Cumbre de París

Hasta 30.000 soldados europeos desplegados en Ucrania para supervisar el alto el fuego

Los líderes europeos se dividen ante el dilema de desplegar fuerzas de paz en Ucrania. "Lo que está en juego no es sólo el futuro de Ucrania, es una cuestión existencial para Europa", advierte Starmer

UCrania
Olaf Scholz, Pedro Sánchez, Dick Schoof, Donald Tusk, Giorgia Meloni, Emmanuel Macron, Mette, Frederiksen, además de Antonio Costa, Ursula von der Leyen y Mark Rutte Efe

Los bombardeos aéreos y los ataques con armas de largo alcance del Ejército ruso en territorio ucraniano no cesan y no sólo en el frente de batalla. Un simple dron Shahed ha dejado sin calefacción a 100.000 vecinos de Mikolaiv, tras estallar contra la central del sur de Ucrania este domingo. Según Naciones Unidas, desde que Rusia comenzó la invasión a gran escala de su país vecino ya han muerto más de 12.340 civiles y más de 27.836  han resultado heridos.

Mientras la guerra en Ucrania sigue asolando el país, este lunes en París se han reunido los líderes de ocho países europeos (entre ellos España) así como los representantes de la OTAN, el Consejo Europeo y la Comisión Europea para tratar de dar una respuesta unitaria a Estados Unidos, que los ha excluido de la mesa de negociación con Rusia. Los mandatarios europeos temen que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump,  haya hecho ya concesiones a su homólogo ruso, Vladimir Putin, que pongan en peligro la seguridad europea y la soberanía ucraniana.

Una paz “duradera” y “con Ucrania”

Los líderes europeos insisten en que la paz que se negocie en Ucrania debe ser “con Ucrania” y “duradera”, pues ya han comprobado que a Putin no le valió con anexionarse Crimea en 2014 e iniciar conflicto en el Donbás. Ocho años después lanzó una guerra total a gran escala en Ucrania, por lo que no se fían del líder ruso.

Ucrania

Así ha quedado el edificio de Kyiv, Ucrania, atacado esta madrugada por misiles rusos

Algunos analistas militares aseguran que el mandatario ruso puede estar buscando algo de tiempo (se pensaba que iba a tomar Kiev en cinco días) para rearmarse y fortalecerse para después continuar con la expansión rusa y comenzar de nuevo las hostilidades cuando al Ejército ruso esté más preparado.

Despliegue de fuerzas de paz

En este contexto, las naciones europeas han puesto sobre la mesa una nueva estrategia militar que podría implicar el despliegue de una fuerza de “reaseguro” o “disuasión”.

Según informaciones de “The Washington Post”, la última planificación europea preveía un contingente de varias brigadas, potencialmente de 25.000 a 30.000 soldados, estacionadas estratégicamente, no a lo largo de las líneas del frente de Ucrania, sino posicionadas como una demostración de fuerza para evitar nuevas agresiones rusas. La idea que subyace tras esta fuerza es señalar a Rusia que cualquier intento de intensificar el conflicto tendría graves consecuencias, sin comprometerse directamente en un combate activo a menos que sea absolutamente necesario.

El papel de Francia

Francia, el anfitrión de la Cumbre de París de este lunes, estaría dispuesto a aportar hasta 10.000 soldados a este despliegue, según las mismas fuentes que valoran que París sea un actor más previsor en la estrategia militar europea. Sin embargo, la respuesta de otros aliados europeos ha sido más cautelosa. A muchos les preocupa la sobrecarga de sus propias capacidades militares, y algunos se muestran reticentes a comprometer tropas debido a la actual incertidumbre sobre la evolución de la guerra y los riesgos potenciales que conlleva. Con todo, cada vez hay más consenso en Europa en que una demostración contundente de fuerza podría disuadir a Rusia de reavivar las hostilidades.

Macron

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, a su llegada a París, es recibida por el presidente de Francia, Emmanuel Macron

En consonancia con esta idea, las autoridades francesas han propuesto un enfoque en el que las fuerzas europeas permanecerían muy por detrás de las líneas del frente, tranquilizando a Ucrania sin entrar directamente en combate. Esta estrategia, esperan, podría ofrecer una sensación de seguridad a la asediada población y al Ejército ucranianos, evitando al mismo tiempo la confrontación directa con las fuerzas rusas.

