Ah, el verano… esa estación del año que nos invita a lucir nuestras piernas con orgullo, ya sea en la playa, en el parque o simplemente paseando por la ciudad. Sin embargo, con las altas temperaturas y las largas caminatas, es común que nuestras extremidades terminen sintiéndose como si pesaran una tonelada. Pero tranquila, tenemos la solución para aliviarlas y te contamos todo lo que puedes hacer para reducir el dolor y la hinchazón.
¿Por qué se cansan las piernas en verano?
Las piernas cansadas en verano son un problema más común de lo que piensas. El calor dilata las venas, dificultando el retorno venoso y provocando esa sensación de pesadez y fatiga. Además, la humedad y las altas temperaturas aumentan la retención de líquidos, lo que hace que nuestras piernas se sientan aún más hinchadas y doloridas.
Cuando las temperaturas suben, nuestro cuerpo se pone en modo “refrigeración”. Esto significa que los vasos sanguíneos se dilatan para ayudar a liberar el calor, lo que puede llevar a la acumulación de líquidos en las extremidades inferiores. Además, el calor puede afectar la circulación, haciendo que nuestras venas trabajen extra para llevar la sangre de vuelta al corazón, y no siempre con éxito. El resultado: piernas hinchadas y una sensación de pesadez que soñamos con evitar.
El equipo anti-hinchazón: métodos naturales para ponerle remedio
¡Afortunadamente, no todo está perdido! Antes de contarte cuál es el último truco de belleza para ponerle freno, resumimos algunos trucos naturales y fáciles para mantener tus piernas frescas:
- Agua, agua y más agua: El remedio de siempre sí, pero funciona. Beber mucha agua ayuda a combatir la retención de líquidos.
- ¡Mueve esas piernas!: No te quedes sentada durante horas, aunque estés trabajando. Levántate y estira las piernas. Si estás en la oficina, aprovecha para hacer recados cortos o simplemente camina un par de minutos.
- Duerme con las piernas elevadas: Eleva las piernas unos 15 centímetros mientras duermes para ayudar al flujo sanguíneo. Puedes usar una almohada debajo de tus piernas para mayor comodidad.
- Compresas frías: Las compresas frías son un alivio instantáneo. Envuélvelas en una toalla y colócalas sobre tus piernas durante 15-20 minutos. El frío ayuda a reducir la inflamación.
- Masajes con aceites esenciales: Los masajes no sólo son relajantes, también mejoran la circulación. Si vas a un centro de belleza, pregunta por los aceites esenciales, como el de menta o eucalipto, te ayudarán porque tienen propiedades antiinflamatorias y refrescantes.
- Infusiones y tés diuréticos: Hierbas como el diente de león o el té verde tienen propiedades diuréticas naturales que ayudan a eliminar el exceso de líquidos del cuerpo.
- Dieta rica en potasio: Frutas y verduras como los plátanos, espinacas y aguacates son ricos en potasio, mineral que ayuda a equilibrar los niveles de sodio en el cuerpo y reduce la retención de líquidos.
El nuevo truco ‘beauty’: Apuesta por los sprays fríos
Imagina que llegas a casa después de un día agotador bajo el sol, te sientas y sacas de tu bolso un frasco pequeño y refrescante. Con solo unos cuantos sprays, sientes una ola de frescura que recorre tus piernas desde los dedos hasta los muslos. Eso es exactamente lo que hace un spray frío para piernas, ya que están formulados con ingredientes activos que proporcionan una sensación inmediata de frescor.
Entre algunos de sus ingredientes estrella está el mentol, conocido por su capacidad para enfriar la piel al contacto. Además, actúa sobre los receptores de frío de la piel, ofreciendo una sensación refrescante casi al instante.
También tienen extractos de plantas, como el castaño de indias y el hamamelis, que ayudan a mejorar la circulación y reducir la hinchazón. Por último los sprays contienen aceites esenciales, como lavanda, romero y eucalipto no solo aportan frescura, sino que también tienen propiedades antiinflamatorias y relajantes.
Si optas por los sprays fríos, la solución beauty definitiva que nos ha conquistado por su solución rápida y eficaz es de Germaine de Capuccini: Icy Legs. Con su efecto frío alivia y disminuye la sensación de fatiga y pesadez en las piernas, aportando calma, descanso y confort inmediato. Además, revitaliza y tonifica las piernas, consiguiendo esa sensación de ligereza que necesitamos después de pasar largas horas de pie o en una misma postura. Su textura refrescante es 100% agradable y se absorbe rápidamente, dejando la piel limpia tras la aplicación.