Es posible que te hayas dado cuenta de que de repente, numerosas celebridades lucen bikinis minúsculos y moda de baño adornada con diferentes estampados procedentes del universo Playboy, pero en realidad, esos diseños están mucho más
cerca de España que de la factoría de Hugh Hefner, pues son obra de Jessica Goicoechea. La modelo e influencer fundó Goi en 2019, y a finales de 2021, ‘Business Insider’ ya señalaba que las ventas de la firma catalana habían pasado de 600 a 2.700 euros al día.
Poco antes de terminar el año, la firma ya presumía de vender a más de 100 países. Fue en ‘La Resistencia’ donde Goicoechea nos hizo saber lo mucho que el proyecto había prosperado, pues cuando el presentador le preguntó, como es habitual en cada programa, cuánto dinero tenía en la cuenta bancaria, las cifras pusieron a muchos los pelos de punta.
“Si dices que cuenta la empresa, la cosa suma… Pues tengo entre 3,5 millones y 5 millones de euros”, aseguró.
El motivo por el que creó Goi, dice Goicoechea, es que le era complicado encontrar en España prendas de estética americana que encajaran con su estilo, y por eso puso en marcha una marca cuya estética es, ante todo, arriesgado. Mientras que muchas otras creadoras de contenido se aseguran de crear colecciones con las que cautivar al máximo de personas posibles, ella ha preferido centrarse en un público nicho que se atreve a llevar modelos realmente arriesgados no aptos para pudorosas y que si bien es cierto es harto improbable que alguien lleve para hacer unos largos, a causa de sus minúsculas dimensiones, al parecer haber sido creados para ser capturados por las redes sociales, son los preferidos de muchas para presumir en sus perfiles digitales de silueta.
La última colección de Goicoechea se trata de una colaboración con Playboy, una noticia que dio a conocer en el programa de Broncano, quedando así claro que su equipo ha calendarizado a la perfección cada acción y se ha asegurado de que las redes sociales sean incapaces de escapar del conejito de la famosa revista mediante meticulosas acciones de marketing. Ya hemos visto lucir algunas prendas de esta colección a Georgina Rodriguez, que en sus vacaciones se ha fotografiado con un mini vestido cuyo estampado all-over lo componen diferentes portadas de la revista Playboy.
Sus tirantes ajustables permiten modular el largo del diseño, aunque tanto Jessica Goicoechea como Rodriguez prefieren llevarlo en su versión XS. Al costar 99 euros, es una alternativa relativamente asequible para las que quieren emular el estilo de Georgina, cuyas elecciones en materia de moda de baño hacen en muchos casos guiños a las celebridades, pues es también fan de Skims, la marca de Kim Kardashian, de la que tiene varias prendas.
El motivo por el que es habitual que las famosas lleven looks creados por sus compañeras es que cuentan con sus propios sistemas de gifting, algo que de hecho, figuras como Kim Kardashian siempre visibilizan en sus redes, donde muestran la manera en la que preparan los envíos tanto para celebridades, como para periodistas especializados, que mediante estos envíos conocen de primera mano sus productos. Por supuesto, la agenda de contactos de las celebs es realmente poderosa, y por eso saben enviar sus diseños a personajes que realmente son quienes dictan tendencia y quienes al llevar sus creaciones, pueden aumentar sus ventas o al menos, su visibilidad.
Por ello, es indudable que el equipo de Goicoechea y ella han sabido bien seleccionar a las celebridades adecuadas para enviarles sus prendas. Aunque las famosas rara vez etiquetan los diseños, el team está siempre pendiente para subir a sus redes las imágenes de quienes los llevan, y por eso estas operaciones de gifting parecen a primera vista ser verdaderamente orgánicas, pues al no ser posts promocionados y al carecer de etiquetas, son interpretados con mayor naturalidad por los internautas.
Sin embargo, al comenzar el año, Aitana Ocaña dejó sin habla a los internautas con un sensual posado en el que llevaba un bañador con un vertiginoso escote de la firma, que en esa ocasión, sí etiquetó. ¿Sería esta una acción pagada? Lo desconocemos, pero al comprobar la cantidad de medios que escribieron sobre el posado en cuestión, sin duda la acción salió rentable a La marca. No es la única superventas musical que luce las creaciones de Goicoechea, pues la marca ha creado un diseño ‘ad hoc’ para Nathy Peluso, un mini bikini acorde a la característica y llamativa estética de Goi que reza ‘Grasa’, el nombre del nuevo álbum de la cantante. El modelo de ropa de baño no sólo encaja perfectamente con los sensuales looks que la intérprete suele llevar,
sino que demuestra que no hace falta tener una talla 36 para llevar las creaciones de Jessica Goicoechea.
Pero, ¿realmente triunfan sus diseños o la omnipresencia de la marca se debe a esos envíos a celebridades pensados como inteligentes acciones de marketing? “Las colaboraciones que hace con otras famosas no son de pago, por lo tanto, ellas no le hacen una mención especial y este contenido se pierde entre muchos otros que esta gente sube a diario. Por ejemplo, nos encontramos Bad Gyal con un bikini suyo, pero no lo etiqueta.
Mi pregunta es, ¿será que este tipo de colaboraciones funcionan a nivel de venta?”, se pregunta en TikTok Marina Yers, que enseña a las internautas a crear sus marcas personales y a lograr que sus negocios crezcan. “La marca se centra en promover su ropa entre chicas que tengan un tipo de cuerpo aceptado por la sociedad, un cuerpo que el 95 % de las mujeres no tienen y por lo tanto, su nicho se reduce al 5 % que tiene ese cuerpo y que aparte, se siente cómoda llevando llevando esta ropa”, asegura.
En realidad, en el perfil de la firma vemos a mujeres como la DJ Valeria Vendetta, cuyas generosas curvas no responden a las del mencionado 5 %, pero lo cierto es que lo habitual es que las mujeres que terminan por formar parte del perfil oficial de la marca no se caractericen precisamente por esa ansiada diversidad. Yers comenta además que de querer centrarse en ese mercado, Goicoechea lo está haciendo bien, pero si quiere ver sus ventas crecer a nivel exponencial, opina, debería sacar en sus redes a mujeres que tengan una mayor diversidad de talla para que así, un mayor número de personas se puedan sentir identificadas. “Aprovechando que la marca es de España, debería aprovechar y mostrar el proceso de 0, desde cómo se hacen sus bikinis, los trabajadores que hay detrás de la confección, cómo eligen las telas…”, opina.
Sin embargo, aunque por descontado en los ingresos que comentó a Broncano entran sus acuerdos publicitarios, al parecer su marca triunfa sobremanera, por lo que quizás, lejos de ser un grupo de mujeres reducidas las que aprecian sus creaciones, estamos en un momento en el que por fin, quienes no encajan con los restrictivos y asfixiantes cánones estéticos se atreven también a llevar diseños tan atrevidos como los de la marca. Y tú, ¿comprarías prendas de la firma Goi o crees que sólo pueden sentar bien a una silueta determinada?