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Dormir en cabaña: el plan que nunca falla

¿Quién no ha soñado con tener una casita en el árbol? Dormir en una cabaña es un sueño que se puede cumplir, y además, conectando con el entorno.

Para quien se haya visto seducido por el mundo de la cabaña, el nombre de Eva Morell no le resulta extraño. A modo casi de diario, la escritora comparte sus impresiones y aventuras por cabañas de todo el mundo. Y no es la única. Las tiny houses (casa miniatura) se popularizaron no hace tanto gracias a programas de televisión. 

Una escapada en pareja, con niños o solo: las cabañas son el refugio perfecto para conectar de otra manera con la naturaleza.

Málaga

Para quien no conozca el concepto “glamping”, este no es más que el camping de lujo. Precisamente en uno de ellos se pueden pasar jornadas en plena naturaleza gracias a esta cabañita donde solo se puede dormir. En el exterior, los baños y una zona de cocina completan la experiencia. 

Imagen AirBnB

Cantabria 

En Hoz de Anero, Cantabria, esta cabaña cumple con todos los requisitos de la “cabaña soñada”. De estilo alpino, sus 16metros cuadrados están optimizados al máximo con un rinconcito para cocinar, un sofá desde el que ver las espectaculares vistas al bosque y una cama en el altillo. ¿Lo mejor? Además está a pocos minutos de la playa.

Imagen: Facebook Kabanya

Cataluña 

Un auténtico baño de naturaleza. Esta preciosa cabaña está situada en la finca del Mas l´Espunya en el Valle catalán de Bianya. La habitación es una suite de 30 metros cuadrados  pensada para dos personas que incluye un jacuzzi en la terraza. Y no, no tiene wifi.

Imagen: Cabanyes entre Valls.

Canarias 

Escuchar pájaros y ver el mar desde tu balcón. ¿Quién se resiste a visitar la casita colgada “Can Lia”?  El aeropuerto más cercano es el de Tenerife y a pocos kilómetros de la cabaña se encuentran los jardines botánicos. En su interior, la cabaña tiene una habitación, baño y cocina equipada para disfrutar de la naturaleza sin tener que salir. 

Imagen: Booking

Galicia

Entre las Rías Baixas y la Costa da Morte, se ubica Outes, un coqueto pueblecito en el que descansar en lo alto de un árbol. ¿El extra? Una zona de spa, con agua climatizada donde desconectar definitivamente del mundo rodeado de naturaleza. 

Imagen: Tripadvisor

Madrid 

En la Sierra de Guadarrama se esconde un camping con cabañas en los árboles. A unos 7 metros de altura, estas casitas ofrecen vistas al Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Están diseñadas para hasta 5 personas – una escapada con peques inolvidable – y disponen de microondas y mini nevera. Imagina observar las estrellas desde la terraza. 

Imagen: Camping Monte Holiday

La Rioja 

En cualquier época del año, visitar La Rioja es un placer pero ni que decir tiene que el otoño es especialmente bonito. Una escapada a esta cabaña te permite disfrutar de cama y baño con vistas al espectacular bosque en el municipio de Anguciana. 

Imagen: Booking






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