2024 ha llegado cargado de elecciones. En este año en que más de la mitad del planeta acudirá a las urnas cabe preguntarse cuántas políticas ocupan ya los cargos más importantes de un país. Lo cierto es que, de los 193 miembros de Naciones Unidas, tan solo trece están liderados por mujeres.
Giorgia Meloni ha sido una de las últimas mujeres que ha roto el techo de cristal en Italia. Desde el año 2022, la política ultraconservadora es la primera ministra italiana, haciendo historia como la primera jefa de Gobierno. Hay otros nombres como la estonia Kaja Kallas o la hondureña Xiomara Castro que recientemente también han logrado tener las riendas de sus respectivos países, convirtiéndose en auténticas pioneras.
De la primera a la última
La última en sumarse a este selecto club ha sido Evika Silina, quien desde septiembre de 2023 es la jefa del Gobierno de Letonia. La “premier” letona y líder de Nueva Unidad ya fue ministra de Bienestar en el Ejecutivo anterior. En Letonia ya han tenido una mandataria. Hay que remontarse a 2014, cuando Laimdota Straujuma accedió al cargo y se convirtió en la primera política en lograrlo.
Así, Sheikh Hasina, la mandataria de Bangladés, es ya una de las caras femeninas más conocidas en el panorama internacional. Hasina, del partido Liga Awami, ha logrado este enero su cuarto mandato consecutivo al frente del país asiático de más de 170 millones de habitantes. Lleva como primera ministra bangladesí desde 2009, pero accedió al cargo por primera vez en 1996.
En Islandia, Katrín Jakobsdóttir es la primera ministra desde 2017. La líder del Movimiento de Izquierda Verde renovó su mandato en 2021. Jakobsdóttir es una gran defensora de la igualdad en Islandia. Es más, recientemente la mandataria hizo huelga junto al resto de las mujeres islandesas para protestar contra la brecha salarial y la violencia sexual. Pero Jakobsdóttir no es la primera en acceder a la jefatura de Gobierno. Ya abrió el camino Jóhanna Sigurðardóttir en 2009.
Lo cierto es que, en total, 59 Estados miembros de la ONU han tenido alguna vez una mujer dirigente. La que inició esta conquista fue Sirimavo Bandaranaike en Sri Lanka. Era la primera vez que el mundo veía a una “premier” femenina. Fue en el año 1960 y estuvo al frente del país asiático durante casi cinco años.
Pero estas mujeres son una excepción. En la actualidad, 134 países de la ONU no han tenido una mujer al frente del país. Uno de ellos es España, donde nunca ha habido una presidenta del Gobierno. Asimismo, las dos potencias hegemónicas Estados Unidos y China, tampoco han tenido una mandataria.
Los países que repiten
Al preguntarle a las investigadoras Laura Clancy y Sarah Austin del Pew Research Center si una vez que se consigue es más fácil que un país tenga otra vez una nueva primera ministra o presidenta, las analistas especializadas en actitudes globales aseguran a Artículo14 que sólo “catorce estados de la ONU han sido liderados por múltiples mujeres”. Es más, “sólo seis países de la ONU han estado lideradas por más de dos mujeres: Finlandia (Anneli Jäätteenmäki y Sanna Marin), Reino Unido (Margaret Thatcher, Theresa May y Liz Truss), Moldavia, Nueva Zelanda, Polonia y Suiza".
Clancy y Austin explican que el año en que más países tuvieron una mujer en el importante puesto fue 2010. En aquel entonces, “cinco países -Australia, Costa Rica, Kirguistán, Eslovaquia y Trinidad y Tobago- vieron a su primera lideresa llegar al poder. Eso marca el mayor número de estados miembros de la ONU tener a su primera dirigente en un año desde el final de la Segunda Guerra Mundial”.
Para las investigadoras del Pew Research, “existe una tendencia al alza en el número de países que han tenido alguna vez una dirigente, aunque el número de mujeres que ocupan activamente un cargo en un año determinado aumenta a un ritmo mucho más lento”.
Según sus datos, hasta marzo de 2023, “no más de 18 países habían tenido mujeres líderes en el mismo año natural. El recuento llegó a 18 en 2014, pero descendió hasta 13 entre 2015 y 2023”. Este 2024, de momento, continúa con trece mujeres.
En la actualidad, el club de las primeras lideresas es reducido. La primera ministra de Serbia, Ana Brnabic, fue pionera en el país balcánico, así como la “premier” Mia Mottley en Barbados. En Tanzania, la presidenta Samia Suluhu rompió el techo de cristal en el país africano en 2021, mientras que la peruana Dina Boluarte lo hizo en el país iberoamericano. No obstante, ni la jefa del Estado peruana ni Suluhu han sido elegidas directamente en las urnas, sino que ambas eran las vicepresidentas y estarán al frente del país hasta que se convoquen las próximas elecciones.