La nueva legislatura del Parlamento Europeo, que durará hasta el año 2029, se ha inaugurado hoy en Estrasburgo. Políticos conocidos y por conocer asistieron a la votación por la próxima presidenta de la Eurocámara, puesto que se han debatido solo dos candidatas: Roberta Metsola e Irene Montero. Y la victoria fue de Metsola, con un aplastante 90,2% de los 623 votos válidos emitidos.
Este es el mejor resultado de toda la historia obtenido por un candidato a presidente del Parlamento Europeo. Además, Metsola es la primera mujer en la historia que consigue ser reelegida presidenta de esta institución para dos mandatos consecutivos y la más joven, en toda la historia, en presidir la Eurocámara.
La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola y candidata a la reelección, Roberta Metsola
Con todo, la proporción de mujeres en el Parlamento Europeo ha disminuido por primera vez en la historia, sólo un 38,75% de los 720 eurodiputados recién elegidos son mujeres. Este es el primer descenso desde 1979, lo que representa una reducción de solo el 1,1 %, pero marca el fin de una tendencia ascendente hacia la paridad. En 2019, hubo un 40 % de eurodiputadas, cifra que se acercaba a la igualdad pero aún quedaba lejana. Esta vez, solo habrá 281 entre los 720 eurodiputados.
Aunque la disminución es pequeña, de solo un 1%, marca un cambio en la tendencia ascendente hacia la paridad de género. Solo el grupo de los Verdes/ALE alcanzará la paridad con un 50,9% de mujeres en sus filas. Le siguen La Izquierda y el grupo centrista Renew con alrededor del 45%, mientras que el grupo conservador y reformista europeo (ECR) tiene la proporción más baja, con solo un 21,7% de mujeres. La reducción en la proporción de mujeres, según Frantescu, se debe a los resultados electorales que vieron una pérdida de escaños para los Verdes/ALE, Renew y la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D).
En cuanto a la edad, la media ha aumentado ligeramente de 49,5 a 50 años, con aproximadamente una quinta parte de los eurodiputados por debajo de los 40 años y otra quinta parte por encima de los 60. La eurodiputada más joven es la activista climática austriaca Lena Schilling, de 23 años, y el más mayor es Leoluca Orlando, un exalcalde de Palermo, de 76 años, ambos del grupo de los Verdes/ALE. Frantescu explicó que “los jóvenes tienden a optar por partidos más recientemente creados, como los Verdes (41,5%) y algunos de los nuevos partidos de izquierda”. Los partidos tradicionales tienen una edad promedio ligeramente superior.
Imagen aérea del Parlamento Europeo en el momento en que habla la presidenta Roberta Metsola
Otro dato interesante es que casi dos tercios (61,5%) de los eurodiputados provienen de partidos que no están en el gobierno. Esto podría afectar las relaciones interinstitucionales, ya que estos eurodiputados no tienen interés en apoyar lo que sus gobiernos defienden a nivel del Consejo Europeo. En países como Francia y Alemania, la mayoría de los eurodiputados no pertenece a los partidos gobernantes, lo que implica una mayor tendencia a criticar las políticas del gobierno en el Consejo Europeo.
Por otra parte, más de la mitad de los eurodiputados son nuevos en el Parlamento, lo que podría llevar unos seis meses para que se familiaricen con su funcionamiento.
Paridad entre países
Según las cifras, los únicos grupos paritarios son los Verdes y La Izquierda, con un 50 % de representación para cada sexo. Les siguen los liberales de Renew, con un 43,75 % de mujeres, y los Socialdemócratas (S&D), con un 43,38 %. El Partido Popular Europeo (EPP) cuenta con un 35,36 % de mujeres, mientras que los Reformistas y Conservadores Europeos (ECR) tienen un 24,39 %. Todavía no hay ningún grupo con más mujeres que hombres.
Por otro lado, Suecia es el país que más eurodiputadas ha aportado, con un 62 % de representación femenina, seguido de Finlandia con un 60 %. Francia cuenta con un 52 %, y España tiene una notable representación del 49,18 %. En el otro lado de la balanza está Chipre… que en esta ocasión no ha apostado por ni una sola candidata femenina.
Con todo, algunas de las políticas que han ocupado sus escaños en el hemiciclo de Estrasburgo son caras conocidas de la política en sus respectivos países.
Marion Marechal
Marine Le Pen, abraza a Marion Marechal-Le Pen
Es la sobrina de Marine Le Pen, pero su rival en la política, porque formaba parte del partido Reconquista, que lidera Eric Zemmour. Marion Marechal lleva desde las últimas elecciones de Francia siendo una figura prominente de la extrema derecha francesa, y llega al Parlamento Europeo con una agenda marcada por la soberanía nacional y la restricción de la inmigración. Es una de las voces más influyentes en el movimiento identitario europeo y se espera que desempeñe un papel crucial en la configuración de las políticas migratorias y de seguridad de la UE en los próximos años. Su llegada a Estrasburgo marca un refuerzo del ala más conservadora del Parlamento.
Irene Montero
La eurodiputada Irene Montero en su estreno en el PE
Destacó la presencia de Irene Montero, que, como candidata a la presidencia, pronunció un discurso en nombre de la Izquierda. Hasta ahora Ministra de Igualdad de España, Montero fue una figura clave en la implementación de políticas progresistas y de género. Por eso su transición al Parlamento Europeo promete una mayor atención a la igualdad de género y a los derechos LGTBI+ a nivel comunitario. Además, es una voz firme en la lucha contra la violencia de género y se espera que continúe ese trabajo en la Eurocámara, defendiendo políticas inclusivas y sociales.
Jordan Bardella
También inaugura hoy el cargo el joven líder del partido de extrema derecha francés, Jordan Bardella, que está en ascenso en las encuestas y dominando el debate en Francia — y casi gana las elecciones legislativas del mes pasado. Criado en una familia pobre de origen italiano en los suburbios de París, Bardella se unió a la extrema derecha como adolescente y rápidamente ascendió en las filas del Rassemblement National. A sus 28 años, está disfrutando de un ascenso meteórico que lo hace parecer eclipsar a su mentora, Marine Le Pen. Lo más probable es que en la Eurocámara empuje una agenda nacionalista y anti-inmigración.
Maximilian Krah
Otro nuevo eurodiputado destacado es Maximilian Krah, un político alemán del partido Alternativa para Alemania (AfD), que llega al Parlamento Europeo con un enfoque en la soberanía nacional y la crítica a la burocracia de la UE. Krah ha sido una figura controversial en la política alemana, conocida por su postura euroescéptica y su oposición a las políticas de inmigración de la UE. En estas elecciones, llenó titulares tras afirmar, durante una entrevista, que no todos los miembros de la SS fueron criminales. Tras este comentario percibido como pro-nazi, fue expulsado del grupo parlamentario Identidad y Democracia. Sin embargo, buscará fortalecer la cooperación entre los partidos de derecha y promover políticas que reduzcan el control de la UE sobre los estados miembros, a través de un nuevo grupo parlamentario.