Reino Unido

Antes de la minicumbre de París, el primer ministro británico, Keir Starmer, reconoció que Reino Unido estaría dispuesto a enviar tropas de paz a Ucrania. Al terminar el encuentro con los mandatarios europeos, Starmer explicó que “lo que está en juego no es sólo el futuro de Ucrania, es una cuestión existencial para Europa en su conjunto” y, por tanto, es vital para el interés nacional británico.

El presidente francés, Emmanuel Macron, recibe al primer ministro británico, Keir Starmer

Starmer define este momento como “único para la seguridad colectiva de Europa” y recordó que sólo una paz duradera en Ucrania que salvaguarde su soberanía disuadirá a Putin de nuevas agresiones en el futuro.

Sin embargo, esta visión no es compartida por todos.

Polonia

El primer ministro de Polonia, Donald Tusk,  subrayó la importancia de que Europa “desarrolle una mayor capacidad de autodefensa, incrementando significativamente el gasto”, si bien indicó que “muchos países no abordan suficientemente este tema”. Polonia es el país de la OTAN que más invierte en Defensa de todos los estados miembros.

Tusk recordó que “no hay por qué irritarse cuando nuestros aliados estadounidenses dicen ‘gastad más, haceos más fuertes'”.

El primer ministro de Polonia, Donald Tusk

Sobre la posibilidad de formar un contingente militar de varios países europeos que se establezca en territorio ucraniano como fuerza disuasoria ante una nueva agresión rusa, Tusk reiteró que Varsovia no planea “enviar soldados polacos a Ucrania”, pero confirmó su disposición a “apoyar en términos logísticos y políticos a los países que quieran ofrecer tales garantías en el futuro”.

Dinamarca

“Desgraciadamente, Rusia amenaza ahora a toda Europa”, explicó la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen.

UE

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, recibe a la primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, a su llegada a la Cumbre de París

Al contrario que el vicepresidente Vance, al preguntarle cuál era la mayor amenaza para el Viejo Continente, Frederiksen aseguró que “es Rusia, por supuesto” con sus “sueños imperiales”. La primera ministra danesa se mostró muy preocupada por “la idea de un alto el fuego rápido, porque podría dar a Putin y a Rusia una mejor oportunidad (…) para movilizarse de nuevo y atacar Ucrania u otro país de Europa“, recalcó.

Estados Unidos

El vicepresidente de EE UU, J.D. Vance, ya expresó en Múnich este fin de semana su preocupación por una fuerza exclusivamente europea. Pues como apuntan los analistas militares, si atacan a las tropas europeas, que son miembros de la OTAN, habría que activar el famoso Artículo 5 del Tratado de la Alianza Atlántica, por el que las “partes acuerdan que un ataque armado contra una o más de ellas, que tenga lugar en Europa o en América del Norte, será considerado como un ataque dirigido contra todas ellas”.

Ucrania

La delegación de Ucrania se reúne con la de Estados Unidos en Múnich, Alemania

La Administración Trump, según “The Economist”, sugiere que la presencia de países no europeos, como Brasil o China, para que den más peso a cualquier esfuerzo de mantenimiento de la paz o disuasión, situando estas fuerzas a lo largo de una eventual línea de alto el fuego para actuar como amortiguador entre las dos partes enfrentadas. Sin embargo, cualquier despliegue de este tipo podría enfrentarse a una fuerte resistencia por parte de Rusia, que ha rechazado repetidamente la idea de tropas extranjeras en Ucrania. Pero, a diferencia de los países europeos, Brasil y China, están más alineados con Putin.

La OTAN

“Preparada y dispuesta. Esa es mi impresión de la reunión de París. Europa está preparada y dispuesta para dar un paso adelante, para liderar la tarea de proporcionar garantías de seguridad para Ucrania”, escribió el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en sus redes sociales al finalizar la cumbre.

“Preparada y dispuesta a invertir mucho más en nuestra seguridad. Habrá que decidir los detalles, pero el compromiso es claro“, añadió el secretario general de la Alianza, también presente en esta importante Cumbre en París.

El dilema europeo

La perspectiva de una fuerza de mantenimiento de la paz o de una presencia militar internacional en Ucrania constituye un dilema tanto moral como estratégico para la comunidad internacional. Los mandatarios deben sopesar cuidadosamente las consecuencias de esta medida, especialmente en lo que se refiere a la cohesión de la OTAN y la posibilidad de una escalada del conflicto. Mientras Europa y Estados Unidos siguen evaluando sus próximos pasos, la pregunta sigue siendo: ¿puede una fuerza de paz disuadir a Rusia y salvaguardar al mismo tiempo los intereses de seguridad más generales de Occidente?