Realeza

Cae la popularidad de la monarquía británica tras dos años sin Isabel II

Carlos III homenajea a su madre en Balmoral en el segundo aniversario de su muerte y con tantos cambios tanto en Reino Unido como en la casa real británica

Reina Isabel II
Retrato de la reina Isabel II por Andy Warhol The Andy Warhol Foundation for the Visual Arts, Inc./ Licensed by DACS, London

Sólo han pasado dos años desde la muerte de Isabel II, y tanto la casa real británica como el Gobierno han sufrido numerosos cambios desde entonces.

La icónica monarca falleció el 8 de septiembre de 2022 en el palacio de Balmoral, en Escocia, a los 96 años, cerrando una etapa para todo Reino Unido, pues es la reina que más tiempo ha estado en el trono. Su reinado duró 70 años y 214 días y fue la soberana durante alguno de los episodios más duros de la historia británica, de ahí su alta popularidad.

La reina Isabel II

Retrato de la reina Isabel II

Los británicos, menos monárquicos

Es más, desde la muerte de Isabel II se ha producido un notable descenso del sentimiento monárquico en Reino Unido. Aunque la monarquía sigue gozando de un apoyo significativo, ha disminuido en comparación con los niveles observados durante su reinado. Por ejemplo, el apoyo al mantenimiento de la monarquía aumentó brevemente hasta el 67% tras la muerte de Isabel II, pero desde entonces ha vuelto a caer hasta alrededor del 62%. Esta cifra es notablemente inferior a la de hace una década, cuando el apoyo alcanzaba el 75%.

Según la prensa británica, el descenso del apoyo es especialmente pronunciado entre las generaciones más jóvenes. Sólo el 36% de los británicos más jóvenes está a favor de mantener la monarquía, frente al 79% de los mayores de 65 años. Esta división generacional supone un reto para el rey Carlos III en su intento de mantener el apoyo popular a la institución.

Carlos III durante su coronación.

Carlos III durante su coronación

Es más, según algunos expertos, sus polémicas pasadas -incluido el matrimonio (y divorcio) con la princesa Diana y diversas declaraciones y gestos públicos- han contribuido a que el monarca tenga una imagen más compleja, e incluso, controvertida.

La opinión pública sobre el rey Carlos III es diversa. Aunque ha ganado cierto sentimiento positivo, sigue siendo menos popular que la reina Isabel II y otros miembros de la familia real. Según una encuesta de YouGov, Carlos es el séptimo miembro de la realeza más popular, por detrás de figuras como el príncipe Guillermo y Kate Middleton.

La Princesa Catalina de Gales de Gran Bretaña sonríe mientras viaja con el Príncipe Luis desde el Palacio de Buckingham

Además, una encuesta del Centro Nacional de Investigación Social reveló que, si bien el 55% de los británicos considera que la monarquía es importante, sólo el 29% cree que su mantenimiento es “muy importante”, la proporción más baja de la que se tiene constancia2. Esto sugiere un grado de indiferencia o incluso escepticismo hacia la monarquía bajo el reinado de Carlos III.

A la muerte de la reina Isabel II, su primogénito se convirtió automáticamente en el rey Carlos III. Eso sí, no fue hasta mayo de 2023 cuando fue coronado oficialmente en una ceremonia más inclusiva y reducida en comparación con coronaciones anteriores.

Reducción de la familia real

El rey redujo la familia real e intentó zafarse de las “ovejas negras”. Tanto su hermano Andrés como su hijo Enrique no estuvieron en la icónica fotografía en el balcón de Buckingham Palace. La línea de sucesión se ha actualizado, siendo ahora el príncipe Guillermo el primero en la línea de sucesión al trono.

El rey Carlos III fue coronado oficialmente el 6 de mayo de 2023. La ceremonia destacó por su carácter inclusivo y sus toques modernos, reflejo del deseo del rey de adaptar la monarquía a los tiempos contemporáneos. Con todo, tanto su elevada edad como alguno de sus gestos altivos han hecho que se le perciba como un monarca desconectado con la realidad del país.

