La madrugada trajo una devastadora confirmación para el Levante español. Al menos 51 personas han perdido la vida tras el paso de la DANA en Valencia que ha azotado la Comunidad Valenciana. Las fuertes lluvias e inundaciones que comenzaron ayer han dejado un rastro de destrucción en numerosas localidades, con Torrent y Paiporta como algunas de las más golpeadas. Mientras tanto, la tragedia aún no se ha cerrado: en Letur, Albacete, la búsqueda continúa para encontrar a seis personas que permanecen desaparecidas. Las previsiones meteorológicas para hoy son un poco más esperanzadoras.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, confirmó la pasada medianoche que habría fallecidos. En respuesta a la gravedad de la situación, las autoridades activaron esta mañana una nueva alerta a través del sistema Es-Alert, pidiendo a la población que evite desplazarse por carretera debido a la persistencia de las lluvias.
Impacto en las localidades por la DANA en Valencia y respuesta de los servicios de emergencia
Desde los municipios del interior hasta la capital, Valencia ha sido testigo de desbordamientos de ríos y barrancos. El río Magre, en la zona de Utiel, fue uno de los primeros en desbordarse, provocando inundaciones en localidades como Chiva, donde se registraron cifras récord de precipitación, alcanzando los 500 litros por metro cuadrado, el mayor en las últimas dos décadas. La fuerza del agua, que avanzó hacia el sureste, arrasó el terreno e inundó la comarca de La Ribera Alta, causando estragos en la zona metropolitana de Valencia. Especialmente, en el sur de la capital y áreas como Castellar, Forn d’Alcedo y La Torre.
El despliegue de medios para la atención de la emergencia ha sido de una magnitud considerable. A las unidades locales de bomberos y policías se unieron efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), quienes han enfrentado el reto de rescatar a cientos de personas atrapadas en techos de edificios, vehículos y fábricas. La situación en puntos como el polígono industrial de Ribarroja fue especialmente crítica, con decenas de trabajadores atrapados en sus lugares de trabajo y conductores que permanecieron durante horas en carreteras inundadas como la A3 y la V30.
La fuerza del agua y los esfuerzos de rescate
La fuerza de la naturaleza de esta DANA en Valencia se reflejó en escenas impactantes: torrentes de agua que desplazaban vehículos, personas atrapadas en sus coches y puentes destruidos. En Paiporta, un puente fue arrastrado por el caudal, complicando el acceso de los equipos de rescate y aumentando la angustia de quienes esperaban auxilio.
Los servicios de emergencia, a pesar de los esfuerzos, tuvieron dificultades para alcanzar algunas zonas aisladas por la inundación. Según Carlos Mazón, las labores de rescate se vieron obstaculizadas no por falta de medios, sino por la imposibilidad de acceder a ciertos puntos debido a las condiciones.
En redes sociales, los vídeos y mensajes de auxilio se multiplicaron rápidamente. Las imágenes de torrentes arrasando calles y personas arrastradas por la fuerza de la corriente se volvieron virales. Al mismo tiempo, estos canales modernos también ayudaron a localizar a personas atrapadas y a coordinar la asistencia con los equipos de rescate.