Tras meses de especulaciones sobre un posible divorcio entre Jennifer Lopez y Ben Affleck, finalmente se acaba de confirmar que su relación ha llegado a su fin. La noticia se publicaba esta mañana por la revista TMZ, experta en este tipo de exclusivas, y confirmada por People, asegurando que ha sido la cantante quien le ha solicitado el divorcio al actor y director de cine, tras dos años de matrimonio.
Según informa el citado medio, los problemas surgieron con ausencias notables, como la ausencia de Affleck en el cumpleaños de la artista y sus apariciones públicas con sus hijos por separado. A mediados de mayo, diversos medios informaron sobre posibles dificultades en su relación. Además, y según una fuente anónima citada por People el 20 de mayo, la pareja enfrentaba diferencias significativas en cuanto a la forma en que manejaban la atención de los medios: “Ben detesta el foco de atención y se siente incómodo con él. Jennifer, en cambio, siempre ha tenido una perspectiva diferente”.
Días antes, se había publicado que la pareja ya vivía separada; y justo durante esa semana Page Six sugirió que su ruptura parecía inevitable. En este contexto, López decidió cancelar abruptamente su gira “This Is Me”. El comunicado en su boletín, OnTheJLo, indicaba que “Jennifer se tomará un tiempo para estar con sus hijos, familia y amigos cercanos”. Sin embargo, hubo un momento de incertidumbre cuando la hija mayor del cineasta, Violet Affleck, apareció con un vestido que JLo. ¿Reconciliación a la vista? Se preguntaban los medios.
Pero su relación, que ha estado marcada por altibajos, parece que esta vez ha llegado a su fin. En concreto, el 20 de agosto, López presentó los papeles de divorcio en el Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles, sin asistencia legal, estableciendo la fecha de separación el 26 de abril, poco antes de la MET Gala, a la que asistió sola (fecha coincidió con los primeros rumores serios sobre su separación).
Fin a una segunda oportunidad
Así, ponen fin a su segunda oportunidad, ya que su historia empezó en 2002 durante el rodaje de la película Gigli y su relación rápidamente se convirtió en una de las más mediáticas de Hollywood. En noviembre de ese año, Affleck le propuso matrimonio, pero en 2004 la boda fue cancelada debido a la presión pública. ¿La historia se repite?
Tras su ruptura, cada uno tomó caminos separados, con Jennifer López casándose con Marc Anthony y Ben Affleck con Jennifer Garner. En 2021, tras sus respectivas separaciones, y después de casi veinte años separados, López y Affleck se reencontraron y se comprometieron de nuevo. En julio de 2022 celebraron una boda secreta en Las Vegas y, un mes después, en Georgia.
Aunque ella ha confesado en varias entrevistas estar muy enamorada, la relación no ha logrado perdurar. “Siempre sentí que lo que teníamos era un amor genuino y verdadero. La gente cercana a mí sabe que él fue una persona extremadamente especial en mi vida. Cuando nos reconectamos, esos sentimientos seguían siendo muy reales para mí”, comentó López a Vogue en su portada de diciembre de 2022. En esa misma época, Affleck describió a su esposa diciendo: “Jennifer tiene algo innato, una bondad mágica y un corazón lleno de amor”.
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El divorcio más mediático del mundo
Antes de este verano, mientras la pareja parecía distanciada, la situación se hizo aún más evidente con la cancelación inesperada de la gira de la artista y la compra de una nueva mansión del ganador de un Oscar por su guion en El indomable Will Hunting. Así, su historia de amor llega a su fin, marcando el fin de un romance que ha sido tan intenso como efímero.
El interés global y la cobertura exhaustiva que ha recibido este divorcio supera, en muchos aspectos, incluso el famoso divorcio entre Brad Pitt y Angelina Jolie (su relación fue apodada “Brangelina”) , anunciado en septiembre de 2016; un evento de cobertura mediática global. La noticia de su divorcio se volvió viral, con los medios de comunicación de todo el mundo enfocándose en cada detalle, desde las razones detrás de la separación hasta las implicaciones para sus seis hijos adoptivos y biológicos. Finalmente, este verano finaliza siendo testigo del desenlace definitivo de los “Bennifer”.