Cumbre de la OTAN

España, el país más rezagado de la OTAN en materia de Defensa

A pesar de que los socios afean a Sánchez la infrainversión, el presidente del Gobierno se limitará a comprometerse con cumplir con el umbral del 2% del PIB en materia de Defensa en 2029

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, asistió el martes por la noche al acto conmemorativo del 75ª aniversario de la fundación de Alianza Atlántica. Sánchez asistió acompañado del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y la titular de Defensa, Margarita Robles. Quien no viajará junto a Sánchez es su esposa, Begoña Gómez, quien sí asistió a la cumbre de la OTAN celebrada en Vilna, Lituania, el año pasado, y también jugó un importante papel como anfitriona en Madrid en 2022.

Este año, el presidente Joe Biden, junto a la primera dama Jill Biden, darán la bienvenida a los 32 líderes de la OTAN como anfitriones de un acto conmemorativo del 75 aniversario en el Auditorio Mellon, que es el lugar, de la firma original del tratado del Tratado del Atlántico Norte, que estableció la OTAN en 1949.

Biden

El presidente de EE UU, Joe Biden, y la primera dama Jill Biden

Sin embargo, Sánchez llega a esta importante cita como el peor alumno de la clase. Sus socios (y los medios de comunicación del resto de países) le afean que, a pesar del momento histórico en Europa, con una invasión de Rusia a las puertas, España no haya hecho los deberes en materia de Defensa.

Si Polonia lidera el ranking y gasta ya más de un 4% del PIB en Defensa, España es la nación que menos PIB destina a las Fuerzas Armadas. Sólo un 1,28%. No obstante, cabe destacar que España es la cuarta economía de la UE, por lo que sus socios creen que España es capaz de aportar más, dada la relevancia que tiene.

Por ejemplo, en el “Financial Times“, aluden a que a la Administración Biden le gustaría que España invirtiera en nuevos sistemas de defensa antiaérea y se uniera al emblemático programa estadounidense de aviones de combate F-35. Con todo, agradecen a España permitir que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos puedan seguir usando las bases navales y aéreas de Rota y Morón, claves para la geoestrategia y los intereses estadounidenses en la región.

En el diario salmón explican el por qué España es el país más rezagado de toda la Alianza Atlántica. Lo achacan a una desconfianza bipartidista hacia el militarismo. “No hay halcones de la defensa en la política nacional que aboguen por un aumento significativo del gasto. Alberto Núñez Feijóo, líder de la oposición conservadora, es un crítico implacable de Sánchez, pero lo máximo que ha pedido es un aumento de los salarios de las Fuerzas Armadas”.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, manteniendo una videoconferencia con los contingentes españoles en Líbano, en Eslovaquia y en el océano Índico

Según Carlos Miranda, ex diplomático que fue embajador de España ante la OTAN, su origen se halla en las tendencias pacifistas derivadas de una historia que incluye una dictadura militar. “Todo lo que es militar, todo lo relacionado con la guerra, es impopular”, indicó Miranda al ‘Financial Times‘. “Si el Gobierno dice que va a comprar otro carro de combate, la respuesta es: podríais haber construido una escuela con ese dinero”, argumenta.

Así, todo apunta a que en esta cumbre Sánchez no hará otra cosa que ratificar lo que ya prometió en la cumbre de Madrid: que en 2029, España cumplirá con el umbral del 2% de PIB en materia de Defensa. El aumento del gasto se hará de manera progresiva.

Sin embargo, esta podría ser la última cumbre de la OTAN sosegada de los últimos años. Con un Biden en horas bajas, los socios temen que sea la última cumbre del mandatario estadounidense y que en noviembre sea Donald Trump quien gane las elecciones. El polémico magnate ya ha amenazado con animar a Rusia a hacer “lo que le dé la gana” con los miembros de la Alianza que no gasten lo suficiente.

Tras la entrada de Suecia y Finlandia, y con el reto de respaldar a Ucrania de manera inquebrantable en su defensa contra Rusia, los 32 socios se comprometieron a gastar, al menos, un 2% del PIB en sus Fuerzas Armadas.

El año pasado, diez miembros de la Alianza ya cumplieron con el objetivo, y según la OTAN, a finales de este 2024, serán 23 los países que lo superarán. Además de Polonia, Estonia, Estados Unidos, Letonia, Grecia, Lituania, Finlandia, Dinamarca, Reino Unido, Rumanía, Macedonia del Norte, Noruega, Bulgaria, Suecia, Alemania, Hungría, República Checa, Turquía, Francia, Países Bajos, Albania, Montenegro y Eslovaquia.

A España le quedan otros cinco años más para cumplir con el resto de socios atlánticos.