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¿Calor? Crea tu propio refugio climático en casa

Un año más el verano causa estragos. Las altas temperaturas propias de la estación sumadas a las olas de calor ponen a prueba la paciencia y el descanso, más aún en las grandes ciudades. Precisamente la ciudad de Madrid cuenta con un refugio vegetal puesto en marcha por el Círculo de Bellas Artes.

cómo crear un refugio climático vegetal
Un pequeño oasis vegetal en casa

El Refugio Climático es un espacio vegetal abierto al público durante el mes de agosto que busca alivio del calor exterior. En la Sala de Baile conviven más de 300 tipos de plantas diferentes prestadas por el Vivero de Estufas del Retiro, un auténtico festín para los amantes de las plantas y en el que refugiarse para leer, trabajar, jugar al ajedrez o incluso dejar tus propias plantas en la guardería.  

Antonio Vallejo es uno de los jardineros encargados de cuidar este pequeño oasis vegetal e irremediablemente surge la pregunta: ¿es posible crear nuestro propio confort térmico con plantas? ¿Pueden ayudar a sobrellevar mejor el calor? “Sí por supuesto, pero es importante recalcar que las plantas de interior no enfrían” explica Antonio y matiza, “sus funciones son desprender vapor de agua y purificar el aire”. 

Mejorar la calidad del aire y mantener un nivel de humedad agradable son sus principales aportaciones a la hora de crear el llamado confort térmico. Y por supuesto, la imbatible belleza y tranquilidad que supone contar con un rincón botánico en casa. 

 

Confort térmico: las plantas que pueden ayudar

Mantienen la humedad 

  • El poto: no hay floristería o vivero que se precie que no cuenta con alguna planta de la familia aráceas. Como explica Gustavo Cota, dueño de La Habitación Jungla, “son plantas que no piden mucho. Poca agua y luz. En la tienda tengo una que mide casi dos metros y es preciosa”. Además de generar vapor, la ventaja de esta planta es que se puede colocar directamente en agua porque echa raíces.

 

  • La cinta o malamadre: requiere un riego moderado y sus preciosas hojas en forma de cintas embellecen cualquier rincón. Tal y como explica Antonio Vallejo, su poder también reside en que “absorben un 95% de monóxido de carbono y son muy fáciles de cuidar

 

  • El helecho: es una de las plantas que más vapor de agua desprende junto al espatifilo, lo que las convierte en especies muy recomendables para espacios o ambientes secos. La clave es conservar el sustrato siempre húmedo.

Purifican el aire

  • Sansevieria o Espada de San Jorge: esta planta tiene la particularidad de expulsar mucho oxígeno por la noche. Lejos de ser un mito, juntar demasiadas plantas en una sola habitación puede ser perjudicial para la salud por la expulsión del dióxido de carbono, por lo que contrarrestar con esta especie es un acierto.

 

  • Diefembaquia: es muy fácil de encontrar en cualquier vivero. La particularidad de esta planta tropical es que humedece mucho el ambiente y “suele ayudar si se sufre sequedad de garganta o incluso, para personas que roncan” explica Antonio. Para su cuidado, además del riego cada 3 días, es recomendable dejar un recipiente de agua cerca que vaya evaporándose.

Resistentes al calor 

    • Monsteras, ficus y filodendros: son las reinas de Instagram. Sus enormes hojas verdes y su gran resistencia al calor las han convertido en verdaderas protagonistas de la decoración de interiores. “Son plantas que le gustan a todo el mundo” confirma Gustavo Cota. No solo las expone en su tienda sino que en casa cuida de más de 150 plantas. “Exigen poca agua y poca luz por lo que aguantan muy bien el verano” Consejos claves: siempre luz solar indirecta y limpiar sus hojas de polvo.  

¿Cómo cuidar tu refugio climático? Algunos consejos

  • Ventiladores: lejos de lo que se pueda pensar, tanto los ventiladores como el aire acondicionado pueden convivir con las plantas, más aún si éstas tienden a generar más humedad de la habitual en un espacio limitado como puede ser un salón o una habitación. 
  • Pulverizadores: resultan más que necesarios en épocas de calor, sobre todo si se trata de monsteras. Una vez al día – o dos, dependiendo de la entrega – es necesario pulverizar a su alrededor. 
  • Riesgo: además de los humidificadores (los hay de todo tipo de tamaños) una opción muy efectiva es dejar arcilla expandida en el fondo de las macetas. Las bolitas arcillosas absorben el agua y poco a poco la sueltan con el calor. Lo mismo ocurre con las tinajas de terracota o las macetas de autoriego. 
  • Humedad: aprovechar el vapor del baño después de una ducha no es mala idea.