En un mundo saturado de consejos sobre cómo alcanzar la felicidad y la productividad máxima, del constante bombardeo de libros y artículos que prometen cambiar vidas con simples fórmulas de positividad, cada vez hay más lectores deseosos de leer respuestas reales ante este tipo de preguntas, muchas veces tan complejas.
Fabián Villena, orador internacional y formador en Actitud Positiva Inteligente y Productividad, nos descubre en su libro Despliega tu actitud positiva inteligente cómo transformar nuestra vida y trabajo a través de siete claves esenciales para alcanzar una mayor satisfacción. Según el experto en actitud positiva, tus logros profesionales, tu eficiencia, tu impulso, tu seguridad, tus conexiones y tu bienestar están determinados por una elección fundamental: tu actitud.
Aunque dirigir nuestra mente hacia la felicidad no siempre es sencillo, el autor nos asegura que es algo que podemos aprender y dominar a través de unas claves muy concretas en las cuales, como con todo en la vida, hay que perseverar. Y nos pregunta: “¿Vives sintonizado en AM (AmargaMente) o en FM (FelizMente)?”. “El mayor obstáculo para las personas que intentan adoptar una actitud positiva inteligente en su vida y trabajo es la inercia y el entorno. Cuando destaco la inercia me refiero a ir corriendo, deprisa, sin parar a pensar qué es realmente importante en tu vida. Pensamos mucho pero reflexionamos poco. Es recomendable de vez en cuando parar a reflexionar, sobre qué es lo que da sentido a tu trabajo y a tu vida. Por otro lado, hay una frase que dice: Encajar muy bien en una sociedad enferma es un mal síntoma. Y parece que lo normal en nuestra sociedad es estar en AM (AmargaMente), es habitual encontrarte con personas que no paran de quejarse, de criticar. Por ello es tan importante cuidar de qué personas te rodeas. Me gusta sintetizarlo en la siguiente frase: Cambia a esas personas que te hacen perder el tiempo, por aquellas que te hacen perder la noción del tiempo. Rodearte de personas que están en FM te ayudará mucho a entrar en esa sintonía, ya que te contagian su energía y te sirven de guía para pensar de un modo constructivo.
Según el experto, adoptar esta actitud te capacitará para manejar de manera efectiva las preocupaciones laborales como disfrutar del presente, visualizar un futuro prometedor y reconciliarte con tu pasado. También te ayudará a superar tus miedos y fortalecer tu confianza personal, a mejorar tus relaciones tanto en lo profesional como en lo personal. Por último, y lo más importante, te ayudará a entrenar tu mente para cultivar pensamientos positivos.
Cómo pasar de vivir en AM (amargamente) a FM (felizmente)
En su libro menciona que nuestras vidas pueden estar sintonizadas en AM (amargamente) o en FM (felizmente). ¿Cómo podemos cambiar nuestra sintonía de AM a FM, a grandes rasgos? “Para mí la clave fundamental es la gestión de la atención. El nivel de bienestar e incluso la productividad dependerá en gran medida hacia dónde dirijas la atención”, explica el experto. Para pasar de AM a FM podemos tener en cuenta tres aspectos en la gestión de la atención:
- Zona de influencia: céntrate en aquello que depende de ti, no malgastes tu tiempo y tu energía en aquello que está fuera de tu zona de influencia, de lo contrario te generará frustración. Recuerda: “No dejes que lo que no puedes hacer influya en lo que sí puedes hacer”.
- Presente: El único momento en el que puedes ser feliz es ahora. Pon tus cinco sentidos en aquello que hagas. No te perturbes con cosas que ya pasaron, saca aprendizajes y sigue adelante. No te preocupes de modo excesivo por aquello que podría pasar, simplemente piensa cómo quieres que sea tu vida y trabaja para ello. “La felicidad está en el camino, no en la meta”.
- Positivo: Tú elijes si te quieres quedar con lo bueno o lo malo de cada persona y circunstancia. Si quisiera buscarle la pega a mi pareja, a mi trabajo o a mi ciudad seguro que encontraría cosas. Pero con la misma pareja, trabajo y ciudad, si pongo mi atención en buscar lo todo lo bueno que tienen también encontraré multitud de aspectos por los que sentir agradecimiento. Es una decisión, tú elijes, y según elijas así te vas a sentir y comportar.
