Escalada en Oriente Próximo

Cuando Israel devuelva el golpe, Irán “no entenderá qué le ha pasado”

El ministro de Defensa israelí asegura que el ataque será "letal, preciso y sorprendente". Netanyahu y Biden hablan tras dos meses de incomunicación y "frustración" por parte de Washington

Un nuevo recluta hutí pisa una pancarta que representa al primer ministro israelí Netanyahu y al presidente estadounidense Biden durante una reunión para mostrar desafío contra los ataques estadounidenses y británicos a las posiciones hutíes, en Saná, Yemen, el 8 de febrero de 2024. EFE/EPA/YAHYA ARHAB

Por fin se ha producido la llamada, la conversación telefónica entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. Han pasado dos meses (desde el 21 de agosto) desde que los dos mandatarios no hablaban y la conversación ha durado unos 50 minutos. 

El principal interés de Biden es conocer los planes de ataque de Israel, cómo y cuándo será la respuesta del Ejército israelí al ataque con misiles balísticos iraníes que se produjo hace ya una semana, el martes 1 de octubre, contra la ciudad de Tel Aviv.

Un ataque que no escale

Estados Unidos no quiere que la respuesta escale aún más el conflicto en Oriente Medio, por lo que presiona al máximo a Israel para que su ataque sea contra objetivos de la Guardia Revolucionaria y no, como apuntan algunas fuentes, contra infraestructura energética y nuclear. Fuentes en Washington han filtrado estos días la “frustración” con Netanyahu por no conocer los planes israelíes. Incluso los medios estadounidenses aseguran que Netanyahu pospuso un viaje de su ministro de Defensa, Yoav Gallant, a Estados Unidos, para reunirse con su homólogo, Lloyd Austin, para que fuera el propio “premier” quien discutiera estos asuntos con Biden.

Israel

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en una reunión con soldados desplegados en el frente norte del país

Así, en la esperada llamada también estuvo presente la vicepresidenta y candidata a la presidencia, Kamala Harris, según difundió la Casa Blanca.

Precisamente este martes, Netanyahu se reunió durante horas con ministros y jefes de los servicios militares y de inteligencia de Israel para discutir el alcance y el calendario del golpe israelí contra Teherán. Según Axios, se espera que las represalias sean significativas y que probablemente incluyan una combinación de ataques aéreos contra objetivos militares en Irán y ataques clandestinos como el que acabó con el líder de Hamás Ismail Haniyeh en la capital iraní.

El ataque podría producirse esta misma semana. Ante esta espiral de amenazas y contraataques, el mundo contiene el aliento, pues el ataque israelí no debe ser lo suficientemente grave para que Irán no vuelva responder aún más fuerte, sumiendo a la región en una guerra total.

“No entenderán qué ha pasado ni cómo”

Mientras, el titular de Defensa israelí ha reconocido en una visita a la Unidad de Inteligencia 9900 de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que Irán “no va a entender lo que le pasó, ni cómo”. El ataque israelí será “letal, preciso y sorprendente”. Según recoge el diario “The Times of Israel”, Gallant ha asegurado que el ataque iraní fue “agresivo, pero fracasó porque fue impreciso”. Ni la Fuerza Aérea de Israel ni los aviones, así como ningún soldado ni civil sufrieron daños.

El ministro de Defensa israelí aseveró que todo el sistema de seguridad israelí, desde el soldado sobre el terreno hasta el primer ministro, está sincronizado en torno al ataque contra Irán: “Toda la cadena de mando está alineada y centrada en torno a este asunto”.

En el frente con Líbano

Mientras, los rumores sobre que se Hizbulá había aceptado un alto el fuego antes de la muerte de su líder, Hasan Nasrala, han sido confirmados por el Gobierno de Líbano. Israel también ha matado al sucesor de Nasrala, Hashem Safi al Din.

El humo se eleva sobre el Aeropuerto Internacional Rafik Hariri como resultado de un ataque aéreo israelí en Dahieh, en el suburbio sur de Beirut, Líbano, el 08 de octubre de 2024

De momento, la invasión terrestre y los bombardeos en otros puntos del país de los cedros como el sur de Beirut se ha saldado con 2.141 fallecidos, y más de 10.000 heridos. En las últimas horas, al menos 22 personas murieron en el sur y en el valle de Beca y 80 resultaron heridas en los ataques israelíes.

Con todo, este martes en Líbano se vivió la segunda mayor oleada de ataques desde que Israel intensificara su campaña aérea contra Hizbulá en Líbano a finales del mes pasado.

El Ejército israelí informó que en la última semana, las tropas de su 36ª división han destruido hasta ahora más de 500 objetivos de infraestructura de Hizbulá y han destruido túneles subterráneos. También explicaron que habían eliminado a “muchos terroristas”.