Las anticipadas elecciones americanas ya han llegado a su fin, con una victoria que en realidad es derrota para la igualdad y los derechos humanos: Donald Trump volverá a la Casa Blanca, y esta vez lo hace gracias al voto popular.
Los datos preliminares de las encuestas a pie de urna revelan un país profundamente dividido: Kamala Harris obtuvo un 54 % del voto femenino frente al 44 % de Trump, un margen menor al que esperaba su campaña y ligeramente inferior al apoyo femenino recibido por Joe Biden en 2020. En cuanto a los votantes por etnia, Trump lidera entre la mayoría blanca, mientras Harris cuenta con el respaldo mayoritario de los votantes afroamericanos y latinos, aunque el apoyo hispano a Trump aumentó en más de 10 puntos en comparación con las elecciones anteriores.
Los votantes jóvenes se inclinaron principalmente hacia Harris, mientras que los de mediana edad se decantaron por Trump. Los mayores de 65 años, en cambio, se mantuvieron divididos. En el ámbito educativo, casi seis de cada diez votantes con estudios universitarios optaron por Harris, mientras que una proporción similar de quienes carecen de un título universitario apoyaron a Trump. Pero, ¿cómo votó cada estado? Trump arrasó en casi todos los estados ‘bisagra’, territorios clave para la victoria en el colegio electoral.
Los resultados, estado por estado
En el oeste de Estados Unidos, los resultados presidenciales reflejaron en gran medida las tendencias políticas de toda la vida: en California, Kamala Harris se impuso con el 58.6 % de los votos, consolidando a este estado como un bastión demócrata seguro, mientras Donald Trump obtuvo el 38.9 %. Oregón y Washington también favorecieron a Harris, con un 54.9 % y un 58.4 %, respectivamente, manteniendo su inclinación hacia el partido demócrata en toda la costa oeste. Sin embargo, en Nevada, Trump logró una victoria estrecha con el 51.5 % de los votos, reforzando la posición de este estado como uno de los ‘bisagra’ más disputados.
En Arizona, otro estado clave, Trump ganó con el 50.4 %, lo cual resultó en una sorpresa ya que en 2020 el estado había votado por el candidato demócrata. Y en Alaska y Utah, Trump también lideró con un 55.1 % y un 60.5 %, respectivamente, resultados esperados en estos bastiones republicanos del oeste.
En cuanto al Senado, los demócratas mantuvieron su dominio en la costa oeste. Adam Schiff, demócrata, obtuvo una victoria cómoda en California con el 58.4 %. En Nevada, el republicano Sam Brown lideró una contienda cerrada con un 48 %, reafirmando la naturaleza disputada del estado. Y en Utah y Alaska, los republicanos lograron victorias claras, manteniendo su control en estas regiones.
El centro de Estados Unidos
En la región central americana, conocida como ‘Midwest’, Trump obtuvo victorias en varios estados clave: Ohio se inclinó hacia Trump con un 55.2 %, mientras que en Iowa también ganó con un 56.1 %, ambos resultados dentro de las expectativas en estos estados de tendencia republicana. Wisconsin resultó ser un estado crucial donde Trump se impuso con el 51.2 %, en una victoria clave en un territorio que ha mostrado variaciones en elecciones recientes. Y en Michigan, otro estado ‘bisagra’, Trump lideró con un 52.5 %, recuperando terreno frente a los demócratas y consolidando su presencia en toda la zona.
Para el Senado, los republicanos también triunfaron, con Mike Rogers, republicano, liderando en Michigan con un 50.9 %, mientras que en Ohio, Bernie Moreno ganó con un 50.3 %. En Wisconsin, Eric Hovde mantuvo el control republicano con un ajustado 50 %, consolidando así los logros republicanos en esta región disputada.
Desde el noreste
En el noreste, Kamala Harris consolidó el dominio demócrata en varios estados clave como Nueva York, donde ganó con un contundente 55.5 %, mientras que en Massachusetts obtuvo el 61.8 %, ambos resultados esperados en estos bastiones azules. Connecticut y Rhode Island también favorecieron a Harris con márgenes cómodos, con un 54 % y 55.4 %, respectivamente. En Nueva Jersey, la candidata demócrata obtuvo un 51.4 %, y en Vermont, ganó con el 64.3 %. De esta manera, el noreste reafirmó su tendencia azul, favoreciendo a Harris en casi todos los estados.
Los demócratas también dominaron la región en el Senado. Kirsten Gillibrand retuvo su asiento en Nueva York con un 58.4 %, mientras que Elizabeth Warren en Massachusetts y Sheldon Whitehouse en Rhode Island aseguraron victorias parecidas. Y en Nueva Jersey, Andy Kim, demócrata, ganó con un sólido 53 %, consolidando el control del Senado para el partido azul en el noreste.
El sur, pro Trump
Mientras tanto, el sur de Estados Unidos se mantuvo firme en su apoyo a Trump. En Florida, uno de los estados más disputados, Trump ganó con un 56.1 %, y Texas también favoreció a Trump, quien obtuvo el 56.6 %, reafirmando el estado como un bastión republicano importante. Otros estados sureños, como Alabama (64.7 %), Misisipi (62 %), Luisiana (60.2 %), y Carolina del Sur (58.1 %) dieron amplias victorias a Trump — resultados en línea con la tendencia conservadora de la región. Y Georgia, un estado donde las encuestas previas indicaban una carrera reñida, finalmente se inclinó hacia Trump con un 50.7 %, manteniéndose en la columna republicana.
En el Senado, el sur también mostró su inclinación hacia los republicanos. Rick Scott ganó en Florida con un 55.6 %, mientras que Ted Cruz mantuvo su asiento en Texas con el 53.6 %. En Tennessee, Marsha Blackburn obtuvo un 63.9 %, y Jim Justice en Virginia Occidental ganó con un 68.9 %, reafirmando el sur como territorio republicano seguro en el Senado.
En Kansas, Misuri y Nebraska, Trump ganó con márgenes amplios, ya que estos estados suelen inclinarse hacia el partido rojo. Y en Dakota del Norte y Dakota del Sur, Trump obtuvo el 67 % y el 66.6 %, respectivamente, victorias alineadas con la fuerte tendencia republicana de estos estados. Wyoming fue otro estado donde Trump arrasó, con un 71.4 %, siendo uno de los estados más republicanos del país.
Para el Senado, la región central también se mantuvo firme en su apoyo a los republicanos. En Misuri, Josh Hawley ganó con un 55.5 %, mientras que en Dakota del Norte, Kevin Cramer obtuvo el 66.3 %. En Wyoming, John Barrasso arrasó con el 75.8 %, prueba de la fuerza de los republicanos en esta región.