Goldie Hawn y Kurt Russell son la excepción de Hollywood. Juntos desde 1983, la pareja ha resistido las presiones del matrimonio y los constantes focos mediáticos, manteniendo una relación sólida que dura ya más de 40 años. Según la actriz, el éxito de su relación radica en dos factores clave: una vida sexual activa y sentido del humor. En una reciente entrevista, Hawn ha hablado sin tapujos sobre lo que considera uno de los pilares de su relación con su pareja, la intimidad física. La actriz, ahora de 77 años, señaló que mantener una buena conexión sexual ha sido fundamental para la estabilidad de su relación.
Intimidad y sentido del humor, las claves de su relación
Aunque a menudo se evita hablar de este tema, para ella es algo natural y crucial, explicando que ha sido un factor que les ha permitido seguir conectados de una manera más profunda. En sus propias palabras, “una vida sexual sana no es solo un tema de pasión, sino también una forma de comunicación que ha reforzado el vínculo con Russell”, de 72 años. No obstante, la actriz fue clara en que el sexo no es el único secreto. Otro componente clave, y tal vez igual de importante, ha sido el sentido del humor.
A lo largo de los años, ambos han encontrado en la risa una herramienta para lidiar con los desafíos de la vida cotidiana. “Nos reímos mucho juntos”, comentó Hawn, que confiesa que saber reírse de las situaciones difíciles y no tomarse todo demasiado en serio ha sido esencial para mantener la relación equilibrada. Para ellos, el humor ha sido un recurso útil para no dejarse llevar por las tensiones y seguir adelante en los momentos más complicados.
Goldie Hawn/Instagram
El vínculo entre ambos comenzó en el set de la película Swing Shift en 1983, pero ambos ya se conocían desde mucho antes. A diferencia de muchas parejas de la industria del cine, nunca han sentido la necesidad de casarse. Según la protagonista de clásicos como El club de las primeras esposas o La muerte os sienta tan bien esta decisión ha sido clave para su éxito como pareja. De hecho, ha mencionado en diversas ocasiones que no cree que el matrimonio sea un requisito para el compromiso y la estabilidad. Para ambos, la libertad de no estar atados a una formalidad les ha permitido ser ellos mismos sin presiones externas.
A lo largo de las décadas, Hawn y Russell han formado una familia, criando juntos a sus hijos y nietos, y logrando compaginar sus vidas personales con sus exitosas carreras. A pesar de la fama y las exigencias de Hollywood, han conseguido construir una relación basada en la confianza, el respeto y el apoyo mutuo. Por último, también han enfatizado la importancia de dar espacio a cada uno para crecer individualmente, permitiendo que ambos mantengan sus propias identidades dentro de la relación.