La clave para mantener relaciones profesionales y personales de calidad
Su receta es sencilla: tiempo, atención y cariño. “Hay una teoría que dice que todas las personas, desde que nacemos, queremos dos cosas: atención y cariño. Dicho de otra forma, nos gustar sentirnos que somos personas valiosas y que para el otro somos importante. Simplemente piensa por un momento, cómo te sientes cuando te encuentras con alguien que te escucha con atención sin interrumpirte, no te juzga y se interesa sinceramente en ti. Si además te reconoce lo bueno que haces o que hay en ti, ya es de nivel top”.
El experto sostiene que una de las cosas que más se echa en falta en las empresas es la falta de reconocimiento. “Además, una vez escuché que las relaciones son como las plantas: planta que no riegas, planta que muere. Por eso, una de las mejores formas de hacerle ver a alguien que es importante para ti es dedicándole tiempo, y sobre todo, tiempo de calidad (sin estar mirando el móvil cuando hablas con ella). Por último, ayuda mucho a tener un presente y un futuro con proyectos por compartir, ya que como dice una frase: Un presente, en el que solo se habla del pasado, no tiene ningún futuro”.
Pautas para disfrutar más de tu vida laboral y personal
En este manual, Villena revela un método probado durante más de una década, proporcionando un enfoque paso a paso para aplicar herramientas efectivas que ayudan a gestionar los temores y potenciar la autoconfianza. Este enfoque se vuelve crucial en los momentos desafiantes, cuando desplegar una actitud positiva inteligente es más necesario que nunca.
“Para mí, lo primero es aprender a filtrar los miedos lógicos y adaptativos de los que son absurdos y limitantes. Para ello hay dos preguntas que te permiten saber diferenciarlos: ¿Qué es lo peor que te podría pasar? ¿Hasta qué punto es probable?”. Y pone como ejemplo un miedo que suelen padecer el 75 % de los españoles, el miedo a hablar en público: “Si lo piensas, lo peor que te puede pasar por hablar en público es poco importante (quedarte en blanco, que alguien se aburra o se vaya, sudar en exceso, etc.). Pero como siempre te encuentras con alguien muy neurótico, hay quien te dice que te puedes morir por hablar en público. Es cuando, a través de la segunda pregunta, puedes razonar que esa opción es muy, muy poco probable”.
Una vez aflojado el miedo, en su libro aporta herramientas para hablarnos de un modo constructivo y adecuado para lograr nuestros objetivos, por ejemplo, en el caso de hablar en público nos podemos decir mensajes como: “No soy una impresora, no vengo a impresionar a nadie. Si me dijeran que un familiar mío tiene una enfermedad muy grave, ¿qué importancia tendría este discurso?, esa es la que tiene. Con que a una persona le sea útil algo de lo que diga para mí tendría sentido mi discurso de hoy. Simplemente voy a compartir desde el cariño lo que creo que les puede ser útil”.
Para potenciar nuestra autoconfianza nos puede resultar muy útil repasar logros que ya hemos conseguido a lo largo de la vida, tanto personales como profesionales. Después nos resulta muy útil reflexionar y anotar las cualidades que fueron necesarias para conseguir esos logros. De esta forma, asegura que no dependemos de que otras personas nos digan lo valiosos que somos, sino que de un modo objetivo, al analizar los logros y las cualidades que fueron necesarias para conseguir todo esto, nos damos cuenta de nuestra grandeza y de las fortalezas que residen en nuestra persona. Hay una frase que nos ayuda a sintetizar todos estos aprendizajes, para pasar del miedo a la autoconfianza, es recordarnos que: En peores plazas hemos toreado ya. Al decirnos esto, de modo lógico, nos damos cuenta que si ya hemos saltado vallas más altas, cómo no voy a poder saltar ahora esta que es más pequeña. Por último, también es importante recordar que desde la psicología positiva se ha demostrado que es mucho más rentable desarrollar nuestras fortalezas que solo tratar de mejorar nuestras debilidades. “Por ello, es fundamental hacer ejercicios como el anteriormente señalado de analizar logros y cualidades, para detectar nuestras fortalezas y apoyarnos en ellas para lograr mejores resultados con menos esfuerzo”, concluye.
