El presidente del partido conservador de Francia Los Republicanos (LR), Éric Ciotti, se pronunció este martes en favor de constituir “una alianza” con el ultraderechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen para formar un “bloque nacional” en las próximas elecciones legislativas.
“Necesitamos una alianza con la Agrupación Nacional”, afirmó Ciotti en una entrevista en el canal TF1, en la que justificó su postura porque su partido es “demasiado débil” por sí solo frente a los demás grandes bloques políticos para defender “los valores de la derecha”.
Postura personal
Ciotti también esgrimió “la necesidad de servir hoy al país, que está en peligro” y dijo que esta postura es personal, aunque “deseo que mi familia política me siga”.
La filtración de que el LR estaba negociando una alianza con el RN generó hoy una reacción negativa en la formación conservadora, donde sus más importantes presidentes regionales y varios destacados diputados y senadores señalaron su disconformidad.
“Jamás aceptaré un compromiso con los extremos”, aseguró por ejemplo Valérie Pécresse, presidenta de la región Isla de Francia que engloba París, y candidata presidencial de LR en 2022.
Críticas en el partido
“Vender su alma por un plato de lentejas y luego venderlo diciendo que es por el interés del país (…) Los Republicanos deben rechazar de manera inmediata el acuerdo propuesto por Ciotti con Agrupación Nacional (RN)”, se rebeló Pécresse, presidenta de la región que engloba a París.
El presidente del grupo parlamentario en la Asamblea Nacional, Olivier Marleix, afirmó tras la entrevista que Ciotti “habla por sí mismo” y debe abandonar la presidencia del partido.
Otros dirigentes de la formación, como la vicepresidenta Florence Portelli, se sumaron igualmente a esa petición de que Ciotti deje el puesto, lo que genera el riesgo de una implosión interna de la formación clásica de la derecha a menos de tres semanas de la primera vuelta de las elecciones, el 30 de junio.
Ciotti, que es miembro del ala más derechista del partido, con posturas próximas al RN en cuestiones migratorias o de seguridad interior, señaló en su entrevista a TF1 que ya había hablado con los principales líderes del RN, Marine Le Pen y Jordan Bardella.
“El objetivo es seguir manteniendo un grupo potente en la Asamblea Nacional”, señaló.
Ciotti, fuera del partido
También el presidente del Senado francés, Gérard Larcher, pidió este martes la dimisión del presidente de su partido, Éric Ciotti.
À la suite des déclarations d’@ECiotti j’estime qu’il ne peut plus présider notre mouvement et doit se démettre de son mandat de président des @lesRepublicains
— Gérard Larcher (@gerard_larcher) June 11, 2024
“Considero que no puede presidir más nuestro movimiento y que debe abandonar su mandato de presidente de Los Republicanos”, dijo en un lacónico mensaje en la red X Larcher, quien es la segunda autoridad institucional de Francia tras el presidente de la República.
Larcher, de 74 años, preside la Cámara Alta francesa desde hace diez años, en la que acaba de ser reelegido por lo que su puesto no está en juego en las próximas legislativas.
La voz crítica de Larcher se unió a las de otras pesos pesados del partido heredero de Charles de Gaulle y Jacques Chicac y refundado por Nicolas Sarkozy en 2002. El LR forma parte además del grupo del Partido Popular Europeo (PPE), el más numeroso en la Eurocámara.
A la entrada de una reunión extraordinaria de Los Republicanos, Michel Barnier, antiguo ministro, comisario europeo y negociador por la UE del acuerdo para el Brexit, afirmó ante los medios que Ciotti “ya no tiene ninguna legitimidad para hablar en nombre de la familia política” de los conservadores.
Como “traición” calificó la maniobra de Ciotti otro peso pesado de su partido, Laurent Wauquiez, presidente de la región Auvernia-Ródano-Alpes y presidente del partido entre 2017 y 2019.
Ciotti quería a Wauquiez como candidato en las presidenciales de 2027.
Desde las elecciones de 2017, el LR, fundado por Nicolas Sarkozy y heredero de la derecha tradicional gaullista, se ha visto muy debilitado por el tirón de la ultraderecha y la emergencia del movimiento del presidente Emmanuel Macron, que le han restado buena parte del espacio político tanto a su derecha como a su izquierda. Sin embargo, la postura de Ciotti rompe con la política del ‘cordón sanitario’ que durante décadas había bloqueado cualquier pacto con la ultraderecha del RN, anteriormente Frente Nacional (FN), por parte de los partidos tradicionales de la política francesa.