‘Balenciaga: la forja del maestro’ es uno de los libros más buscados del mercado. En él, la historiadora Miren Arzalluz relata los primeros y más desconocidos años de la vida del modista vasco Cristóbal Balenciaga. Ese libro es hoy en día una joya de culto que está descatalogada y una de los éxitos de los que puede presumir la que a partir del 1 de abril será la nueva directora del Museo Guggenheim Bilbao.
Hija del político vasco Xavier Arzalluz, la carrera de esta profesional de los museos comenzó en Londres, cuando cursaba un Máster en Política Comparada en la London School of Economics. Allí empezó a interesarse por un mundo, el de la moda, que le ha dado más de una alegría. Formada en Historia en la Universidad de Deusto, cuenta también con un Máster en Historia del Arte por la londinense Courtauld Institute of Art. Según la nota de prensa que ha publicado el museo, para su selección se ha valorado su experiencia y reconocimiento internacional, acreditado por condecoraciones como la de este año, cuando ha sido nombrada Chevalier de l’Ordre des Artes et des Lettres, del Ministerio de Cultura de Francia. También forma parte del Jurado de los Premios Nacionales de Diseño de Estados Unidos y del comité asesor artístico del Museo de Bellas Artes de Bilbao.
Su nombre se ha impuesto a un total de 79 candidaturas nacionales e internacionales que el Guggenheim tuvo sobre la mesa. Ha destacado, al parecer, por su sensibilidad ante los diversos contextos culturales y la capacidad de diálogo y colaboración que ha demostrado al frente del Museo de la Moda de París – Palais Galliera, donde ha estado seis años al frente. En ese tiempo, Arzalluz consiguió liderar la reapertura de esta institución, uno de los centros museísticos de moda más importantes del mundo, así como realizar exposiciones tan destacadas como la que, por primera vez, homenajeó a la diseñadora Coco Chanel. Si bien es cierto que esta muestra tuvo que interrumpirse por la pandemia de la COVID-19, se convirtió en una de las referencias expositivas en ese momento.
Arzalluz, además, estuvo trabajando durante cinco años en Getaria, donde desarrolló su labor como comisaria jefe de la Fundación y Museo Balenciaga, un diseñador al que ha ligado en parte su carrera y con quien siempre se identificará la figura de Miren. Si bien no se incorporará hasta el 1 de abril de manera plena, a partir del 1 de marzo comenzará a empaparse tanto en Bilbao como en Nueva York del espíritu de esta institución, una de las más destacadas del mundo del arte contemporáneo y donde la moda también tuvo su peso, como sucedió en el año 2001 cuando se pudo ver una retrospectiva del diseñador Giorgio Armani, una de las exposiciones más exitosas en la historia de este centro.
Tomará el relevo de Juan Ignacio Vidarte, único director en la historia del Guggenheim Bilbao, y se convertirá, además, en la primera mujer que se ponga a dirigir este centro. Su nombre, de esta manera, se sumará al de otras mujeres que actualmente lideran grandes instituciones museísticas, como son Elvira Dyangani, del MACBA, o Sonia Martínez, del IVAM.