- Responsabilízate: Dice Villena que la genética y las circunstancias influyen en tu felicidad, pero no la determinan. El autor asegura que los resultados cambian cuando percibes y te relacionas con la realidad de un modo diferente: “Todos tenemos problemas, pero lo que diferencia a las personas con actitud positiva inteligente son dos cosas: cómo les afectan y qué tipo de respuestas dan”. Y garantiza que son nuestras creencias las que especialmente nos pueden limitar. En definitiva, la clave no es lo que te dicen o hacen, sino la interpretación que tú haces.
- Acepta la realidad: El experto recuerda en su libro una frase que Reinhold Niebuhr que seguramente hayas leído varias veces y recuerdes. “Señor, concédeme serenidad para aceptar todo aquello que no puedo cambiar, fortaleza para cambiar lo que soy capaz de cambiar y sabiduría para entender la diferencia”. Dicho en otras palabras, el experto matiza que la aceptación activa supone “comprender y aceptar las reglas del juego, pero sin caer en la resignación, ya que actúas allí donde puedes y te corresponde”. Y nos recuerda que a menudo tratamos de cambiar la realidad externa, “cuando la clave está en nuestra realidad interna, nuestras interpretaciones”.
- Aprende a gestionar el error: Villena recuerda que más importante que la decisión que tomes es la actitud con la que gestiones los resultados, sean los que sean. Y añade que lo que hace que puedas aprender, tanto del error como del acierto, es la reflexión; porque para aprender del pasado necesitas hacerte buenas preguntas.
- Gestiona el desapego: Dice el autor que el desapego implica liberarte del miedo y vivir con ilusión. En su opinión, el desapego es amor sin miedo y nos invita a alejarnos de la “necesitis”: “No confundas necesidad con querer”. Para ello, recomienda que nos comprometamos con la acción y nos desvinculemos del resultado.
- Céntrate en el presente: El experto incide en la idea de que no podemos cambiar el pasado, pero sí podemos cambiar la película que nos contamos de ese pasado. “Eso, te aseguro que lo cambia todo”, concluye. “La otra forma de perturbarnos el presente es viajando al futuro para ponernos en el peor de los casos, sufriendo por adelantando a lo tonto, de modo gratuito”. En su opinión, las claves para ser feliz es ser fiel a tus valores, descubrir que la felicidad está en el camino y no en la meta, y que multitarea es sinónimo de hacer el inútil.
- Gestiona tus emociones, la clave para ser verdaderamente libre: Según Villena, en tu corazón florece lo que siembras en tu mente. Por eso, es importante gestionar las emociones a través de tus pensamientos y conductas. Para ello, puedes probar a hacer una lista de afirmaciones con creencias que deseas interiorizar y relativizar dando la importancia adecuada a cada cuestión. También recomienda actuar como si ya tuvieras el estado emocional que deseas generar en ti y opta por la relajación (practicando la respiración 4-7-8, 4 segundos, inhalar; 7, aguantar, y 8, espirar).
- Mantén una actitud positiva: El experto asegura que la clave más importante para estar bien es el agradecimiento. Las personas más felices no son las que más dinero tienen, son las más agradecidas. Hay dos ejercicios muy sencillos pero muy potentes para sintonizar en FM (FelizMente): 1. Nada más despertar, piensa en 4 motivos de por qué eres una persona
muy afortunada. Se pueden repetir los motivos siempre y cuando sigas sintiendo agradecimiento por ello. Por ejemplo, cada día doy las gracias por tener a mis padres aún con vida. 2. Cada noche, piensa al menos 3 cosas buenas que te han pasado a lo largo del día. Normalmente tenemos un sesgo negativo, y se nos suele quedar más grabado en la memoria y el corazón lo negativo. Por eso es tan importante hacer un ejercicio así, para educar y entrenar a nuestra mente en detectar lo bueno que nos sucede y disfrutarlo en mayor medida.
Finaliza recordándonos una frase de Theodore Roosvelt que sintetiza muy bien su filosofía: “Haz lo que puedas, con lo que tengas, donde estés”. “La vida no es ni justa ni injusta, la vida es. Lo más inteligente es comprender cómo funciona, conocer las cartas que nos han tocado, y aprender a jugarlas del modo más inteligente para ser felices y productivos, en este orden”.