidades en los pagos a una estrella del porno con la que tuvo relaciones extramatrimoniales, y el que fue grabado contando como acostumbraba a “agarrar a las mujeres por el c…” con o sin su consentimiento. También, el líder que aprobó que las inmigrantes indocumentadas fueran separadas de sus hijos y menores al cargo hasta que no se produjera su deportación.
Ante el horror de una nueva presidencia
Con semejante currículum, no extraña que diversos colectivos de mujeres estén horrorizados ante la posibilidad de un retorno de Trump a la Casa Blanca, una posibilidad un poco más cercana después del debate del jueves. La columnista Lydia Polgreen encabezó su columna del día siguiente en ‘The New York Times’ con un elocuente mensaje: “Kamala Harris puede ganar esta elección. Déjenla hacerlo”. Ella es una de las muchas que cree que Biden ya no es el mejor candidato para frenar a Trump y piden que se le dé la oportunidad a su vicepresidenta. Teme un panorama sombrío para las mujeres si Trump vuelve a la Casa Blanca.
Debbie Walsh, directora del Centro para la Política y las Mujeres Estadounidenses de la Universidad de Rutgers, dijo que las mujeres de más alto nivel educativo recuerdan “el caos de Trump y se preguntan si podrían aguantar otros cuatro años de eso” y la propia Harris lleva semanas denunciando que las latinas y las afroamericanas son las que han quedado más en peligro por las medidas contra el aborto en los estados republicanos.
El presidente de EE UU, Joe Biden
Sin duda, el del aborto es el asunto de más calado de todos los que Trump es responsable. Nombró a varios jueces conservadores hasta consolidar una mayoría de ese perfil en el Tribunal Supremo, que fue la que en 2022 tumbó la doctrina conocida como Roe contra Wade, fijada en 1973 y que durante décadas había garantizado el acceso al aborto a nivel federal.
La decisión del Supremo abrió la puerta a una ola de modificaciones legales en los estados controlados por los republicanos que han hecho que ahora resulte mucho más difícil acceder a un aborto legal y seguro prácticamente en todo el sudeste de Estados Unidos y en otras zonas del país.
Antes, la visión sexista de Trump había quedado de manifiesto en los comentarios que hizo en una grabación de 2005, en la que afirmó que tenía por costumbre agarrar a las mujeres por sus genitales y arrinconarlas contra la pared, porque, según él, “cuando eres una estrella te dejan hacer cualquier cosa”.
Los abusos a E. Jean Carroll
Años antes, en 1995, Trump había abusado sexualmente de la periodista y escritora E. Jean Carroll en la zona de lencería de una tienda de ropa de Nueva York. Trump fue condenado en un caso civil por los hechos y por difamar posteriormente a Carroll.
Pero, sin duda, el episodio más conocido es el de su encuentro sexual con actriz porno Stormy Daniels, que él niega. Daniels declaró que Trump y ella tuvieron relaciones en un hotel de uno de los complejos de golf que él posee en Nevada en 2006. El asunto explotó años después, cuando salió a la luz que Trump había ordenado a su abogado pagarle 130.000 dólares para asegurarse su silencio cuando lanzó su candidatura a la Casa Blanca en 2016. Trump se convirtió en mayo en el primer presidente de la historia condenado en un caso criminal por no incluir esos pagos en sus gastos de campaña.