Enfermedad

Cuando no llevaba ni un año en el trono, Carlos III fue diagnosticado de cáncer en enero de 2024. No se ha revelado públicamente el tipo concreto de cáncer, pero se sabe que no es de próstata como en un primer momento se especuló. Su diagnóstico se produjo poco después de someterse a una intervención por un agrandamiento de próstata, que se describió como benigno.

Carlos III durante su coronación.

Carlos III durante su coronación.

Desde entonces, el rey Carlos III ha estado en tratamiento, y los últimos informes indican que su tratamiento está progresando positivamente. A pesar de sus problemas de salud, ha seguido cumpliendo con sus obligaciones constitucionales, aunque ha renunciado a algunos compromisos públicos para centrarse en su recuperación.

El rey ha hablado abiertamente de su enfermedad para animar a los demás a buscar consejo médico si experimentan síntomas, lo que refleja su compromiso permanente con la concienciación sobre la salud pública, algo que ha sido muy valorado.

Es más, semanas más tarde del diagnóstico de Carlos III, llegaba el de Kate Middleton, la más popular de la casa real y nuera del monarca. Tras una operación abdominal en enero, los médicos descubrieron que también padecía cáncer. Otro duro varapalo para la Buckingham Palace.

Según recoge EFE, Carlos III  ha tenido 132 días de compromisos oficiales en su segundo año de reinado, frente a 161 en el primero. El monarca mantuvo en los últimos doce meses 22 audiencias con el jefe del Gobierno, 18 con el conservador Rishi Sunak y cuatro con el actual primer ministro, Keir Starmer.

Y es que en tan sólo dos años, Reino Unido ha tenido tres inquilinos diferentes en el número 10 de Downing Street. Liz Truss apenas llevaba dos días en el puesto cuando se enfrentó a la muerte de la longeva monarca.  La primera ministra “tory” sucumbió el 25 de octubre (duró menos que una lechuga fresca, tal y como pronosticaron). Después, asumió el puesto de primer ministro el conservador Rishi Sunak, hasta las elecciones de 4 de julio de este año, en las que venció por una aplastante mayoría el laborista Keir Starmer.

Homenaje

En el segundo aniversario de la muerte de la reina Isabel II, el rey Carlos III ha conmemorado la ocasión con una serie de actividades privadas y públicas. Junto a la reina Camila asistieron a un servicio conmemorativo privado en Crathie Kirk, una iglesia cercana al Castillo de Balmoral en Escocia.  Tras la misa, se reunieron con el personal de Balmoral Estate, miembros de la Casa Real, alumnos de la escuela primaria local y residentes de la cercana ciudad de Ballater.

El rey Carlos III de Gran Bretaña y la reina Camila viajan desde el Palacio de Buckingham hasta el desfile de guardias a caballo dentro de un carruaje durante el desfile Trooping the Colour

Asimismo, el monarca publicó un sentido mensaje en el que expresaba su gratitud por el apoyo mostrado a él y a la reina Camila durante los dos últimos años y reflexionaba sobre la larga vida y el abnegado servicio de su madre.

Camila y Carlos

Camila junto a Carlos III, que retoma el martes su agenda (The Royal Household)

De acuerdo con la prensa británica, es muy apropiado que el rey, en pleno aniversario, pase estos días en Escocia, la región que tanto amaba su madre y el lugar en el falleció. Ingrid Seward, autora de Mi madre y yo, sobre la relación entre el rey Carlos y la difunta reina Isabel II, explicó a la revista “Vanity Fair” que “sólo han pasado dos años desde su muerte, pero han ocurrido muchas cosas. La transición de la reina Isabel al rey Carlos ha sido perfecta. No ha sido un salto demasiado grande y aunque creo que a mucha gente le preocupaba que Carlos fuera demasiado mayor para el cargo, su madurez ha demostrado ser exactamente lo que necesitábamos en un momento de turbulencias”.

Nuevo monumento

Por su parte, Keir Starmer indicó el sábado que Isabel II “nunca será olvidada” y reveló que en el parque de Saint James, en Londres, habrá un monumento conmemorativo de la reina. Será en 2026, en el centenario de su nacimiento, cuando se desvele y servirá a todos los británicos como “lugar para honrar a la difunta reina y conectarse con la historia compartida” del país. Starmer también destacó el “legado duradero de servicio y devoción a nuestro país”.