Hortensia Herrero, esposa de Juan Roig y presidenta de la Fundación Hortensia Herrero, se ha convertido en una de las figuras más importantes en la respuesta social a las recientes inundaciones que han golpeado la Comunidad Valenciana. La gota fría ha dejado daños significativos, y tanto Herrero como Roig no han dudado en volcar su energía y recursos en la recuperación de las zonas más afectadas. A través de su fundación, Herrero ha desplegado una red de apoyo que abarca desde el respaldo financiero hasta la colaboración en tareas de limpieza y reconstrucción en coordinación con otras organizaciones locales.
En un gesto de compromiso con su tierra, la Fundación Hortensia Herrero ha colaborado en la entrega de suministros básicos y en la creación de programas de ayuda para las familias afectadas. La solidaridad del matrimonio ha sido fundamental en esta crisis: además de aportar recursos propios, han impulsado una “marea solidaria” que involucra a miles de empleados de Mercadona y voluntarios de distintas fundaciones y ONG.
Esta red solidaria, organizada desde la Fundación Trinidad Alfonso (creada por Roig), ha coordinado la entrega de alimentos, ropa y otros artículos esenciales, así como la provisión de ayuda psicológica y material a las familias afectadas.
Herrero lleva años posicionándose como una mecenas del arte en Valencia. Su museo, la Fundación Hortensia Herrero, se ha convertido en un símbolo de renovación cultural en la ciudad, al albergar exhibiciones de artistas contemporáneos de renombre internacional en un espacio que también ha revitalizado áreas urbanas y arquitectónicas del centro valenciano. Su contribución a la cultura ha sido notable, pero esta crisis ha demostrado que su compromiso con la ciudad va mucho más allá de lo artístico.
A través de su fundación, la empresaria trabaja en la planificación de acciones de largo plazo para restaurar las infraestructuras dañadas. “Valencia es nuestra casa, y queremos estar aquí para su gente, en los buenos momentos y en los difíciles”, expresó Herrero en un comunicado reciente, reafirmando su compromiso con la ciudad.
Gracias a su impulso, junto con el de Juan Roig, las fundaciones Hortensia Herrero y Trinidad Alfonso se han posicionado en el epicentro de esta marea solidaria, poniendo de manifiesto que el arte y la filantropía pueden coexistir con un compromiso social tangible. Valencia ha encontrado en ellos no solo mecenas de la cultura, sino auténticos pilares de ayuda humanitaria en tiempos de crisis, consolidando su imagen como referentes de solidaridad en la comunidad.